Capítulo 32: Esperaba que acaben juntos.

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- ¡Arregla ese cojín de allí! -le grito a Cris quien se encontraba junto conmigo arreglándolo todo.

- Ya, chicas por favor ya se ha ido el olor a borracho de aquí, por qué tanta limpieza? -pregunta Tony.

- Pues como llegue tu madre y nos eche a patadas en el culo de aquí, vendremos a por ti -le advierte Cris barriendo toda la sala, por décima vez.

Si, hoy llegan los padres de Abraham, su vuelo se ha adelantado y llegaran dos días antes, ósea hoy, y nosotros los infiltrados en su dulce morada de amor estamos de los pelos tratando de limpiar todo, algo tendremos que hacer mientras estemos aquí. Además Abraham quiere anunciar a su familia abiertamente nuestra relación y y estoy entrando en crisis, de una vez decir que si no aparezco ya por aquí... Susana es la responsable de mi homicidio culposo.

- ¿Samu, como vas con los trastes? -pregunta Cris repasando la aspiradora encima del sofá.

- Todo bien por aquí -responde él desde la cocina- Sólo me falta un vaso y ya.

- ¿Que están haciendo? -pregunta Abraham a Tony entrando a la sala.

- Limpiando, dicen que antes de que mamá llegué y los eché a patadas, deben limpiar. -responde él.

Él castaño quien dice ser mi novio, comienza a reír como una hiena epiléptica.

- ¡Oh por dios, paren ya! Parecen empleadas domésticas -entra Susana por la puerta con una gran sonrisa seguida de Antonio.

- ¡¡¡¡¡¡Mamá!!!!! -gritan los dos más pequeños de la familia Mateo Chamorro corriendo a abrazarla.

- ¡Mis niños! -dice ella atacándolos con besos por sus rostros.

- ¡Mami, ya no te vuelvas a ir. No me dejes aquí solito cuidando a estos monstruos abominables! -dice Tony haciendo un puchero.

Susana ríe abrazándolo.

- ¡¡Papá!! -grita Abraham- ¡Te eche tanto de menos! -dice abrazándose a la cintura de su padre.

- Hola, cielo -dice Antonio abrazando a su pequeño hijo.

¿Cielo? ¿En verdad le ha llamado así? Vamos, que ni yo le llamo así. Que deprimente.

- ¿Por qué tanto alboroto aqu... ¡¡¡¡TITOS!!!! -grita Samu como niño pequeño al verlos y corre a abrazarlos.

Cris y yo observábamos desde el sofá la conmovedora escena de todos abrazándose y amándose en el corredor..... Marginadas de sociedad.

- Bueno, ya que es notorio que nos han echado taaaaaaaanto de menos -musita Cris irónicamente- Nosotras nos retiramos -dice y jala de mi brazo para salir de allí.

- ¡¡Niñas!! -exclama Susi para luego venir y envolvernos entre sus brazos. Nosotras reímos correspondiéndole el abrazo.

- Hola ... -digo sonriente.

- ¡Pero mira tú que guapas se han puesto! -dice mirándonos de arriba a abajo- Jari, cielo ¿Como estás? -pregunta dejando un beso en mi frente.

- Muy bien, y tú? -le sonrío.

Ella asiente sonriendo.

Cuando termina la cursi bienvenida, todos ayudamos a Antonio y a Susi con sus maletas, cuando yo me acerco para tomar una Abraham me detiene.

- Ah, ah, señorita, usted no puede hacer ningún tipo de fuerza -dice y arrebata la maleta de mis manos- Tendrías que estar metida en la cama, bajo las cobijas viendo una maratón de Breaking Bad. -me riñe- Tienes fiebre, Jari. Te dije que era mala idea que duermas tu siesta con el ventanal abierto.

LOUDER | RMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora