Dirty Little Secret... Who has to know?

Capítulo I

*Dos años después*

-¡Jenna, despierta! ¡Despierta!- gritó mi prima mientras me sacudía.

-¿Qué? ¿Qué? ¿Qué?- Exclamé de mala gana.

-¡Tengo algo que contarte!-

-Es sábado, son las ocho de la mañana y estoy cansada así que más te vale que sea algo importante.-

-¡Me voy a casar!- chilló.

-¡¿Qué?!- Me senté de golpe en la cama. -¿Es en serio? Marie, sabes que no me gustan las bromas.-

-¡No! ¡Es cierto! ¡Me casaré con Matt!- Me abrazó. -¿No estás feliz por mí?- preguntó con el ceño fruncido.

-Si, es sólo que... Estoy... Sorprendida. No creí que te casarías a esta edad.-

-¡Pues sí! ¡Y tienes que ser mi dama de honor!-

-¡¿Yo?!- Se me daban horrible esas cosas. -¿Qué hay de Madison y Lily?-

-Ellas también, pero no sería lo mismo sin ti. ¡Por favor!- Hizo un puchero.

-De acuerdo, esta bien. Tú ganas.- Sonreí para que no se sintiera mal. -¿Cuándo se casan?-

-En 2 meses.-

-¡¿Qué?!-

-Descuida, ya tenemos los invitados, las tarjetas de invitación, el salón y la música.-

-Bueno, eso tranquiliza un poco.-

-Esta noche vendrá su familia para que conozcan a mamá y papá.-

-De acuerdo pero déjame dormir.- me cubrí hasta la cabeza con las sábanas y me dormí.

El sonido de mi celular, indicándome que alguien me llamaba, me despertó.

-¿Si?-

-¡Jenna Summers! ¿Dónde diablos te has metido?- ¡Demonios! ¡Lo había olvidado por completo! ¡Se suponía que iría a la playa con Abigail y Emilie al mediodía y ahora me estaba gritando por el móvil. Eso sólo significaba una cosa... ¡Era mediodía!

-Uhm, estoy... Estoy... ¡Terminando de alistarme!..- Salté de la cama y me dirigí al baño. Giré la llave de la ducha y el agua comenzó a correr. -... Me retrasé hablando con Marie, se va a casar.-

-¡¿Con Matt?! ¡Oh por dios! ¡Necesito que me lo cuente todo!-

-Perfecto, ven a casa y...-

-No puedo, estoy con unos amigos muy candentes.- alargó la U haciendo que "muy" sonara exageradamente exagerado.

-Abby, sabes que yo no soy muy...-

-¡Vamos! Hay uno aquí que me gusta para tí, tiene unos provocadores ojos verdes. Están haciendo una barbacoa pero no podemos empezar sin ti.-

-Bien, en veinte minutos estaré allí.- Colgué. Me metí abajo del agua para luego, dos minutos después, salir y vestirme a la velocidad de la luz. Me puse un traje de baño de dos piezas negro, una camiseta de tirantes blanca, un short de jean y mis ojotas. Peiné mi cabello largo y negro con los dedos y le puse un poco de crema para peinar. Me puse los lentes, tomé mi bolso de playa y salí.

-Mamá, iré a la playa con Abby y Em.-

-De acuerdo, diviértete cariño. No vuelvas muy tarde, recuerda que...-

-Lo sé, vendrá la familia de Matt a cenar. No volveré tarde, lo prometo.- Besé su frente y despeiné el cabello de Marie, la cual estaba a su lado. Tomé mis llaves y salí a la calle.

No iba a caminar, ni loca. Así que paré un taxi que, a los 10 minutos, me dejó en la entrada de la playa. Caminé hasta divisar la melena colorada de mi amiga acompañada por cuatro cuerpos despampanantes.

-¡Jenna!- exclamó Abby acercándose y abrazándome.

-Hola ¿Dónde está Em?.- Sonreí.

-Salió de la ciudad, vuelve el lunes. ¡Ven, vamos! Quiero presentarte a mis amigos, nuestros amigos.- me tomó de la muñeca y tiró de ella para hacerme caminar hasta donde se encontraban ellos.

-Hola, ustedes deben ser... ¡Oh por dios!-

-Esperen un minuto, esa es...-

-¡¿Jenna?!- Exclamaron al unisono.

-¿No me van a saludar?- Sonreí. Se acercaron y me abrazaron como si fuera un familiar al que no veían hacía décadas.

-¿Cómo has estado, enana?- Dijo Johnny abrazándome.

-¿Enana? ¿Yo?- Todos rieron.

-¡¿Se conocen?!- Abby nos miraba confundida.

-Digamos que sí.- Dije sonrojada al recordar todo lo que había ocurrido en esa fiesta.

-¿Digamos? Te quedaste con nosotros hasta que desaparecist...-

-¡Cierra la boca gnomo!- Exclamó otra voz... Esa voz... ¡No podía ser él! ¡No podía estar pasándome! ¡No a mí! -Hola Jenna.- Me di vuelta y, ahí estaba él. El Zacky que yo recordaba se había ido, su cabello estaba más corto y no había rastros de maquillaje o algún tipo de estilo emo/dark. Aún así, su esencia, sus bellos ojos, sus piercings y tatuajes seguían ahí.

-Zachary.- Dije casi sin aliento. Aún después de dos años sin verlo, sin ningún tipo de relación exceptuando aquella noche, seguía provocándome esas extrañas sensaciones que no podía controlar. Se acercó a mí y depositó un cálido beso en mi mejilla.

-¿De dónde carajo los conoces?- Interrumpió Abby.

-De una fiesta.- respondió Zacky aún sin dejar de verme pero manteniendo distancia. -Te ves guapa, Jenna. Diferente a lo que recuerdo, pero me agrada.- Empezó a examinarme de arriba a abajo sin disimulo.

-¡Deja de mirarme así, baboso!- Rió y, en ese preciso momento, apareció una rubia con el cabello carré y más curvas que los rizos de Abby.

-Oh, oh.- Dijo Jimmy.

-¿Qué sucede?- pregunté.

-Observa y verás.- Posó una mano en mi hombro.

-¡Zachary James Baker! ¿Por qué demonios no contestas mis llamados?- Su chillona voz hizo que mis oídos sangren. ¿Quién se creía que era para hablarle así a él?