Capítulo 69

113 13 35
                                    

—Aquí están sus tragos —informó el chico que nos atendió, dejándolos frente a nosotras.

—Gracias —respondió Christina.

No podía creer que de verdad mi suerte fuera tan mala. Esto era peor que haberme encontrado a Adam aquí mismo, pues ella era su ex. El motivo por el que rompimos. De quien ahora él esperaba un hijo.
Esto me superaba, realmente me superaba.

—¿Y a ustedes que se les ofrece? —escuché interrogar al chico.

—Yo un whiskey —pidió una de ellas.

—Tequila —habló la otra.

—Oh, yo una bebida sin alcohol —habló Behati—. Estoy esperando un hijo y le hará daño consumirlo.

"Un hijo. Un hijo. Un hijo", quedó grabado en mi mente. Un hijo de Adam.

—¿Le parecería entonces un Ginger Soda? —le consultó el chico.

—Me parecería perfecto —respondió con una enorme sonrisa.

El simple hecho de observarla y ver su forma de actuar me hacía comprender totalmente el hecho de que Adam le hubiera preferido. Y es que a simple vista ella se veía como la mujer perfecta.
Mis ojos comenzaron a arder al seguir pensando en que ella ahora tenía en su vientre a un individuo engendrado por la persona a la que más había amado.
Intenté ignorar su precencia pero me parecía imposible, y sin poder evitarlo, solté un pequeño jadeo de tristeza. Cubrí mi boca enseguida, más Christina logró percatarse de ello.

—Jessica —me llamó—. ¿Qué sucede?

—Nada —respondí con un hilo de voz y ella tomó mi mano sobre la barra—. No es nada.

—¿Quisieras ir a tomar aire? —me consultó con cierto tono de preocupación en su voz.

—No. Así estoy bien.

Sin estar muy convencida de ello, Christina tomó de su bebida, observándome. A mi ya no me apetecía nada ahora y me limitaba a observar el alcohol reposando en mi vaso.

—Hola chicas —saludó Behati sonriente.

Carajo, lo que faltaba.

—Hola —respondió mi amiga de la misma manera.

—Hola —me limité a responder.

—Perdonen el atrevimiento, pero he notado que ambas se encontraban solas —indicó Behati—. Y pensé en que quizá ambas quisieran unirse a nosotras esta noche. Ya saben. Pasar una noche de chicas las cinco. ¿Qué dicen?

—Sí, ¿que dices Jessica? —me consultó Christina con una sonrisa.

"Que preferiría ir con el tipo que nos observaba bailar a quedarme aquí", pensé.

—Claro —acepté no muy convincente.

Entonces Behati hizo una seña a sus amigas y trajeron más cerca los taburetes de nosotras, formando un pequeño círculo. Durante esa acción, realice un análisis más completo de Behati. Se encontraba vestida con un vestido negro, con falda amplia, tirantes y algo de escote. Su pelo lo mantenía sujeto en una coleta alta con un moño negro. Su maquillaje era sencillo, pero bastante lindo. Parecía una muñeca de porcelana. Al igual que sus amigas. Y debía ser comprensible, eran modelos de Victoria's Secret, ¿cómo se suponía que no fueran tan lindas?

—¿Y bien, qué las trae a ustedes por aquí esta noche? —cuestionó la rubia de nuevo—. Por cierto, me llamó Behati, pero pueden decirme Bee —se presentó con una enorme sonrisa, estrechando nuestras manos—. Ellas son Kelsey y Lais —presento a sus amigas.

My Heart Is Open (Adam Levine) // [Reescribiendo] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora