Capítulo XCVII

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Sus manos estaban heladas, al igual que las mías. Su rostro no tenía expresión y mis entrañas dolían de la ansiedad. Zacky se sentó en un sofá, frente a mí, para luego quedar ambos en silencio. Iba a dejarme, estaba cien por ciento segura.

-Yo...-

-¿Para qué me hiciste venir aquí?-

-Necesitaba hablar contigo.-

-¿En una sala insonorizada? ¿Temes que nos oigan?- Mi voz se había elevado un poco a causa de los nervios, lo que hizo que él frunciera el ceño.

-¿Qué? No.-

-Hace semanas que no me hablas, apenas si duermes conmigo, me evitas, me ocultas cosas... ¿Qué ocurre, Zack?- Desvió la mirada hacia un costado y se levantó del asiento, dirigiéndose hacia donde estaban sus guitarras.

-Todo ese tiempo estuve buscando la forma...- Mis ojos se aguaron y los cerré para reprimir las lágrimas.

-Zack, tengo una reunión con los diseñadores del nuevo álbum en una hora. ¿De qué quieres hablar?- Insistí.

-De nosotros, Jenna.-

-Entonces habla.- Mi voz se quebró al final, estaba demasiado nerviosa. No estaba preparada para un rompimiento; no después de todo lo que habíamos atravesado.

-¿Recuerdas esa canción que te enseñé en casa de mis padres?- Asentí sin comprender mientras lo veía tomar su Schecter roja. -¿Podrías cantarla para mí?-

-¿Para qué?-

-Sólo hazlo... Por favor.- Supuse que sería una última petición así que accedí mientras él rasgaba las cuerdas. -Save me...-

-I'm trapped in a vile world where the endings are the same as every other, we're only here to die...-

-Save me...-

-I'm losing my only dream. I can use some guiding light, some place to go. If you hear me let me know...-

-If you hear me let me know.- Concluyó él. Mi pecho temblaba, sentía que la angustia me ahogaba pero sabía que no podría llorar hasta que tuviera la certeza de que iba a dejarme. -Debo...- Frunció el ceño y miró el suelo. Luego, apartó la guitarra y se puso de rodillas frente a mí; más precisamente, entre mis piernas.

-Habla ya.- Murmuré observándolo con los ojos vidriosos.

-Toda mi vida me he sentido vacío, solo.- Acaricié su mejilla y él seguía sin mirarme. Observé su rostro, sus rasgos un poco más marcados por el paso de los años pero aún así seguía siendo hermoso. Tan hermoso y tan mío que estaba a punto de perderlo.

-Zacky...-

-Tú me salvaste, Jenna.-

-¿Qué?-

-Me diste tu amor, incluso cuando no lo merecía. Me dejaste amarte y siempre estuviste a mi lado, cuidándome y apoyándome en todo...- Las lágrimas comenzaron a rodar por mis mejillas sin que yo pudiera evitarlo y él las secó. -Por favor no llores, si lo haces no podré seguir.-

Dirty Little Secret... Who has to know?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora