Capitulo 6

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Edward

La cena termino bien, demasiado bien. La familia invitada se iba a ir, solo faltaba el ultimo miembro el cual estaba con Thomas.

Subí las escaleras hacia la habitación de Thomas. Abrí la puerta lentamente y vi a Thomas abrazando a Nick, obviamente ambos estaban dormidos; aproveche el momento y les tome una foto. Después baje las escaleras hacia la entrada.

-¿Qué paso con Nick?- pregunto Ramón

-Se ha quedado dormido y no lo quise despertar- dije con una gran sonrisa, inevitable ante aquella yaoistica escena.

-Bueno, si no hay opción- contesto Eleonor sonriendo, de forma peculiar; una sonrisa que conozco bien. Una sonrisa pervertida.

-Te lo encargamos- dijo Ramón preocupado

-No hay problema, lo cuidaremos bien- dijo Cathy amablemente, para que no se preocuparan- no se preocupen

Se fueron a su casa, nosotros recogimos los que quedo y nos fuimos a dormir...

Thomas

Fue un día difícil. Primero aparece Damián en la cena, teniendo que quedarme en mi habitación para no ser descubierto; y lo único bueno que salió de eso es que pude ver a Nick; aunque después me derrumbe enfrente de el, llorando y abrazándolo. Me consoló y abrazo, y supongo que me dormí después de un rato.

Abrí los ojos, estaba en mi cama; y que yo recuerde estaba sentado en el piso. Me iba a levantar, pero algo o mejor dicho alguien me estaba abrazando. Levante la cobija y ahí estaba Nick, abrazándome, aferrándose a mi.

Se veía tan lindo; su pelo alborotado, sus mejillas tan suaves y sus labios se veían tan suaves y finos...

Nick

Anoche después de ver a Thomas llorar y que se quedara dormido, bueno también me dormí junto con el. Con las pocas fuerzas que tenia lo subí a su cama, ya era tarde y yo también tenia sueño, así que me acosté a su lado.

Supongo que era de día, se sentía tan calentito y cómodo, a diferencia de mi habitación que era un poco fría. Estaba abrazando algo y se me hizo un poco raro ya que yo no dormía con nada para abrazar.

Abrí los ojos lentamente, todavía seguía un poco somnoliento; levante mi vista y sentado en la cama estaba Thomas aun aferrado por mi.
Cuando me di cuenta rápidamente lo solté, con mis mejillas subiendo de tono.

-Buenos días- dijo Thomas sonriendo.

-Buenos díaas- dije sentándome rápidamente, haciendo que me cayera de espalda al piso.

-¿Estas bien?- pregunto preocupado, aunque se notaba que quería reír ante tal estupidez.

-Chicos levantense ya esta... el desayuno- dijo el señor Edward entrando a la habitación. Después de que vio esa escena sonrió con cara de pervertido- los esperamos abajo.

-Vamos, después te llevo a casa- dijo Thomas sonriendo, ofreciendo ayuda para levantarme.

-Gracias- respondí avergonzado.

Bajamos las escaleras, el señor Edward y Catherine estaban esperándonos en el comedor. Thomas se sentó en una silla y yo me senté a su lado.

-¿Ustedes se conocen?- pregunto Catherine tomando un poco de jugo.

-Si, si... algo así- dije entusiasmado, aunque después me avergoncé y baje la cabeza.

-¿De donde?, ¿Cómo?... Acaso son... dijo Edward demasiado entusiasmado aunque Catherine lo interrumpió.

Querido chico rubioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora