Peligrosa Adicción (Prime Borrador )

Oruga

Dominic Chein

Camino de un lado a otro, generalmente quien se encarga de romper sacos de boxeo es Kanat, yo soy más de correr por allí, pero hoy he roto ya un par, Rebbeca ya se ha casado seguramente, pensé en enviarle un regalo de bodas, como todo un buen perdedor, pero todas las ideas eran patéticas, supongo que debo dejarla ir y la idea me choca porque en vez de sentirme miserable por la boda de Rebbeca , me siento miserable por no haber seguido a Ámbar, no le debo explicaciones, ella y yo no somos nada, pero yo si quiero saber que carajos hacia allí y es Antonieta que me va a explicar toda esa mierda.

Salgo del cuarto de boxeo y me dirijo a mi habitación a darme una ducha.

—Dominic —la voz de Varvara me hace girarme a medio camino, sus cabellos rubios y enrulados le caen por todo el rostro, una mancha de pintura en la cara y un montón de esta en su ropa.

—¿Que haces princesa? —me acercó a ella, ya no está tan pequeña como para tener que agacharme pero aún así sigue siendo una enana.

—Te tengo una sorpresa —me fijo que lleva un papel escondido detrás y una sonrisa preciosa—. Cierra los ojos.

Los cierro , y confío en ella, se que sus dibujos son maravillosos.

—Abrelos , sorpresa —sonrio al ver el dibujo , realmente tenemos toda una artista en la casa.

—Es precioso enana —beso su frente y veo la emoción en sus ojos—.

—Atras escribí algo para ti —sigue emocionada mientras yo aún estoy viendo una versión mía entre líneas y una versión de ella con un pastel estendido. 

"Eres el mejor hermano del mundo" te kuiero Varvara "

—te quiero se escribe con q —le envuelvo en mis brazos — tu eres mi mejor hermana y mi preferida, ya sabes eres más inteligente y guapa que Kanat.

Eso hace que sus ojos brillen.

—Tu eres más bonito que Kanat pero si le dices que dije eso —me amenaza mientras se limpia las manos de su vestido —. Lo negare, no perderé mis donas por tu culpa.

—Señorita Varvara es la hora de su clase piano —grita por el pasillo Wendy , yo sonrió al ver a Varvara correr y escabullirse por el pasillo.

Wendy me mira y se queda helada, sus ojos viajan de el suelo hasta mi rostro en una revisión bastante descarada.

—Lo siento señor Dominic pensé que Varvara andaba por aquí —sus palabras salen atropelladas y no puedo evitar reír, se gira y escapa de mi presencia como si tuviera algún problema estomacal.

Me ducho y me coloco una americana negra, jeans oscuros como el cielo nocturno y unos botines Santoni negros, reviso mi teléfono solo para ver si Kanat ha publicado algo o si me ha mandado algo pero no hay señales de vida por su parte, decido no preguntar, quizás es mejor no echarle sal a las heridas aunque luego se infecten.

Bajo las escaleras sintiéndome con ganas de olvidarme de todo una vez más, ayer después de ver a Ámbar huir , bebi tanto que termine llegando casi arrastras a casa, me alegro de que Pavel estuviera cerca de mi.

Decido llevarme uno de los coches de Kanat, el Maserati verde que por cierto le acaba de llegar y que no ha estrenado, salgo al garage y observó la cantidad de coches que tenemos de verdad que Kanat es un comprador compulsivo, tiene quizás unos quince coches deportivos y con el que acaba de llegarle serían dieciséis sin contar con los cuatro todo terreno y con mi sonata, yo definitivamente soy el ahorrador y ecológico de los Chein, aunque no me importa usar de vez en cuando algo que contamine el mundo igual estamos jodidos, es inevitable el fin de este sistema de mierda.