Más Que Hermanos [Adaptada]

52 (Segunda Temporada)

De repente, otra cosa llamó mi atención. Un sonido bajito y me di cuenta que ese sonido provenía de la computadora. Probablemente me había olvidado de apagarla.
Así que fui hasta la mesa y moví el mouse. Entonces, nuestro famoso fondo de pantalla surgió. Suspiré y me dije a mi misma:

- Acostumbrate al dolor, tenes que aprender a convivir con eso.

El sonido bajito era del correo eletrónico, avisando que había recibido mensajes nuevos. Pero no quería saber de eso ahora. Distraidamente, marqué todos y, ya estaba a punto de borrarlos. Pero entonces mis ojos vieron que uno de los títulos de ellos decía: "Para la mujer de mi vida". Miré la dirección del remitente y era de él. Me estremecí.
Primero, de sorpresa; después de rabia. Completamente, irritada por su osadía decidí apagar el monitor y salir del cuarto, con pasos firmes.

Fui al baño, me saque la ropa de forma rápida y entre a la ducha. Mi cabeza ardía de rabia, principalmente por percebir que otra emoción estaba floreciendo por los poros de mi piel. Con todas mis fuerzas, intenté controlarme. Pero el sentimiento me dominaba y me había tomado por completo. Salí corriendo de la ducha, me ate una toalla y fui de nuevo al cuarto.

Tenía tanta nostalgia de él, pero tanta, que parecía que mi pecho iba a explotar. Yo no sabía que sentimiento era más poderoso en ese instante, si la nostalgia o la rabia. Pero fue en un termino medio entre esos dos sentimientos, que guié mi mano y decidí leer ese mensaje:

Mi primer y único amor.

Siento que tu falta crece día tras día y me acordé que una vez me enseñaste una palabra que aprendisté en una clase de Portugués, que me dijiste que no existe en ningún otro idioma. Varias veces me intentaste explicar su significado, pero solamente hoy puedo comprender perfectamente lo que es SAUDADE.

Que idioma tan bueno por haber creado una palabra que pueda expresar la tristeza y alegria por la falta de alguien a quien amamos más que  nada en el mundo.
Si, porque saudade es eso, ¿no? Es la alegria de saber que vos existis lo que me hace mantenerme fuerte para poder soportar la tristeza de tu ausencia. 

Espero, de todo corazón, que leas este e-mail y entiendas el significado.

Mañana voy a viajar para la casa del abuelo Tomás y me sentiría muy aliviado si pudieras responderme.

Te deje un anexo, que espero que pueda completar todo lo que yo siento.

Te amo,
Bruno.

Mi visión estaba completamente nublada por las lágrimas temblorosas que corrían por mi cara, no sabía si podría ver el anexo. Fue con sorpresa que escuche que una canción comenzaba a sonar al abrirlo.

Sentí que la saudade me invadía con total fuerza. Esa canción tan linda y romántica me llegaba de forma poderosa. Era como si él estuviese ahí a mi lado, cantando en mi oido esa letra que hablaba de amor y arrepentimiento.

Al final no sabía que más pensar porque no podía entender como un hombre que demostraba ese nivel de sensibilidad podía haber hecho lo que hizo. Estaba tan confundida y perdida, necesitaba reflexionar y pensar. No podía decididir nada ahora.

Él me había pedido una respuesta. Estaba confundida porque realmente no sabía que escribir. ¿Y qué es que hay que hacer cuando te encontras así sin palabras?
Como un milagro, vino a mi mente una plegaria que aprendí cuando era chica, y fue eso lo que escribí. Por el momento, era todo lo que podía ofrecer.

"Que las gotas de lluvia, mojen suavemente tu cara,

Que el viento suave refresque tu espiritu,