𝐽𝑢𝑒𝑔𝑜𝑠 𝑑𝑒𝑙 𝑑𝑒𝑠𝑡𝑖𝑛𝑜 • 𝒀𝒆𝒐𝒏𝑩𝒊𝒏 𝑻𝒂𝒆𝑮𝒚𝒖

118: Dos días

No entendía como todo había sucedido tan rápido, seguía sin comprender que a pesar de todo lo que hicieron había sido en vano.

El mayor seguía llorando, a su lado estaba Soobin y Yoongi quien había hecho una visita sorpresa a su amigo pero se encontró con una escena no muy agradable.

—¿No sería mejor darle una pastilla que le mando su psicóloga? —pregunto Jimin susurrandole a Soobin.

El chico rápidamente asintió y se puso de pie para buscar las medicinas del peli-azul.

Soobin se sentía mal, no podía ni siquiera comprender todo el dolor que Yeonjun estaba sintiendo en esos momentos.

Todo había pasado tan rápido, pocos meses atrás había empezado la pesadilla de los Choi, creyeron que todo cambiaría al haberse percatado muy rápido de lo ocurrido pero al final resultó que nada salió como lo esperaban.

Después de mucho esfuerzo para que Yeonjun tomará la pastilla y de unos largos minutos esperando a que hiciera efecto, el chico cayó rendido sobre la cama durmiendo plácidamente.

—¿No dijeron que estaban actuando rápido? —pregunto el pálido.

Soobin asintió. —Avanzo demasiado rápido, lo que tomaba era para un tratamiento de largo plazo pero todo debía ser algo inmediato.

—¿Tu como estas? ¿Taehyun? ¿Cómo se sienten? —dijo con preocupación.

—Pasar por esta situación dos veces es... agotador, Taehyun está perdiendo las ganas y está dejando de seguir con su tratamiento.

Jimin se puso a platicar un poco con Soobin demostrándole todo el apoyo que le daba. Yoongi se limitó a hablar ya que solo veía a su amigo completamente dormido como si minutos atrás no lo hubiera visto casi desmayarse de todo lo que había llorado.

La pareja había decidido irse de la casa del peli-azul para dejar que Soobin tuviera su tiempo y cuidara de Yeonjun.

Apenas llegaron al automóvil, Jimin inicio a llorar sin hacer ningún tipo de ruidos, solamente dejaba que las lágrimas bajarán poco a poco sin pena alguna de que Yoongi lo viera.

—Quiero ir con papá.

Yoongi solo asintió mientras ponía el auto en marcha, durante todo el camino Jimin fue llorando, nunca creyó que se encontraría en una situación así.

Soobin se quedó sentado mientras veía a Yeonjun dormir, sus mejillas tenían lágrimas secas y sus ojos se estaban hinchando poco a poco.

Tomo su teléfono y le marco a su hermano, por la hora supuso que tendría que estar llegando a casa de la escuela. Después de varios tonos el rubio contesto notandose completamente sus nulas ganas de querer hablar con el.

—¿Qué?

—¿Ya estás en casa?

—Si.

Por el tono de voz de su hermano, Soobin supuso que Taehyun no quería ni siquiera ver la luz del día.

—¿Cómo está Beomgyu?

Un largo suspiró se escuchó. —Esta durmiendo, hoy fue a pedir una baja temporal de solo un semestre. Prepararé sus maletas para que se vaya con su mamá.

—¿Las tuyas cuando las harás?

—Mañana.

Un pequeño silencio se formó entre ambos, no sabían cómo manejar la situación y Soobin temía que esto llegará a afectar a Taehyun más de lo que ya lo estaba afectando.