Capítulo XXIV

590 51 22
                                    

-No.- Dije finalmente. Hasta que no supiera por qué Zacky no hablaba al respecto, no se los contaría. Aunque me odiaba por ocultarle algo tan grande a mis amigas.

-¿Segura?- Abigail achicó sus ojos, como si intentara descifrar si mentía o decía la verdad.

-Segura... Pero quizás... No por mucho.- Me sonrojé de tan sólo pensarlo. Eso no podía ocultárselo. Era obvio que Zacky y yo nos comíamos con la mirada y, si bien me sacaba de quicio constantemente, ya nos habían atrapado en varias situaciones comprometedoras, sin contar el beso que me estampó delante de todos.

-¡Uy! ¡Eso me agrada!- Chilló mi amiga colorada.

-Pues claro, eres una ninfómana.- Afirmó Emilie, quien, según tenía entendido, todavía no le había dado paso al pobre Matt. Ella no era virgen pero tampoco era fácil. Solía decir, a diferencia de Abigail, que el sexo era un privilegio del que sólo se podía disfrutar si era merecido. En otras palabras, si conseguía un compañero sexual, era un agraciado.

La tarde se nos pasó entre risas, helado y una supuesta idea de pijamada en casa de Emilie. Por la noche volveríamos al bar al que fuimos unas noches anteriores a "re-bautizarlo" como dijo Abby. Nos quedamos las tres juntas debatiendo qué usar. Sí, usarían mi ropa. Eso no era problema, dado que las tres teníamos la misma talla.

Ya eran las diez de la noche cuando nos sentamos a cenar con mis padres y Marie. Em llevaba una camisa negra transparente, una pollera negra al cuerpo y botas al tobillo. Abby, un short de jean tiro alto, una camiseta que le cubría hasta arriba del ombligo y borcegos. Y yo, una camiseta gris perla con la espalda al descubierto, un short de jean oscuro, medias negras a la rodilla y borcegos. Las tres estábamos maquilladas y nuestro cabello iba suelto.

-¿Ustedes a dónde van?- Preguntó papá con cara de disconformidad.

-Saldremos con nuestros amigos.- Respondimos las tres al unísono y nos miramos para luego reír.

-Irá Zachary.- Sentenció Marie seria. No la juzgaba por sentirse traicionada. Digo, es lógico. Pero debía parar con esa actitud.

-Me agrada ese chico, es muy simpático y educado.- Dijo mamá sonriente, a lo que mis amigas me miraron de forma cómplice. Rodé los ojos y recordé la no muy lejana cena en casa en la que compró a mi madre con un simple cumplido por un pastel. "Ay mamá, no tienes remedio..." pensé y reí por lo bajo.

Terminamos de cenar y nos sentamos en el living a esperar a que los chicos nos pasaran a buscar, lo cual no fue mucho. A los quince minutos aproximadamente, se escuchó un claxon. Cuando salimos vimos que, además del coche de Matt, se encontraba Brian en una flamante motocicleta y Zacky en otro coche.

-Hola, pequeña. Te ves preciosa.- Murmuró Brian abrazándome. Una vez más, me sonrojé exageradamente. Brian llevaba una camiseta blanca, unos vaqueros azul oscuro, zapatillas y su chaqueta de cuero negra. A decir verdad, se veía como un chico malo, atractivo. Pero todos sabíamos que era muchas cosas, menos malo.

-¡Wow! Si no estuviera con Abigail, les aseguro que...-

-¡Johnny!- Chilló Abby golpeándolo en la cabeza. Mientras recibíamos halagos, incluso por parte de Leana, su voz hechizó mis oídos aislando cualquier sonido que pudiera escuchar.

-Te ves bien, Jenna.- Dijo atrayéndome hacia él para luego besar mi mejilla. Me limité a sonreír ya que mis nervios no me dejaban hablar.

-Gordo, suéltala. La quiero saludar.- Rió Jimmy abrazándome y revoleándome por los aires. Zacky lo fulminó con la mirada.

-¡Ya, ya! ¡Me estoy mareando!- Grité mientras reía. Jimmy se detuvo, me devolvió al suelo y me abrazó.

-Creo que me debes una charla.- Susurró casi inaudiblemente. Me sonrojé nuevamente y asentí.

-Sigo creyendo que eres como una amiga, sólo que no eres gay.- Afirmé riendo. Me acerqué a Zacky y susurré. -¿Hablaste con tu hermano acerca de las fotos?- Me miró y pude ver el dolor en sus ojos.

-No quiero hablar de eso ahora.- Asentí. No lo presionaría, si en algún momento quería contarme, iba a hacerlo.

-Bien, no sé ustedes pero yo tengo la garganta seca. ¿Qué dicen si vamos por unos tragos?- Exclamó Brian sugerente.

Todos asintieron, yo sólo me concentré en mirar y admirar a Zacky. Llevaba una camiseta negra sin mangas cubierta por una sudadera con capucha, un pantalón gris oscuro gastado y zapatillas. Su cabello estaba peinado igual que siempre y su loción inundaba mis fosas nasales haciendo que se me dilataban las pupilas. ¡Estaba para comérselo! Bien, quizás no tan literal, pero ¡Se veía tan atractivo!

-Si tanto quieres admirar al gordo, puedes hacerlo en el coche. Irás con él, con Abby y Johnny.- Susurró en mi oído mientras Zacky nos clavaba la mirada. No sabía cómo lo lograba pero siempre se daba cuenta de cuando alguien se me acercaba.

-¿No vendrás conmigo?- negó.

-Iba a ir con Brian pero dado que está Leana, ire en el coche con Matt y Emilie. Ya sabes, quiero enterarme si ocurre algo.- Rió cual niño pequeño.

-Pequeña, ven.- Me llamó Brian. -¿Quieres dar un paseo con esta preciosura?- Dijo.

-Seguro.- Respondí sonriente. No mentía, la motocicleta era una belleza. Me fascinaban y, a decir verdad, hacía mucho tiempo que no me subía a una.

-Le hablaba a ella.- Dijo palmeando el tanque de combustible de esta.

-Oh.- Dije sonrojada. ¿Se refería a mí con lo de preciosura? ¿En serio?

-¿Qué dices, preciosura?- Clavó su vista en la mía y, yo, ya estaba con los nervios por la estratósfera. Brian era una máquina de seducción y temía caer en sus redes. No por el lado sentimental, sino por el lado físico y sexual. Seamos sinceros, tenía a todas comiendo de la palma de su mano, su atractivo era enorme y tal vez no fuera lo único enorme en él... "¡Por dios, Jenna! ¿De dónde sacas esas vulgaridades? ¡Calma tus hormonas, maldición!"

-Jenna, ¿vienes?- Preguntó Zacky algo... ¿Inseguro? Por más tentadora que pudiese sonar su oferta, quería estar con Zachary. Sentía la necesidad de hacerle compañía.

-Uhm, será en otra ocasión, Haner.- Sonreí tímida, despeiné levemente su cabello y caminé hasta el auto de Zacky, en el cuál, minutos después, nos fuimos directo al bar.

Dirty Little Secret... Who has to know?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora