Si te vuelvo a amar

Capitulo 17

Ella no reconocería mi rostro, pero si podría reconocer mis ojos, tenia que creer que ella reconocería mis ojos.

-¿Dormiste bien anoche?
-Sí, bueno no sé, tuve un sueño raro- le respondo a Derian mientras caminamos por el pasillo.
-¿De qué era?
-No me acuerdo... Solo era de algo ¿Kilian? No sé quién sea.
Derian deja de caminar.
-¿No lo recuerdas? -pregunta.
-¿Qué cosa? -respondo confundida. Derian suspira.
-Una vez soñaste que le decías Kilian, que ese era su nombre.
-Oh... Pero es Andrei.
-Si... -dice Derian -¿Y de que era el sueño?
-No lo recuerdo. Solo me acuerdo de ese nombre, eso es todo. Una prueba más de que estoy loca.
-Todos, en realidad, estamos un poco locos.
Suena la campana. Hora de ir a clases. En la primera hora nos dan los resultados de la prueba psicológica que nos habían hecho.
-¿Dasha Ferguson?
-Presente -paso por los resultados y los leo.
¿Qué rayos? Dice que me conozco un 80% pero tengo una cierta valentía dentro de mi, que no me subestime.
Si claro.
Termina las clases, termina el día, llega la noche. Y no puedo dormir.
En mi mente se creó un nuevo espacio, para un miedo. El miedo de dormirme y despertarme de nuevo en la habitación del hospital, desde ese día me había resistido para que ese miedo creciera pero últimamente ya no puedo. ¿Y si tienen razón? La explicación del Doctor era la más lógica, pero ¿por qué olvide los sueños? Eso también es extraño. Ojalá también hubiera olvidado cómo se sintieron, pero no, las sensaciones están tan vivas como fuego consumiendo mi piel. Son sentimientos complejos, profundos... No quiero darles nombre, aún así, estoy segura que tienen uno.
Veo la hora 2:00 a.m. Genial, alguien tendrá ojeras mañana.

-¿Mala noche de nuevo? -pregunta Derian.
-Algo así.
El día sigue, de manera monótona. Excepto por la corbata del Profesor Crawford, era realmente fea.
-¿Ya tienes a tu cultura? -me pregunta al final de su clase.
Arrugo la nariz.
-Me temo que no...
-Bueno Dasha, el viernes tendrá la oportunidad ‪de elegir una ¿Irá al museo?
-Claro.
-¡Genial! Me dice cuando tenga una para poder asesorarla.
-No sabe cuánto agradecería eso.
Cuando llegó a casa huele a Hot Cakes, eso significa que mamá está de buenas.
-¡Estoy en casa! -digo al entrar. Mamá sale sonriendo.
-Esta confirmado ¡tu hermano si viene para las vacaciones de invierno! -empieza a bailar de felicidad. Esto es raro.
-¿Jude?
-¿Qué otro?
-No sé mamá, tal vez tenga otros hermanos por ahí -la codeó y ella me da un zape.
-Chistosa.
Mi familia está de buenas ¡Jude vendrá! Él es una de las personas más geniales que conozco, si estuviera aquí definitivamente sería de mucha ayuda con todo esto...
Ug, odio pensar en eso pero mi mente no deja de ir ahí.
Llega la noche y es la misma situación. No quiero dormir, tengo miedo. Pero soy humana y en algún punto me quedo dormida.
Sueño con hospitales fríos, jeringas que me atraviesan junto con ojos que leen los pensamientos. Despierto sudando.

-¿Otra mala noche?
Estoy odiando esa pregunta.
-Me quede hasta tarde haciendo la tarea.
-¿Ya tienes tu cultura?
-No -respondo -¿a ti cómo te va?
-Bien, el Profesor Carson me está ayudando de maravilla, ¡oh! Por cierto Alana regresa la otra semana.
Alana, una de mis pocas amigas y la chica que conozco que habla más que nadie, es tierna hasta la médula y tiene unos chinos incontrolables.
-¡Que bien! La extraño tanto.
-Ella también, su papá al fin la dejo regresar.
Sus padres están divorciados, por eso pasa una temporada con uno y la otra con el otro.
Vamos a nuestras clases, terminan, voy a casa, como, hago quehacer, hago tarea, hablo con Derian, llega la noche, sueño con habitaciones de hospitales oscuras y pequeñas.
Ese podría ser el resumen de toda mi semana. Las ojeras en mis ojos se hacen más grandes, me cuesta concentrarme, me empezó a sentir ¿asfixiada?
-¿Dasha?
-¿Si? -respondo.
-¿Escuchaste lo que dije? -dice Derian.
-No, lo siento.
Él suspira, sabe que no estoy bien, pero está esperando a que yo le diga.
-Ahí viene Alana -me dice.
Me levanto y la busco entre en los árboles, es la salida así que hay muchas personas. Entonces la veo, esta corriendo hacia nosotros con su hermoso cabello negro.
-¡Dasha! -llega a mí y me abraza, tan fuerte que casi nos caemos.
-Alana... -suspiro en su cabello.
-Te extrañe tanto -su voz se quiebra. Ella es muy sensible.
-¿Y qué hay de mi? -dice Derian.
-¡Oh a ti también tonto! -deja de abrazarme y va con él.
Por primera vez en muchos días siento paz.
-¿Ya te dije que te vez más guapo?
-No, pero ya lo sé -le dice Derian.
Si mi mundo se redujera a este momento sería tan feliz. Pero no, escucho un motor de una moto. Inmediatamente volteo y comienzo a buscar. Cuando veo al chico es otro, no es él...
Desde que deje de ir por Camilla siempre que escucho a una moto me inquieta.
Volteo y Derian me está viendo, se dio cuenta.
-Así que ¿de qué me perdí? -dice Alana.
Uf, de mucho.
-Muchas cosas, luego te las digo, por cierto mañana es la visita al museo, la que te había dicho ¿recuerdas? -dice Derian.
-Claro, aún no sé cuál cultura elegir así que amaría ir. Además de que me encantan los museos -dice Alana como niña pequeña. Eso también amo de ella, su autenticidad.
-Bueno vamos a comer que muero de hambre -digo algo tan típico de mi.
Llegamos a un pequeño restauran, pero que cocinan riquísimo. Pedimos lo de siempre.
-Y que tal tu ¿conociste a alguien? -le pregunto a Alana.
Rueda los ojos.
-No Dasha, el odioso de mi hermanastro estuvo molestándome todo el tiempo así que casi no salí.
Derian y yo compartimos miradas. Le gusta su hermanastro (solo es político) pero nunca lo va a admitir. Es sexy. Lo apruebo.
-Apuesto que eso te molestaba muchísimo -dice Derian con gran sarcasmo.
-Derian calla y que hay de ti ¿Bastian ya te dijo?
-¿De qué hablas? -pregunto extrañada.
-¡Oh Dios mío! ¿No te ha dicho nada? -Alana se tapa la boca
-No...
-Me va a matar -pone su cabeza sobre la mesa.
-¿De qué hablas Alana? -pregunta Derian.
-Es que pensé que ya te lo había dicho -dice ella.
-Si pero no lo hizo, ahora dime.
-Le gustas -dice rápido.
-¿Le gusto? -pregunto.
-Si les gustas desde kínder... Desde que cuidaron a la mascota del salón juntos.
¿Cuidamos a la mascota del salón juntos?
-¿Eso pasó? -dice Derian.
-No tengo idea...
-¡Ni siquiera te acuerdas! Pobre Bastian me va a matar ¿No te gusta?
Unos ojos negros con matices verdes vienen a mi mente.
-No -respondo -es solo mi amigo.
-Friendzone le dicen -dice Derian riéndose.
-Cállate -responde Alana -pero él es tan dulce y lindo ¿En serio no te gusta?
-No -me rasco la nuca. Esto se esta poniendo incomodo.
-La pasó mal cuando en la secundaria estabas enamorada de ese chico -dice Alana de manera triste.
-¿Quién? -pregunta Derian- ¡Oh ya! -alza las cejas -¡Ya se quien! No me digan.
-Illya Kuryakin -mencionó.
-¡Lo sabía!
Su nombre suena algo así como illya.
-Por cierto ¿qué fue de él? -dice Alana.
-Podemos hablar de otra cosa -digo, ya empiezo a sentir el sonrojo.
-Yo te cuento la historia -dice Derian, lo fulminó con la mirada -tenemos a la dulce Dasha de 15 años, cuando de pronto llegó un chico nuevo, era extranjero, así que fue toda una sensación en la escuela. Pero él era diferente, aplicado e inteligente, no un rompecorazones, como cualquiera con su apariencia habría pensado. Y nuestra chica se empezó a enamorar de él.
-Claro -dice Alana -pero... ¿luego qué? -es muy olvidadiza.
-Nuestro afortunado chico se enamoro de Alicia Vinciguerra, la chica más, como decirlo... Accesible de la escuela. Y así le rompieron el corazón a Dasha.
Derian me abraza.
-Mi único consuelo es que a él también se lo rompieron -digo.
-¿Así?
-Si Alicia se lo rompió tres años después -le responde Derian.
-Uh ¿Va en nuestra universidad no? -pregunta Alana.
-Si, estudia en la Facultad de Ciencias Químicas -respondo.
-¡Pero qué bien informada estas Dasha! -se burla Derian.
-Ustedes preguntaron.
-¿Mañana irá al museo? -dice Alana.
-No creo, no es de su área.
-Esperemos que si... -me alza una ceja Derian.
Seguimos bromeado y haciendo sonrojar a Alana cuando habla de su hermanastro. Nos despedimos de ella y voy a dejar a Derian.
-¿Le piensas decir a Alana de Andrei? -pregunta.
Suspiro.
-Supongo que no, ya no debo pensar en él.
-Pero lo haces.
¿Con esos ojos tengo otra opción? Y viene unas imágenes en mi cabeza, estamos en un auto y él me ve con unos ojos tan tristes que me rompen el corazón, luego se acerca y...
-Lo dejare de hacer -respondo con mi corazón latiendo rápido. Sus labios los siento tatuados en los míos.
-No lo harás Dasha, hasta que resuelvas todo dejaras de pensarlo y ¿sabes cómo puedes resolverlo? -niego con la cabeza, no tengo palabras para responderle por qué sé que alguien como él no se resuelve, se vive con cada fibra de ti -háblale, acércate a él, ve por qué pasan esos sueños.
-No creo que él tenga la respuesta -respondo.
La respuesta está detrás de esas miradas tristes y besos dulces.
-Lo sabrás hasta que lo hagas.
Llegamos a su casa y me despido de él. Me duermo temprano rogando que no sueñe nada, mañana será un día largo.
Sueño a que me ahogo mientras estoy atada a una camilla.
Al día siguiente estamos en el museo y tengo un genio de los mil demonios pero la presencia de Alana me calma un poco.
-Estuve investigando y no somos la única facultad aquí -me susurra Derian.
-No me interesa.
-Claro que no le interesa -se mete Alana -Bastian está aquí.
Lo señala y lo veo justo cuando el voltea. Incomodo.
-Por el pasillo 3B está la cultura China, una de las más antiguas. En el 4B la cultura Babilónica -está hablando el guía -5B la cultura Egipcia...
¿Egipcia? Podría funcionar... Ahora que lo pienso siempre me ha interesado, tengo hasta un disfraz de una egipcia. Me dirijo al pasillo 5B, dejo atrás a Alana y a Derian.
Entro, hay muchos utensilios y tablas.
Me dirijo a las tablas, en algunas hay personas, o más bien dioses. En otras hay jeroglíficos, la forma de escritura que ellos desarrollaron creo que es única y hermosa. Sigo caminando y veo los jarrones. Hay uno que es blanco y tiene a una mujer...
-¿Te puedo ayudar en algo?
Una voz suena detrás de mí, doy la vuelta poco a poco, es Andrei.
Demonios.
-Solo estaba viendo... -digo vagamente. Lo observó, se ve igual de cansado y también tiene una de esas tarjetas colgando de su cuello que son de los que trabajan en el museo.
-¿Trabajas aquí?
-Sí, bueno en realidad no -baja la vista evitando mi mirada. Es como si supiera que puedo descifrar el mensaje oculto en sus ojos -soy voluntario, una buena carta de recomendación no le hace daño a mi expediente.
Se hace un silencio ensordecedor, puedo escuchar como zumban las lámparas de las exhibiciones.
Extrañamente no es incomodo. Excepto por su mirada evitándome. ¿Qué hay en tus ojos que no quieres que vea?
-¿Qué estudias? -pregunto.
-Arqueología -está inmerso viendo los Derbakes -Supongo que eres del grupo de chicos que vinieron de la Facultad de Historia.
-Sí
¿Qué ocultas?
-Nos dijeron que están haciendo un proyecto y que los asistiéramos con cualquier duda. Así que si tienes una... -dice suavemente. Según su posición podría decir que parece casi tímido. Casi...
-En realidad no sé de qué cultura hacerlo, la Egipcia llamo mi atención, pero no estoy segura.
-La cultura egipcia es muy interesante esta llena de grandes misterios pero también de simbolismo. Todo lo que hacían tenía un significado más allá de lo evidente, y su arte es, de una manera extraña, hermoso. Y sus esfinges, bueno dejan sin palabras a cualquiera.
Es la primera vez que lo veo así, hablando apasionadamente sobre un tema.
-Y ni hablar de su edad dorada -continua diciendo -cuando la alcanzó no había punto de comparación con alguna otra cultura.
Se detiene, al parecer se dio cuenta que su entusiasmo crecía. Su mirada ahora va a los jarrones.
-Sí, creo que me has convencido -digo. El fantasma de una sonrisa aparece -Siempre he pensado que es una de las culturas más impresionantes, de manera exterior como interior.
-Bueno ahora ya tienes tu cultura -está viendo la salida, creo que se quiere ir.
-¡Dasha! Hasta que te encuentro -es Bastian- ¿interrumpo?
Uh uh.
-Para nada -dice Andrei.
-Ya es la hora de la comida así que -Bastian pasa su mirada de él hacia mi, intenta descifrarnos.
-Gracias -respondo.
Bastian se queda parado en el marco de la entrada. Definitivamente esta es la situación más incomoda de mi vida.
-Ahorita los alcanzó Bastian.
-Oh claro lo siento -empieza a dar vuelta -no tardes Dasha.
Lo último sonó como una advertencia. Y se va.
-Por cierto -me vuelvo a Andrei -¿Cómo sabes mi nombre?
-Camilla es tu prima así que... -se encoge los hombros.
Su respuesta me molesta, así que es por Camilla. Además de su mirada evasiva.
-Bueno tengo que irme, gracias por ayudarme.
Empiezo a salir de la habitación, cuando de repente una idea viene a mi.
-¿Cuál es tu nombre? -me detengo y lo veo.
-Kilian.
Y por fin alza su mirada encontrando la mía.

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Hola a todos! *3*

Primero gracias a todos los que me leen, el numero de personas ha crecido mucho así que muchas pero muchas gracias. Espero que les guste este capitulo a mi me encanto! como todos xD

Disfrútenlo :*  Los quiero <3