Capítulo 20.

4.1K 62 4
                                    

Capítulo 20. ¿Por qué?

Empezaba a tener un poco de hambre... pero aún no era hora de comer, o eso creía, por qué no sabía exactamente cuándo me había levantado. Mi vida era un completo caos, al menos desde que había llegado al internado. En tan solo un día y medio, me habían pasado cosas que ni en los dieciseis, casi diecisiete años que tenía. Y todo era gracias a Carlos, a Eve, a Daniel, a Lizz, y a mi compañera de cuarto.

Carlos... no me lo podía sacar de la cabeza... Me había hecho dudar de Eve, y había puesto mi vida patas arriva. No entendía cómo podía llegar a estar tan obsesionado conmigo, si solo era un juguete más de su colección. Pretendi vengarme de él, y acabé besándole. Dos veces. Y las dos veces... más incréibles de mi vida.

Daniel, por otro lado; era simpático. Pero también demasiado tímido para mi gusto. Por eso acepté el reto personal de quitarle esa personalidad de raíz.

Caminaba lentamente por la primera planta, cerca de la puerta que daba a los jardines. Pensaba demasiado en todo lo que había pasado. Pero había algo que seguía sin cuadrar. En estos dos días, ni siquiera me había planteado cambiar a Carlos, y, me había faltado tiempo para hacerlo con Daniel. Y simplemente... no concordaba. Quién verdaderamente se merecía el cambio era el psicótico manipulador, pero eso era un caso perdido.

-¡Hola cielo! ¡No te he visto en toda la mañana!

Me giré hacia mi derecha, y me encontré con Eve. Pero no estaba sola. Tres chicas delgadas y bastante más altas que ella caminaban a su lado. Tenían la vista posada en mí, todas con la misma sonrisa que Eve.

-Aish, ¡qué no os he presentado! Bianca, estas son Emily, Katherine, y Spencer.

Eve me empujo para que las diera dos besos. Demasiadas presentaciones. Yo no era precisamente buena para los nombres, y menos cuando la presentación era en cadena. No tenía muy buena memoría, probablemente dentro de un rato, ni me acordaría. Pero daba igual, solo por la sonrisa de Eve, merecía la pena intentarlo.

-Encantada. Esto... Eve, tengo que hablar contigo. ¿Puedes?

Sé que parecía un tanto descortes separarla de sus amigas solo porque yo quisiera, pero ella lo tomó como algo normal, y se despidió de ellas, quedando para más tarde. Nos fuimos un poco más lejos, para que nadie pudiera escucharnos.

-¿Qué pasa, cielo?

Me abrazó y me sonrió de nuevo. No sabía si tendría el suficiente valor cómo para decirselo; pero las palabras me empezaron a salir atrangantadamente, antes siquiera de que me pudiera dar cuenta.

-Necesito saber una cosa, Eve. Te prometo que no te juzgaré, pero quiero saberlo. ¿Te olvidaste por casualidad de contarme alguna parte de cuándo Carlos y tú saliaís juntos?

Eve comprendió al instante lo que verdaderamente la estaba preguntado, y negó con la cabeza. Aquello era suficiente, al menos para saber que Carlos la había mentido. Había conseguido que le diera un beso, porque había confiado en él. Y Carlos la había mentido, como a todas las demás.

-No... bueno, creo que te lo dije todo. Espera... ¿has hablado con él? Bianca, ¿se puede saber qué te ha contado? ¿Y qué te has creído?

Solo un paso.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora