sueños

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Dominin Chein

Un dolor punzante revienta mi cabeza continuamente, abro los ojos y vuelvo a cerrarlos, intento girarme boca arriba pero fallo en el primer intento, cuando por fin lo consigo, abro los ojos, estoy en mi habitación y al menos estoy completo.

Respiro profundo y paso mi mano por mi cabello, me urge una ducha, me quedo allí pensando en ese sueño que tuve, si tuviera todos los días ese sueño cada vez que me alcoholizo quizás terminaría con un coma etílico, escuchar su voz en mis sueños, creer que de verdad ella me ha llamado me hace sonreír como un patético y no me importa si estoy siendo un patético, busco mi teléfono y lo consigo al lado de la almohada , sin una gota de bateria se ha apagado. Lo pongo a cargar y me voy al baño.

Abro el agua de la ducha fría , está me golpea como tiene que golpear, de un golpe y sin pedir permiso, mientras pienso en Ámbar voy colocándome el jabón, mis cabellos están más largos que de costumbre y en el espejo veo una barba horrible que me ha estado creciendo, eso tiene que irse me digo , pero no hago nada para cambiarlo, decido terminar con la ducha e ir a desayunar mi estomago ruge como si fuera un león.

Siempre me pareció horrible ese cuadro azul de bayenas que eligió Kanat, es más lo odio, paso sin verlo porque con el dolor de cabeza y el impacto visual de esa cosa podría quedar con una perdida visual.

—Buenos días Vegoña —la saludo con un beso en la cabeza porque está sentada y ella me mira como si sospechara de que acabo de chocar otro coche.

—Buenos días Dominic ¿Estás bien?

—Tuve un buen sueño —sonrio al recordar mi sueño.

Es Kanat que levanta una ceja con esa inquisición típica de su personalidad.

—¡No me mires así, no fueron húmedos! —una pena total, Vegoña se ahoga con el café y yo no puedo evitar sonreír, me siento un poco de vuelta.

Me siento en el comedor y veo a Vegoña hacerle una seña a Kanat.

—¡Queremos decirte algo!

—¿Y Varrvyra?

—Esta con Stella y los Vugoski en el jardín —explica Kanat.

—¿Ya le dieron fecha de la adopción?

—Bueno que la dueña del orfanato sea tu amiga fue de utilidad , ha agilizado todo, creo que en un mes podrán tener la custodia parcialmente e irse a Venezuela —me explica Vegoña mientras pica un jamón.

—Te queremos decir algo —vuelve a decir Kanat y yo solo le hago señas para que hable—. Vegoña y yo hemos decidido casarnos, algo sencillo y muy familiar por respeto a la abuela Adoracion.

—Adoracion no querría que dañarás tu boda de esa forma —miro a Vegoña con toda sinceridad me pareció la doña muy alegre para que estén así —. Creo que estaría feliz con una boda alegre.

A Vegoña se le hacen agua los ojos y yo suelto una maldición interna no era mi intención hacerla llorar. Kanat le abraza y me da una mirada asesina, yo solo me encojo de hombros cuando Vego se recupera Kanat vuelve su atención a mi

—Quiero que seas mi padrino de bodas —dice Kanat y yo me quedé casi sin habla, pensé que podría elegir al boxeador o a Dimitri o incluso a Pavel Pero no a mi.

Trato de buscar unas palabras pero no salen al principio. Me levanto y le doy un abrazo, aún lleva las muletas, pero se ve mejor que con la silla.

—No seré el padrino de una boda patética Vegoña Vugoski ¿Ya pensaste en el lugar?

—El jardín de la mansión será l la próxima semana —la miró decepcionado podíamos haber organizado algo a lo grande, bueno al menos tendremos flores coloridas.

—Vale, pero contrata a alguien que haga de ese lugar algo digno en tan poco tiempo , y compra un traje que te permita bailar.

Vegoña sonríe divertida.

—Anotado padrino de bodas.

—Mas te vale porque una novia sentada en la boda es señal de que no es feliz.

—Bueno ya veo que te emociona la boda —dice Kanat divertido mientras le toma la mano a Vegoña, una sensación de alegría mezclada con tristeza se mete en mi pecho, al menos uno de los dos ha sobrevivido a papá.

—Bueno para esos son los padrinos, por cierto este padrino debe organizar una fiesta de solteros, te prometo Vegoña que no abra stripeer —le guiño mientras Vegoña me mira con los ojos achicados pero hay diversión en estos.

—No quiero despedida de soltero Dominic déjate de tonterías esto no es una película romántica de esas que ves escondido.

—Imbecil —digo mientras le doy la espalda, esas películas son las mejores.

El sueño con Ámbar me hace sonreír, por un segundo pienso que pudo ser real y abro mi teléfono, busco el buzón de llamadas internacionales y no hay nada, lo se era demasiado cierto para ser real. Pero al menos soñarla me hace feliz.

Le escribo a Danil para saber si ella está bien, y efectivamente está feliz , y el rubio patético ese Rambo ¿Quien se llama Rambo? Que idiotas tus padres y el, está allí con ella como un pegoste de esos bien malos.

Subo al auto para ver a las chicas que rescatamos está vez, una sensación de calma me arropa al saber que he podido ir dándole vida a todas ellas, pero un tormento se acumula en mi interior al saber que hay muchas a las que no pude rescatar del infierno que están viviendo, supongo que así es la vida, a unos les toca una vida más bonita y a otros les toca darse duro con las rocas en una caída libre con agua torrencial y esperar que un milagro los ayude a llegar a la orilla, sin saber que quizás se mueran por el impacto.

Peligrosa Adicción (Prime Borrador )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora