No(,) te necesito | 𝘚𝘺𝘯𝘢𝘤𝘬𝘺 ✔️

Recuerdos | 78

Narra Zacky

Pauso el video en mi celular y arrastro el indicador hasta colocarlo de vuelta al inicio.

Después de ver tantas aplicaciones que te ayudan a aprender a tocar la guitarra, nunca creí que sería tan difícil y tan frustrante. No puedo llevarle el ritmo ni a un tutorial básico en YouTube a mitad de velocidad.

Lo peor del caso es que la canción que elegí ni si quiera parece difícil. Tuve que comparar varios tutoriales para encontrar el más simple y ni ese me ha servido porque no logro coordinar el movimiento de mis dedos.

El hecho de que las cuerdas estén al revés tampoco ayuda en lo absoluto.

Suspiro con cansancio mientras considero rendirme.

Sin embargo, recuerdo la razón por la cual me encuentro usando la guitarra de Brian a escondidas; en lugar de dudar sobre el rumbo de nuestra relación, debo hacer mi parte para mantener vivos nuestros sentimientos.

Estoy por volver a reproducir el video cuando escucho la puerta principal de la casa abrirse. Sin desperdiciar un solo segundo, dejo la guitarra de Haner en su lugar y tomo una escoba que metí al cuarto por la mañana.

Necesitaba una excusa por si él llegaba temprano y me encontraba en su habitación, así que planeé fingir que estoy limpiando el lugar.

—Cariño, ¿ya cenaste? —Grita Brian después de cerrar la puerta.

Escucho sus pasos avanzar por el pasillo y detengo mi actividad falsa para responder.

—No. Te estaba esperando.

Él sonríe al verme salir de su cuarto. Hasta ahora parece que no sospecha nada, afortunadamente.

Le doy un corto beso en los labios antes de ir hacia el cuarto de lavado con la escoba en la mano.

—¿Tuviste un descanso y lo usaste para limpiar la casa? —cuestioma él, caminando hacia la cocina.

—Sí. Las latas de refresco ya se habían comenzado a apilar en mi recámara.

El silencio crece mientras recargo la escoba en la pared. Me parece curioso, así que me apresuro a acompañar a Brian en la cocina para saber con qué se ha distraído.

Al llegar al lugar, me detengo en seco y admiro la amplia sonrisa en su rostro.

—¿Qué pasa? —Pregunto con desconcierto.

—Ah, no es nada. Es que recordé algo. —Ríe.

—¿Puedo saber qué es?

Brian asiente de inmediato, acercándose a mí y tomando mi rostro entre sus cálidas manos.

—Me acordé cuando te lancé una lata de refresco y no la atrapaste.

Sonrío al recordar el rostro ruborizado que tenía Brian cuando eso ocurrió. A pesar de que el golpe de la lata contra mi entrepierna no fue tan fuerte, él estaba bastante apenado por el accidente.

—Te veías muy tierno con los cachetes rojitos —pienso en voz alta.

—No más tierno que tú —replica, besando una parte distinta de mi cara después de cada palabra que sale de su boca. Después, da un paso hacia atrás—. En fin, no quiero que ocupes tu tiempo libre limpiando mi cuarto. En lugar de eso, descansa, ¿sí?

—Claro —digo con cierta duda, considerando que tendré que pensar en otra excusa por si esto vuelve a suceder—. ¿Les fue bien?

—Mhm —asiente, besando mi frente una vez más antes de ir hacia la alacena—. Iremos a grabar el demo pronto y estamos muy emocionados. Yo todavía no lo creo, la verdad.