Querido chico rubio

Capitulo 133 Parte 1

Nick

Mire a Thomas mientras íbamos en el auto de su padre hacía un juzgado, tome su mano acercándome poco a poco hacía él, abrazándolo aunque más que nada me aferraba a él, quería que todo de esto fuera falso, un mal sueño... pero obviamente era la realidad, esta cruel realidad. Mire a mi rubio y él me sonrió, dejando un beso en mi frente, suspire relajándome un poco cerrando los ojos unos momentos.

—Tranquilo Nick, todo estará bien —escuche decir al papá de Thomas, lo mire y sonreía un poco. Asentí aunque no me viera, aferrándome más a mi amado. Estar así de abrazados recordé lo de anoche, sonrojándome un poco mientras cada detalle venía a mi mente... ¡Wuaa!, ¿por qué pienso en esto ahora? — ¿qué hicieron anoche picarones?, saben que ninguno de los dos se libraran de que les pregunte con lujo de detalle el porque esta como tomate.

—¡Papá! —exclamo Thomas, lo mire de reojo y estaba sonrojado, como el es papel se le nota más los sonrojos. Reí un poco hasta que él me miro mal, bese su mejilla y lo abrace con más fuerza. Ambos levantan mi animo y me dan fuerza, era súper, súper lindo — solo no molestes a Nick con tus preguntas, yo, yo te diré todo...

—Esta bien, quería ver a mi pequeño yernuke avergonzado pero también es curioso verte a ti sonrojado así que me conformaré con eso —el papá de Thomas se veía feliz y con burla, mi rubio hermoso seguía avergonzado y nos evitaba ver. Sonreí y bese su mejilla, siguiendo abrazándolo — son tan lindos, verlos así de felices y disfrutando su juventud... me alegra que se hagan felices mutuamente. Espero nada arruine su felicidad.

—Gracias señor Edward, Thomas y ustedes me hacen feliz a mi. Adoro estar y convivir con ustedes, son grandiosos y muy graciosos —respondí sonriendo, mirando a ambos. Thomas me miro de reojo y sonrió, abrazándome y mimándome — amo a Thomas, me hace feliz que me aceptará y que no pensará que lo stalkeaba...

—Vaya, vaya el pequeño Nick saca su lado oscuro —el papá de Thomas me miro y se empezó a reír, mire a ambos avergonzándome ¿por qué te ríes rubio tonto?

Seguimos un rato hablando de algunas cosas hasta que se estaciono, ya estábamos en ese lugar tan... tan extraño y con esa aura tan lúgubre. Siempre que veía estos lugares ya sea de pasada o en películas y series daba un aire pesado, todos se miraban tristes, incómodos, se sentía el dolor de las personas... y ahora el estar yo aquí, en verdad no me agradaba, era una sensación indescriptible.

—Vamos pequeño, estaré a tu lado todo el tiempo que pueda —había dicho Thomas sonriendo, lo mire y asentí siguiéndolo afuera del auto, tome su mano y avanzamos hacía ese lugar a paso lento aunque debíamos estar apurados — siempre te estaré apoyando y si te sientes nervioso escucha a tu corazón, así sabrás que hacer.

—Gracias Tomny, eso haré... se que siempre estarás conmigo —me detuve y lo jale, sonriendo leve, lo miré unos segundos antes de ponerme de puntas para poderlo besar, me gustaba acariciar donde estaba su cabello rasurado y estaba creciendo, era una sensación muy extraña y picaba, pero agradable. Thomas me miro y sonrió besándome de nuevo, abrazándome con mucho cariño — te amo mucho... ¿podemos salir a comer al terminar esto?

—Claro que si pequeño, comeremos lo que quieras —sonrió y sonreí con él, abrazándolo con mucho amor y riendo leve. Nos dimos unos pequeños besos antes de seguir nuestro rumbo, con el papá de Thomas pisándonos los talones.

¿Les parece sorpresa este juicio? pues lo es, créanme que para mi lo es. Me enteré de esto hace como una semana y Thomas había logrado medio convencerme hace cuatro días, de hecho ambos me chantajearon antes de salir de casa con tal de que viniera a este lugar... y aquí estoy viniendo a este juicio donde no sé que rayos haré o para que rayos me necesitan. No me sentía a gusto con nadie ni con los que se supone eran mis padres ni con los que son mis verdaderos padres... bueno, por ahora Raúl si me cae bien, mi verdadero padre; espero llegarlo a conocer bien pronto.