Utopias ©

23.

Despacio comienzo en tu boca
despacio y sin quitarte la ropa
mi cama no merece tu cuerpo
virgen como el amazonas

Y La noche ya estaba llegando y consigo la luna llena se reflejaba sobre el gran agujero de la casucha. Todo parecía ordenado cuando nosotros caímos a la cama embriagados por lo que tanto esperábamos. Éramos descontrolados y apasionados con cualquier movimiento que hacíamos. Ella me besaba el cuello y yo le quitaba la remera con la suavidad que requería.
Y a pesar de que no era nuestra primera vez, parecía como si lo fuera pero con nuestro propio descontrol por querer traspasar las barreras que habíamos establecidos esos ocho meses para no cometer errores.

- ¿esta bien esto? – pregunté aún con todo mi cuerpo apoyado sobre el de ella y la respiración entrecortada-

- Chiquito. – dijo ella mientras me acariciaba la mejilla- ¿si no es ahora, cuando?

- Podemos esperar... - dije dubitativo.

- ¿ya esperamos demasiado, no? – y acarició mi pelo con ternura- los dos queremos... ¿que más da? – y esto último lo gritó con euforia haciendo que riéramos a carcajadas por lo poco de adulto que teníamos.

Me separé apenas de ella y desabroché el cinturón junto con el pantalón que cayó al suelo. Volví a ella y le besé el valle entre sus pechos mientras le susurraba que la amaba y que nada me gustaba más que compartir esto con ella.

Ya todo se había resumido a nosotros, y me atreví a pensar que si en este momento sucediera algo impensado, nada se interpondría.

Mucho para un lobo cazador
pero ideal para el amor
Despacio voy por tu corazón
despacio y me detiene un botón

Le bajé su pantalón con la maestría que había adquirido unos años antes, cuando era un adolescente y todas mis aventuras amorosas se disminuían a la diversión. Ella me miró riéndose con el cuidado que le tenía, como si fuera una pequeña nenita que apenas descubría cosas impensadas. El sostén de ella desapareció y mi calzoncillo junto con su ropa interior calló a un costado. Nos abrazamos fuertemente uniéndonos mientras nos besábamos con intensidad.
Y en todo eso, me atreví a acariciar su pierna por debajo de la sábana que nos cubría.

Porque ya toda la cama estaba prácticamente desarmada, y ahora sí estamos dentro. Ella se retorció al sentir mi cuerpo literalmente pegado al suyo pero aún sin estar completamente unidos. Le besé el cuello, la mejilla y la frente a pesar de que el calor de nuestros cuerpos nos abrazara sin dejarnos escapatoria, y allí estábamos los dos.

La ropa había desaparecido, pero aún no estábamos con la iniciativa de comenzar. Y cuando finalmente la penetré con suavidad, ella ahogó un profundo gemido que la hizo temblar.

Siente como tiemblo ya vez
tuve sexo mil veces pero nunca
hice el amor
Despacio voy por tu cintura
despacio y me detiene la duda
si es que realmente merezco
robarme a la niña
y regalarte a la mujer
e inscribirme en tu ayer

Y ya estábamos exhaustos. Ella estaba con la cabeza apoyada en mi hombro mientras mantenía sus ojos profundamente cerrados e intentando respirar con normalidad. Mi pecho ascendía y descendía aún con su mano en él. Largué una risita, casi en susurro lo que hizo que ella abriera los ojos y riera conmigo. La vida nos sonreía.

- ¿Que pasa? – me dijo mirándome profundamente pero con la sonrisa impregnada en su rostro.

- ¿Alguna vez pensaste en hacer una locura? – pregunté mirándola fijamente pero aún manteniendo el humor.

- ¿No crees que con vos ya hice bastantes? – y siempre me contestaba con otra pregunta.

- Si estás dispuesta a otra... - revoleé los ojos y me acerqué a besarla una vez más.

- ¿Que tenés entre manos? –me miró divertida mientras rozaba sus uñas en mi pecho intentando sobornarme.

- Somos libres... - dije en susurros- podemos hacer lo que queramos, cuando queramos... somos adultos pero aún estamos comportándonos como adolescentes. ¿Quieres hacer la próxima locura?

- Estoy dispuesta. – dijo ella acomodándose más de costado para que la tomara de la cintura.

- Y bien... entonces vamos.

Me paré de la cama desnudo mientras le extendía la mano con una sonrisa. Ella me miró divertida y también lo hizo pero con la sábana sujeta cubriendo su cuerpo, la miré furtivamente y ella supo que debía sacársela.

- ya te conozco Bi... ya está.

Y ella asintió porque sabía que tenía razón. Atravesó toda la cama por arriba, caminando con paso lento. Y nos pareció gracioso estar desnudos en el medio de su casucha planeando una travesura de nenes. La tomé de la cintura y vió que me dirigía a la puerta para abrirla.

- ¿que vas a hacer? – me preguntó asustada mirándome con una expresión casi extraña.

Pero no le contesté, solamente tiré de ella y al abrir la puerta de su casucha, un viento abrasador nos cubrió las pieles haciéndonos tiritar apenas. Pero era un viento cálido, proveniente del verano, así que proseguimos. Ella se apretó a mí con nerviosismo y reí al saber que debido a sus actitudes nunca había hecho la idea de caminar desnuda por su patio trasero.

Caminé hacia el control de toda la casa. Ella me siguió mirando a sus alrededores por si había algún espía que se había colado, pero se tranquilizó y suspiró profundamente al ver que no había nadie más que nosotros.
Bajé una perilla y automáticamente todas las llaves del regadero se abrieron para que salga el agua para mojar el pasto. Ella me tomó de la cintura y se acercó a mí para darme otro beso robado.

- ¿que hacemos ahora?

- ¿Bailamos juntos? – sonreí luego de ver su cuerpo iluminado por la luz de la luna. Era tan linda.

Le tomé la mano y me acerqué hacia donde estaban los regaderos. En el medio del jardín.

La agarré de la cintura mientras volvía a unir nuestros cuerpos. Coloqué un brazo en su cintura y la otra en su nuca. Bianca me imitó, Y todo se nubló ahí.

Tarareamos canciones mientras danzábamos mojándonos por completo y los dos reíamos al encontrarnos en una situación de esa categoría. Unimos nuestros labios a un beso apasionado mientras rozábamos nuestras pieles en una noche iluminada.

Siente como tiemblo ya vez
tuve sexo mil veces pero nunca
hice el amor

Holaaaaa, buen dia! Se que dije que ayer subia, pero surgio algo inesperado. Una perdida inesperada...
Acabo de llegar a casa y senti que debia subirles un capítulo por la falta de no haber vuelto a subir.
Dudo mucho que pueda volver a subir hoy porque no estare en casa, pero si me hago un tiempito se los subo, pero no es nada seguro.

Buen martes!

T.