Capitulo 76

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Santiago

Después de aquello fuimos al cine, ya Sam había dejado de temblar y estaba más tranquilo. Solo había algo que no me dejaba tranquilo, y era esas marcas rojas que tenía en la muñeca.

-Oye Santi~.- escuche el murmullo de Sam, la película iba como por la mitad o más y en eso Sam había hablado como 7 u 8 veces, se había puesto a jugar con su teléfono.-Santia~go.

-¿Qué sucede Sam?.- pregunte en otro murmuro.

-Ya, ya me aburrió la película.

-Pero tu la elegiste.

-Lo se, pero...- lo voltee a ver para saber porque andaba tan inquieto, y en cuanto voltee me beso.- es más divertido jugar, y estar contigo. Vamos, vamos a jugar a... mmm... a las maquinas de videojuegos.

Me jalo del brazo y me saco de la sala del cine. Fuimos a los videojuegos, jugamos a muchos juegos de diferente tipo, claro hasta que se aburrió.

-¿Vamos a comer?.- preguntó sonriente, tenía un montón de premios y esas cosas.

-Esta bien, vamos a donde tu quieras.- después de un "yay" y un salto comenzó a salir de los videojuegos. Yo cargaba las bolsas de premios, él se encargaba de guiarme a quien sabe donde.

Llegamos a un local de comida rápida, después de que eligió una mesa nos sentamos. Sam se levantó e hizo el pedido para los dos.

Este día estaba muy animado, demasiado diría yo pero eso es mejor a como lo encontré hace unas horas. Es tan lindo, y adorable, me gustaría ayudarlo, me gusta. Espero que no sea un problema para él eso de que es mayor que yo, no debería...

-Y-ya, ya llegue... en, en unos minutos nos llamaran.- dijo entrecortado, estaba cohibido de nuevo. Se sentó en la silla, volteo hacía unos jóvenes y luego a la pared.

-¿Estas bien?.- me miro un rato y después asintió, se removía nervioso en su lugar.- no te quiero presionar ni nada pero ¿estas seguro?, no quisiera que te pasara nada malo.

Asintió varias veces, poniéndose a jugar un rato con su celular. Decidí dejarlo en paz, no quería molestarlo o incomodarlo más. Me puse a ver la televisión que estaba por ahí, era programación infantil pero aun así.

Samuel Ortega su pedido esta listo, Samuel Ortega su pedido esta listo...

Sin decir nada se levantó y fue por la comida, solo me quede observando como me iba y regresaba con dos bandejas, las dejaba en la mesa y volvía a estar en su mundo, fijando su vista en algún punto perdido. Tome su mano entre la mía, la apartó rápido y solo me miro confundido, o más bien era muy rara su mirada.

-Ah... yo, lo siento.- se limitó a decir, bajo la mirada y se limitó a comerse su hamburguesa.

Yo hice lo mismo, no tenía apetito pero tenía que; además no es que culpara a Sam por su comportamiento, desde que empezó el día ha estado raro y me preocupa, pero si no me quiere decir anda no le puedo obligar.

Terminamos de comer y lo lleve a su departamento, se había opuesto pero lo convencí, no quería que estuviera más mal de lo que estaba.

-Nos vemos pronto.- sonreí y palmee su cabeza, además de entregarle sus premios que se gano.

En cuanto cerró la puerta de su departamento me fui, no tenía nada que hacer así que tal vez moleste a los tortolos o a Joan. Cuando salí una pelirroja, la misma de la otra vez entró.

Sam

¿Qué he hecho?, tan bien que estaba todo... bueno, desde el principió nada estaba bien conmigo, lo he tratado súper bien y después... ¡aahh, Soy un completo idiota, inútil!

Querido chico rubioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora