SONGS, RISKS AND CONFESSIONS _______________><________________
Una vez fuera del agua, se ponen sus chaquetas encima y comienzan a buscar algunas ramas para hacer una fogata.
Steve murmura algunas palabras por el frío, en cambio Fëanor apenas y lo percibe debido las sensaciones anteriores.
No tenía idea que en esta ocasión, no era igual a las demás. Pues aquel ser oscuro había arribado a Hawkins y de una manera que nadie sospechara. Descubrir la verdad, no será sencillo pues este es astuto.
— Hey, Fëanor. — le habla el chico — Date prisa que me estoy congelando. — murmura arrojando las ramas.
Ivers reacciona dejando sus pensamientos atrás y lleva las ramas junto a la demás pila de estas.
Se sienta y extiende su mano, enfocando su mente para iniciar el fuego. Inmediatamente la fogata les irradia el calor que necesitan sus cuerpos para calentarse.
Retira el rastro de sangre que gotea de su nariz y se abraza a sus rodillas; mirando fijamente las brasas que se reflejan en sus ojos.
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Minutos después la voz de su amigo la saca de su ensimismamiento. — ¿En qué piensas? — preguntó mirándola.
Giró a verlo, no quería decirle su preocupación. Después de todo habían venido a comportarse como adolescentes comunes por un rato al menos, y distraerse de su reciente rompimiento.
— Eh, nada. — murmuró negando.
— Lucias muy pensativa… — susurra apoyado en sus brazos.
Fëanor lo mira fijamente, dudosa en contestar por su insistencia.
— Solo que me agrada estar aquí. — decide omitir la verdad.
— Creo que es bastante obvio. — asiente — Aunque sea una locura con este clima.
— La vista es linda. — se encoge de hombros — Y me gusta aprovechar cada momento.
Harrington entendió a lo que se refería, no hablaba mucho con ella de ese tema pero sabía que le gustaba disfrutar de su libertad fuera del laboratorio.
Ya no era un experimento más, y la sencillez o locura que a ella le emocionaba, no se podía ocultar.
Así que simplemente sonrió sinceramente y se sumergieron en un silencio cómodo.
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Una vez secos y listos, volvieron a través del bosque.
— Por cierto, gracias. — dice mientras camina con las manos dentro de la chaqueta.