Capítulo 39

158 14 117
                                    

Narra Adam

Llegamos al lugar de destino, y ya en el estacionamiento privado, bajamos de las limosinas.

Fuimos directo a nuestro camerino, mientras nuestros managers, comenzaron a ayudarles a los encargados de montar el escenario, a realizar esta acción.

Yo llegué directo a acostarme en uno de los sillones. Y a mi lado, se sentó James con su guitarra que le trajeron desde el hotel. En específico, James y yo siempre cargabamos con nuestras guitarras a las giras, pues tenían un sonido distinto a cualquier guitarra común.

—¿Quieres que calentemos un poco las cuerdas vocales? —me consultó.

—Aún faltan cuatro horas para el concierto, creo que mejor más al rato —le indiqué.

—¿Harás yoga antes?

—Sí, en una media hora.

Éste asintió. Duramos un breve momento en silencio.

—¿Qué crees que debería hacer, James? —le consulté—. No sé qué hacer al respecto en esta situación. Me siento perdido —confesé.

—Pues ufff —suspiró—. Creo que inicialmente deberías apoyarla. —Yo le miré interrogante, a lo que éste prosiguió—. A lo que me refiero es que si ella quiere volver a mantener contacto con el padre de Valentina, sus razones tendrá y tienes que aceptarlas. Quizás no las comprendas, porque de hecho, ni yo lo hago; pero en una relación no es para prohibirse cosas, ni mucho menos. Cada quien decide a que personas mantener en su vida y es algo que ambos deben de respetar —me aconsejó—. Por ejemplo, si tu siguieras viendo a Behati por algún motivo, ella tendría que admitirlo, aunque claro que siendo tu ex novia no es tan fácil. Y yo me imagino que Jessica quiere seguir en contacto con Alexander por Valentina, no por otra razón más que ella.

—Joder, James. Deberías haber estudiado psicología —comenté divertido y éste rió—. Hablando de Behati, hoy me encontré con ella.

—¿De verdad? ¿Dónde?

—En Starbucks, cuando fui a por un café en la mañana —le informé.

—¿Y platicaron de algo o simplemente se saludaron? —interrogó.

—Platicamos un momento, de hecho. Básicamente de qué hacía por acá y lo que ha estado haciendo últimamente.

—No hablaron de si se encontraban en una relación, ¿verdad? —quiso saber el rubio, a lo que reí.

—Bueno, un poco en cuanto a ella. Me comentó que disfrutaba su soltería y mantenerse sin compromisos; incluso sentí que eran indirectas para mí.

—Oh, créeme. Eran indirectas para ti —afirmó—. Por eso nunca es bueno hablar con tu ex de su vida amorosa.

—Lo sé, pero vamos, ella me impulsó a hacerlo —dije a la defensiva.

—Ahora imagina que les hubieran capturado una foto a ambos y una revista la hubiera publicado, rumoreando que volvieron —supuso James—. Tú sabes que no es cierto, pero Jessica se entera de dicha nota. ¿Tú como te sentirías? Porque así es justo como seguro se ha de sentir Jessica ahora.

Me quedé pensando un momento las palabras de James. Tenía lógica lo que me decía. Seguro yo estaría preocupado por lo que pensara Jessica de la situación y, quizás, al igual que ella, me habría sido difícil contarle. Me encontraba recapacitando, hasta darme cuenta que me comporté como un verdadero imbécil. Tenía que hablar con Jessica, mas no hoy; pues lo más seguro era que ella estaría enfadada conmigo por la manera en que le traté.

—James ayúdame a enmendar las cosas —le solicité.

—Claro. Dime que necesitas.

Y así le conté el plan que tenía preparado para Jessica. No sería algo exagerado, simplemente sería un detalle para pedirle perdón de la manera más honesta.

My Heart Is Open (Adam Levine) // [Reescribiendo] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora