𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍 𝐒𝐎𝐔𝐋𝐒¹ •| |• 𝐁𝐈𝐋𝐋𝐘 𝐇𝐀𝐑𝐆𝐑𝐎𝐕𝐄 ✓✓

CAPÍTULO NUEVE - II

COOKING A SURPRISE
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Al ingresar a casa se quitaron las chaquetas para dejaron en el armario junto al recibidor.

— Ponte cómoda, — avanzan más — ya sabes dónde está la sala, y la cocina es por allá. — menciona mientras le indica.

— Sí gracias. — asiente sujetando su mochila.

— Ok, debo ir a ducharme. — señala hacia arriba — No tardo. — dijo y ella asintió.

Vio alejarse al chico por las escaleras hasta perderse y ella caminó a la sala. Se dejó caer en uno de los muebles y puso su mochila a su lado. No hizo nada por unos segundos hasta que comenzó a observar el lugar. Era más sofisticado que su hogar con los Byers o los Wheeler; se notaba el alto aporte económico.

Todo se sentía muy silencioso y un tanto extraño, las únicas veces que había visitado la residencia era cuando venía con Nancy o estaban los señores Harrington.

Para eliminar el silencio se pone de pie y camina hacia el reproductor de música. Localiza el botón de encendido del moderno aparato y pone la radio, busca una estación y enseguida se escucha a Billy Idol cantar.

When I'm far from home
Don't call me on the phone
To tell me you're alone

It's easy to deceive
It's easy to tease
But hard to get release

Eyes without a face
(Les yeux sans visage)
Eyes without a face
(Les yeux sans visage)
Eyes without a face
Got no human grace
You're eyes without a face

I spend so much time
Believing all the lies
To keep the dream alive

Con el ambiente puesto, no tardó en vagar por el lugar.

Recorrió las paredes y encontró unas fotografías junto a la chimenea. La familia Harrington reunida, sonriendo para la cámara. Lucían muy diferentes a los Byers en la foto familiar. No tenían ese aire cálido y amoroso que se desprendía en una familia feliz.

Así que recordó que Nancy le había comentado sobre Steve y sus padres, quienes no se llevaban precisamente bien. El señor Harrington era exigente en ciertos aspectos con su hijo, por ello tenían varias peleas al respecto sobre el manejo descuidado de su vida.

No comprendía mucho esos temas familiares pues no tenía experiencia alguna.

Es decir, había mucha diferencia con los suyos.

Mientras los demás lidiaban con llamadas de atención por llegar tarde a casa, regaños por las malas calificaciones, reclamos por no sacar la basura o salidas sin permiso, ella lidiaba con castigos por no esforzarse en asesinar con sus habilidades otorgadas, siendo instada a aumentar sus poderes, puesta en aislamiento cuando no quería hacer lo que le ordenaban.

Situaciones muy diferentes que comparar, lo único mínimamente similar era la constante exigencia del Dr. Brenner para ser mejor. Aunque para ella era ser la mejor arma asesina y el señor Harrington que su hijo sea un mejor hombre exitoso.

Tal vez eso no importa al final, no se debe subestimar los problemas de cada uno. Aceptar que no todos viven en las mismas posibilidades. Por eso ninguno reacciona igual a los demás.