CAPÍTULO 60

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*-Deja de llorar, me rompes el corazón...*- respondió suspirando.

*-¡Tú ya me lo rompiste a mí!*- contesté golpeando con todas mis fuerzas la mesa de vidrio.

*-¡Lo sé, Taylor. Perdóname!*- su voz cada vez se tornaba más desesperada. -Las cosas se tornan confusas en mi mente.

*-¿Aún crees que te mentí? ¿Que decidí engañarte con Kevin Trapp y por eso hiciste lo que hiciste?*

*-Es cierto que hice lo que hice por mis profundos celos. Estaba tan celoso que no supe razonar y la primera imagen que vi al subir fue tus labios contra los de él. Me cegué por completo. Pero ella misma se encargó de reconocer sin ningún remordimiento que me había engañado junto con él y que todo lo había hecho para acostarse conmigo.*

*-Y...*

*-Y... lo logró*- mi mano tembló y temí soltar el teléfono. *-Luego me encontré con Dinah y le dije lo que había pasado a lo que ella me dijo que estabas a punto de irte si no es que ya te habías ido pero me rogó no decirte nada. Corrí hasta mi piso y te encontré allí, y tenía tantas ganas de que te quedaras, de escucharte, de abrazarte y llorar en tu regazo... Pero sé que por mi propia culpa te marchaste y ahora te encuentras en el otro lado del mundo, indispuesta a perdonarme.*

*-¿Y qué quieres que yo haga ahora que desvelaste toda la verdad?*

*-No sé. Yo sólo quería que supieras que lo sabía todo ya. Al menos eso me deja más tranquilo.*

*-Correcto, ya estás tranquilo. Ya cumpliste con tu cometido. Adiós Derek.*

Colgué. No podía seguir manteniendo esa conversación y esta maldita depresión me empezaba a comer de nuevo. Y de nuevo por él. Sentí que aquí había acabado todo.
Subí a mi cuarto donde todo estaba tal cual lo había dejado y era imposible olvidar la esencia de Derek.

Cuando mis padres llegaron se alegraron pero a la vez se consternaron de que me encontrara aquí, y no tuve más explicación aparte de la obvia; mi orgullo y dignidad estaban por el piso para cuando me encontraba escuchando a mi madre decir que me lo había advertido pero no la había querido escuchar cuando Derek vino a anunciar que me raptaría bajo mi propio criterio.

Lo odiaba a él. Y me odiaba a mí por amarlo a él. Vaya prueba de amor tan patética, ir para ver cómo Derek se iba tras una desvergonzada sin corazón que lo lastimó por segunda vez. Al menos me tranquilizaba más la idea de que ahora sí creyera la verdad de lo del beso con Trapp.

Intenté desconectarme del mundo y especialmente de las redes sociales desde ese día y decidí que empezaría a tomar clases de yoga por motivo de mi fibromialgia que era la mayor suposición por la cual me estuvieran doliendo tanto los huesos. Pero lo que me estaba afectando es que dentro de algunos días Alemania jugaría nuevamente y esto se volvería un completo desastre teniendo en cuenta que Alemania había logrado alcanzar los octavos de final y su rival al parecer no estaba a la altura de nuestra selección: Argelia. Otro país africano, si mal no estaba.

-Dime Taylor. Dime qué se siente besar a Derek Hoffman- exclamó una estudiante de yoga al reconocerme, que sinceramente no sabía cómo había hecho.

Fruncí el entrecejo con levedad.

-¿Cómo sabes que estoy saliendo con él?- ladeé la cabeza.

-Pequeña, eres más famosa de lo que crees. La prensa te tiene entre ojos- hizo un ademán de victoria.

Esperen ¿había dicho prensa?

-Pero sería algo muy cortés que respondieras...- la chica se paró y apoyando todo su peso sobre una de sus piernas puso una mano en su cintura como si me estuviera desafiando.

-Chicas por favor dejen de perturbar a nuestra nueva estudiante. Taylor... te presento a la clase- dijo señalando con la mano extendida a las siete chicas presentes. -Ésta es una clase de paz tanto interior como exterior, así que debemos estar en paz con nosotras mismas para ser pacíficas con las demás y viceversa- sonrió ampliamente dejando ver su hermosa sonrisa blanca y perfecta. Era de unos cuarentai tantos y llevaba su cabello dorado perfectamente recogido en una cola de caballo alta. La ropa deportiva dejaba ver su moldeada y esbelta figura.

Estando en Berlín - (Manuel Neuer)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora