No(,) te necesito | 𝘚𝘺𝘯𝘢𝘤𝘬𝘺 ✔️

Loco | 94

Narra Brian

—Ogian. ¿No notan a Zacky algo raro?

James y Matthew intercambian miradas. El de cabello claro es el primero en hablar.

—Yo he pasado mucho más tiempo con él que antes, pero no me parece que su comportamiento sea extraño. ¿Por qué lo preguntas?

Me encojo de hombros—. Precisamente por eso. No es que esté celoso de que pase tiempo contigo. Es sólo que lo siento demasiado distante conmigo. Casi no me habla. Incluso cuando estamos solos.

Sullivan abre la boca, pero la cierra justo después. Es obvio que quiere decir algo. Lo que no sé es por qué decide callarlo.

—¿Ya has hablado con él al respecto? —Cuestiona Matthew

—No. Creí que tal vez sólo era imaginación mía. Y, aparentemente, lo es.

—Bueno, al final del día eres tú quien lo conoce mejor. Así que deberías seguir tu instinto.

—¿Y si estoy mal? ¿Y si arruino la hermosa relación que teníamos?

—También existe la posibilidd de que la relación se arruine si no haces algo al respecto —argumenta Sanders—. En verdad creo que es mejor que lo hablen.

Asiento un par de veces. Aunque quiero hacerle caso a Matt por completo, el silencio de mi otro amigo hace mucho más ruido que cualquier otro consejo.

—¿Y tú qué? ¿Te comió la lengua un ratón?

James niega con la cabeza, tomando un sorbo de su refresco antes de responder.

—Nada. Es que no quiero meter mi cuchara en donde no me importa.

—Pues tu silencio ya metió tu cuchara. Sé que quieres hacer un comentario y me voy a volver loco si no lo dices.

—También te volverás loco si lo digo.

—Te juro que no lo haré.

—¿Seguro? Mi vida podría correr peligro.

Miro sus ojos azules de manera desafiante. ¿Qué rayos tiene en mente Jimmy?

—Anda, dilo. Te prometo que no te haré daño.

—Tú también debes prometerlo —pide, mirando a Matthew de reojo.

Él pone los ojos en blanco y asegura que se mantendrá calmado sin importar las palabras que salgan de la boca de Sullivan.

—Debo aclarar que no estoy saltando a conclusión alguna. Sólo les diré lo que he notado —inicia el de cabello oscuro, aclarando su garganta—. Zacky no solía utilizar su celular estando con otras personas. Él únicamente lo usaba para hablar con Brian cuando no estaban juntos.

—Ajá...

—¿No se han dado cuenta que últimamente su atención se encuentra un setenta porciento en la pantalla de su teléfono?

—No me gusta a dónde va esto —susurra Matt en desacuerdo.

—A mí tampoco me gusta decir que tal vez esté hablando con otra persona que le gusta. Además, no creo que Zacky es el tipo de persona que te pondría el cuerno.

—¿Pero...? —Pregunto, algo aturdido por la información.

James suspira—. Tuve una situación como esa con una de mis ex-parejas. Las señales están ahí.

—Tú lo has dicho —replica Sanders, tratando de controlar su evidente molestia ante esa acusación—. Zacky no es el tipo de persona que haría algo así.

—Completamente de acuerdo. ¿Ahora entiendes por qué no quería hablar?

Sacudo la cabeza—. Ya, pero creo que de todas formas debería hacer algo al respecto. Al menos para saber si tu teoría conspiranóica es verdad.

—No creerás que existe la posibilidad —dice Matt, aún enojado.

—Obviamente no —contesto. Sin embargo, lo cierto es que ahora James ha plantado la semilla de la duda. Y si...

—Entonces lo que puedes hacer es planear una salida romántica —sugiere Sullivan con una sonrisa—. Haz que su atención se enfoque en algo más que su celular y, cuando lo logres, habla de la manera más honesta posible con él.

—Soy pésimo planeando cosas románticas. La última vez hice que entrara de contrabando a una sala de cine.

—Eso es romántico para mí.

—¡¿Ya le cantaste la canción que le compusiste?! —exclama Matt de la nada.

—No he tenido la oportunidad, no.

—¡¿Y qué esperas?! —dicen ambos al mismo tiempo—. Es la oportunidad perfecta.

—Ya, pero ¿y si me manda al demonio?

—Escribes una canción corta-venas como la que compusiste con Corey y ¡bum! Nuevo hit de Successful Failure.

Matt le lanza una mirada de desaprobación a Sullivan por su broma sin chiste.

—Gracias por tus ánimos —respondo con sarcasmo.

—Cuando gustes. Por cierto, será mejor que vayamos a casa de Johnny o llegaremos tarde.

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—Tal vez se pregunten por qué los he reunido el día de hoy.

—Jimmy, no tienes por qué iniciar cada reunión con esa frase —comenta Brooks con cierta frustración.

—No seas aburrido —replica el de ojos azules—. Les tengo excelentes noticias. Siéntense, porque se pueden desmayar de la emoción.

—Sólo dilo —pide el baterista sin paciencia.

—Bueno, ya. ¡Nos ofrecieron ser teloneros de My Chemical Romance!

Un silencio sepulcral inunda la habitación. Honestamente, no estaba prestando mucha atención. Estaba más preocupado por planear algo especial para Zacky. El anuncio de James, sin embargo, me ha caído como un balde de agua helada.

—Estás bromeando.

—Brooks, no tienes por qué decir eso cada vez que les doy una buena noticia —bromea Sullivan—. ¡Claro que no es broma!

—¿Qué pacto con el diablo hiciste? —Cuestiona Corey con sospecha.

—¿Eso importa? —Dice Johnny, lleno de alegría—. ¡Seremos teloneros de My Chemical Romance!

—Pero, ¿qué no su concierto aquí es en menos de un mes?

—No. Exactamente es en dos semanas y media.

—¿Qué?

—Sí, ya sé que es muy pronto. Pero tuvieron que cancelar una banda extranjera por problemas de logística y eso hizo que tuvieran que elegir una banda local. Supongo que fuimos lo más barato y decente que encontraron de última hora.

Río ante la aceptación de mi mejor amigo—. ¿Y dijiste que sí?

—Dije que lo consultaría con ustedes primero.

—¿Perdiste la cabeza? —Exclama Seward, acercándose a James rápidamente—. ¡Llámales en este mismo instante y diles que sí!

Sullivan nos mira a todos para saber nuestra opinion. Pero, ¿quién en su sano juicio desearía perder una oportunidad como esta?