Stereotype [Hyunın]

cien.

"Día de la boda"
Yang Jeongin.

—¿Tu mamá ya llegó? —Preguntó ansioso Yanan en cuanto el rubio tomó su teléfono.

—Sí, llegó hace un rato... ¡Yanan cálmate, me estas poniendo nervioso! —Gritoneo Jisung viendo a su mejor amigo fruncir el ceño y al conductor bajar del auto.

—¡Deberías estarlo! ¡En menos de cuatro horas horas serás un hombre casado!

—Chicos se escucha hasta afuera del auto, no griten tanto —Regaño Jeongin abriendo la puerta del copiloto del vehículo para entrar.

—¡Yanan me está poniendo nervioso! —Acuso jisung, viendo a su otro mejor amigo sonreir tiernamente para luego tomar mano y la del pelinegro a su lado con suavidad.

—Bien pequeñitos lobi-

—Si Jeongin empieza una conversación así, significa llanto, ya no lo quiero escuchar —Negó cerrando los ojos Yanan.

—¡Yanan! —Reclamo nuevamente el chico de la boda.

Jeongin rió con ternura y apreto las manos de ambos chicos ganando nuevamente su atención —Mis pequeños chicos... —Susurro Jeongin recordando distintos momentos juntos  ellos —Hoy es tu día Jisung, es tu día especial, es el momento de tu vida, el que recordarás siempre así que disfrutalo, se feliz, se el niño feliz que conocí en primaria, el divertido y pequeño lobito que corría por los pasillos aunque otros chicos se burlaran de él, se el centro de atención y sonríe para todos, presumiendo como el pequeño lobito en el que pusieron esperanzas a crecido y ahora es un adulto, que todos sepan lo alegre que estas junto a tu chico, es tu día de brillar así que tienes que ir y hacerlo, Jisung te estamos apoyando, Yanan y Yo, siempre, pase lo que pase, porque lo prometimos, prometimos ser mejores amigos y cuidarnos unos a otros ¿Cierto? —Hablo el menor mirando a ambos omegas quienes le dieron la razón entre pequeñas lágrimas y Jeongin sonrió acariciando una vez más sus manos —Se que estas nervioso aunque digas que no, Sunggie, esta bien estar nervioso, esta bien sentirte ansioso y esta bien que quieras llorar, nosotros estamos aquí para apoyarte, no para juzgarte ¿No ha sido siempre así? —Jeongin rió con suavidad dejando escapar una de las lágrimas que estaba reteniendo al ver como ambos chicos volvían a asentir sin poder mencionar ninguna palabra —Es bastante tarde, pero, quiero agradecerles a ambos, por volver a mi vida, por regresar conmigo y dejarme compartir estos años a su lado, gracias a tí, Jisung, por dejarme conocerte, aunque ya hayan pasado muchos años y no tenga memoria del inicio de todo, gracias por aparecer en mi camino y iluminar lo con tus locuras, gracias por ser mi mejor amigo.

—¡N-No me tienes que agradecer! —Gritoneo Jisung sollozando para luego golpear el hombro del menor con suavidad.

—Y a tí Yanan, gracias por llegar a nuestras vidas, por ser nuestro amigo a pesar de que desconfiabas de todos luego todas esas risas que recibas en las clases de deporte por el maestro, gracias por aceptar que te diéramos una mano a pesar de que te propusimos locuras y sobre todo gracias por ser quien entregará los anillos para Jisung, se que estas triste y al mismo tiempo emocionado, porque tu chico a quien viste crecer todos estos años ya es un adulto así que, gracias.

Yanan jadeo torpemente al intentar hablar y termino por romper en llanto llevando sus manos hasta su rostro para cubrirse.

—Gracias a tí Jeongin... por ser el soporte de ambos cuando estamos mal y por defendernos y cuidarnos todos estos años. —Lloriqueo Jisung dejando caricias en la mano de su mejor amigo.

—Dios... —Jeongin sonrió secando las lágrimas en su rostro para luego intentar borrarlas de igual forma en el rostro de ambos chicos —Pequeños lobitos, esto no es una despedida, dejen de llorar.