LOUDER | RM

Capítulo 29: ¡¡¡Como anda la banda!!!.

- ¡¡¡Quitate, maldito quitate!!! -exclama Cris frotando el algodón por su lagrimal.

Calculado está hace como .... Unos cuarenta y cinco minutos intentando maquillarse, todos son intentos fallidos.

- Cristina, ¿Tú sabes que debes de tener buen pulso para esas cosas? No es solo ver los tutoriales de maquillaje en Youtube y ya te conviertes en toda una Yuya -comento mientras me coloco mis pendientes.

- Agg, tú lo dices porque eres bonita y luces bien hasta con el maquillaje corrido, no todas tenemos tu suerte, eh amiga! -gruñe desde mi tocador.

- Ay, ni que fuera Angelina Jolie, por favor. -protesto.

- Bueno no, no eres Angelina Jolie pero eres muy guapa ¡Y no se vale! -protesta alzando una mano.

- A ver... Ven aquí -le quito el rímel y hago el intento de arreglar el desastre que se ha hecho en la cara.

Una vez terminado el asunto nos disponemos a cambiarnos.

Por mi lado escojo un crop top blanco con encaje, un short de jean celeste tiro alto y mis All Stars negras con plataformas. No hace falta planchar mi cabello ya que lo tengo completamente lacio y algo más corto, para ser más específica... Me llega a la cadera. Si, lo corté y costo una vida convencer a Abraham de ello, pero accedió con la condición de que no fuera mucho y que sea él quien lo cortará. Piensenlo antes de dejar que su novio les corte el cabello, en serio. No miento cuando digo que lloró literal, lloraba mientras lo cortaba y en ese momento él imprescindible Samuel estaba allí presente con su adorada cámara. Después de todo solo cortó las puntas florecidas... Verdaderamente, no sé porque tanto escándalo. Cristina por su parte le amenazó con dejarme calva mientras duermo si seguía llorando. Si, tengo miedo.

- ¿Ya estás, Cris? -pregunto entrando al baño.

Entonces la veo con una falda tableada negra de cuero, una blusa color crema bastante ajustada y un chaleco a lentejuelas por encima.

Suelto un silbido.

- Woww, Cris sabes que Adrián viene pero no es de esos que se fijan muchísimo en el pedazo de culo que se ve por debajo de las faldas, sabes? -artículo mirándola de pies a cabeza.

Gruñe y jala de mi brazo haciendo me que siente en la silla frente al tocador. Y así está como veinte minutos echándome todo tipo de maquillaje en mi pobre cara.

- ¡Ya, ya esta suficiente de maquillaje! Que es una fiesta Cristina, no un prostíbulo -protesto quitando la brocha que tengo en frente de mis narices.

- ¿Que no acaso aún no te enteras de que vendrá prácticamente toda la escuela? ¡Todas están que se les van los ojos por Abraham, que por cierto es tú novio! Ya sabemos que estás muy buena por donde te miren, pero no descuides a tu chico.

- No creo que sea para tanto -le digo arqueando una ceja.

- Mira, Abraham era el más guapo de la escuela.. Una vez realizaron una puesta entre todas, quien obtenga algo de él.. Ya sea de contacto físico, claro -específica-Ya sea una caricia, un beso en la mejilla, una sonrisa, que les tome la mano, un beso, o hasta incluso... Meterse en su cama, ganaría.. Dinero claro. El bote era de 2500 dolares. -concluye retocando mi labial.

Casi me trago el labial ... ¡¡¡2500 dólares!!! ¡¡¡Ni que fuera Zac Efron, por Dios!!

- ¡¡¿¿Estás de coña, cierto?!! -exclamo poniéndome de pie.

- ¿Por qué mentiría con algo así? -pregunta encogiéndose de hombros.

Tiene razón.

- ¿Y, él lo sabe? -pregunto.