Destinadas // Meddison

Trampa Pactada

Narra Addison

Hoy es día de juicio para mí, no iremos formalmente a un juzgado con todo y jurados. Pero sí debo reunirme con mi abogado y con el abogado de Derek para dar por finalizado ese maldito divorcio de una buena vez. Apenas pasó una semana desde aquella horrible noche, las marcas en mi rostro siguen ahí, ya casi no se ven, pero las autoridades piensan usar eso para meter preso a mi ex marido lo antes posible.

Creo que lo único bueno que me pasó últimamente fue conocer a Meredith, me dejó quedarme con ella en su casa y me abrazó cada noche, sin falta. A diferencia de Derek, su abrazo no se desvanecía con el amanecer, se quedaba conmigo para darme ese cariño que tanto necesitaba.

- ¿Estás nerviosa? - preguntó Meredith, mientras yo observaba mi reflejo de forma obsesiva.

- Sí...no sé qué haré cuando lo tenga frente a mí - dije, respirando hondo para darme fuerzas a mí misma, siento que voy a derrumbarme.

- ¿Qué harás con el embarazo? ¿Vas a decírselo? - preguntó, apoyándose en el marco de la puerta.

- No lo sé, Mer, no tengo idea de qué hacer con mi vida ahora mismo - respondí, molesta y frustrada.

- Lo siento, no quise presionarte, te apoyaré en lo que decidas - dijo, con una mirada dulce y comprensiva.

- Está bien, gracias por aguantarme y por dejarme estar contigo ésta semana - dije, dándole un fuerte abrazo.

- Para eso estoy, no te preocupes - dijo, besando mi cabeza y haciéndome sentir segura.

- ¿Me esperarás afuera del tribunal? - pregunté, temiendo que Derek pudiera volver a manipularme si iba a ese lugar yo sola.

- ¡Claro que sí! Estaré detrás de esa puerta si es necesario - dijo, acariciando mi mejilla para hacerme sonreír.

Es maravillosa, no sé qué hice para merecerla, pero amo tenerla en mi vida.

Narra Meredith

Estoy muy preocupada, las hormonas tienen a Addison muy sensible y susceptible, temo que volver a ver a Derek pueda alterarla demasiado o hacerla caer de nuevo. Pienso quedarme en ese lugar y escuchar todo, no la dejaré sola.

Una vez en el juzgado, acomodé su cabello y le dí mis mejores ánimos para que tuviera confianza.

- Todo saldrá bien, recuerda mantenerte firme, si necesitas algo, sólo dímelo, estaré en la puerta - dije, robándole un beso de forma inconsciente, poniendo todo el ambiente tenso y raro, soy una idiota.

- Mer...acabas de...-

- Sí, lo siento, no sé por qué hice eso, perdóname, vé allá y destrózalo - dije, sobando su hombro de forma amistosa para evitar hacerla sentir incómoda.

- Gracias por acompañarme - dijo, sin darle importancia a ese pequeño beso errado.

Tomó aire y entró a esa sala para saludar cordialmente a los abogados y al juez que dictaminaría todo el asunto del divorcio y de la denuncia por violencia de género.

Hace un par de días, me interrogaron y también a mis amigos para obtener testigos en contra de Derek, también le tomaron fotos a las heridas de Addison como parte de la evidencia, tiene absolutamente todo en su contra, debe caer.

Pegué mi cara a esas puertas de madera para no perderme ni una sola palabra, debo agradecer que la acústica de éste lugar es realmente buena. Todo transcurrió con normalidad, ellos dos casi no hablaron entre sí, fue una conversación entre abogados, muy burocrática y muy justa, eso es bueno.