77.
Jari's POV
— ¡Muy bien, mi amor! -exclamó mientras yo corría hacia él.
Me atrapó entre sus brazos mientras yo dejaba un beso en su boca.
— ¿En serio te gustó? -pregunté.
— Mucho... -murmuró dándome un beso.
Sonreí.
— Te dije que todo el esfuerzo merecería la pena, ¿o no? -dijo.
— Sí, sí lo dijiste.
— ¿Ya viste? Soy lo más. -habló con aires de grandeza.
— Oye, oye, espera. No te creas, porque la de esfuerzo fui yo -dije.
Se rió.— ¿Donde vamos ahora? -pregunté, abrazando su cintura.
— Tú, a cambiarte. Ahora -dijo señalando los vestidores.
— ¡¡Ayyy!! -me quejé- Víctor, puedo hacerlo cuando lleguemos. a mi casa.
— Amor, no irás caminando veinte cuadras en mayas. Te enfermarás -dijo.
— Así me conociste, y no recuerdo que te hayas quejado de eso -alcé una ceja.
— Esos eran otros tiempo -dijo.
— ¿Otros tiempos? -pregunté- ¡No han pasado mil años!
— ¿Podrías dejar de dramatizarlo todo e ir a cambiarte? -dijo.
— Uy, bueno -dije mirándolo con diversión.
Dejó un beso en mis labios y yo caminé rápidamente hasta los vestidores. Fui hacia mi mochila y la tomé sacando mi ropa de civil de ella, dejándola sobre la banca mientras me quitaba las mayas. Cuando deshice las liga de mi peinado, mi collar se desprendió cayendo al suelo. Rápidamente me agaché a recogerlo. Observé el pequeño dije detenidamente, dónde se lucía esa frase. Miré mi antebrazo, viéndola tatuada allí también. Recuerdo patentemente cuando me lo hice, primer tatuaje de los tres que tengo, no sé de donde saqué la valentía para hacérmelos.
Mucho tiempo ha pasado y ciertamente no sé qué es lo que siento, ni siquiera sé qué sentir. Con el paso del tiempo (((y después de muchas terapias))) no he sabido si odiarlo por hacerme un daño irreparable, o si extrañarlo todos los días de mi vida. Creo que estoy en una lucha increíble de sentimientos encontrados. De igual manera, nunca lograré olvidar a la persona más importante de mi vida. Si, intenté rehacer mi vida, en eso estoy, en eso estamos...
Conocí a Víctor, desde esa noche en el puente llegó a aliviar de alguna manera el dolor irremediable con el que cargaba/cargo. Es... ¿cómo explicarlo?... una gran persona. Y me quiere, lo sé. Pero no estoy segura de sentir lo mismo. Mi psicologo dice que sufro de Decencia Emocional, él también lo decía y tenía razón, maldito. Hay una pregunta que todo el mundo me plantea...
"¿Realmente lo amas?, porque no es Abraham"
Y no, no lo es. Ni nunca lo será. ¿Pero es ese un impedimento a querer a otra persona?
Jamás lo será por el simple hecho de que Abraham, fue, es, y será el gran amor de mi vida. Pero repito, ¿por qué no intentar querer a otra persona? Y sí, digo esto sin saber siquiera lo que siento, porque lo único que se pasa por mi cabeza al besar a otra persona es su imagen. No voy a negar que sigo llorando por los rincones, que sigo sin comer lasaña desde hace tiempo, porque no había, no hay, ni habrá como la suya, tampoco he querido ir al cine, ni he pisado un hotel desde él, porque son cosas que marcan para siempre, únicas e irreemplazables, que no se repiten, ni comparten con quienes no quieres que lo hagan. Y yo, no pienso hacerlas si no es con él.
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LOUDER | RM
أدب المراهقينPasamos mucho tiempo preguntándonos si lo que sentimos es amor, es simple. Si lo que quieres es cambiar al otro no lo es, si lo que quieres es cambiar por el otro... Es amor. - Mi vida es un conjunto de gente ausente, gente que no está. - Pe...