No(,) te necesito | 𝘚𝘺𝘯𝘢𝘤𝘬𝘺 ✔️

Fantasmas del pasado | 102

·.¸¸.·🎮 𝟓 𝐦𝐞𝐬𝐞𝐬 𝐝𝐞𝐬𝐩𝐮é𝐬 🎮·.¸¸.·

Narra Zacky

Presiono el botón para publicar en mis redes sociales algo que llevo escribiendo desde hace algunos días.

Finalmente, alguien descubrió mi pasado e hizo toda la información pública. Estoy casi seguro de que fue mi ex-compañero de equipo quien lo hizo, pues fue una de las primeras personas en compartir la publicación original en su perfil. Sin embargo, la cuenta utilizada no tiene nombre alguno, así que no puedo hacer acusaciones directas de ningún tipo.

Cuando me enteré me dio un ataque de pánico casi catastrófico. Para mi fortuna, Atem y Marcus estaban cerca. Gracias a ellos pude calmarme y pensar de manera un poco más racional al respecto.

Quería desmentir todo eso justo como lo hice en el pasado, pero me detuve al ver que el noventa porciento de los comentarios que recibía eran positivos.

Todas las personas que he conocido desde que entré a Ethereal Gaming me han mostrado su apoyo de una forma que jamás pude haber imaginado. Incluso aquellos con quien sólo he mantenido una conversación fluida se manifestaron en redes sociales para desmentir la información de la publicación original.

Incluso la audiencia que he conseguido al hacer streams en plataformas digitales ha comentado cosas buenas sobre mí.

Me parece increíble que la misma comunidad que alguna vez me dio la espalda ahora me esté defendiendo de los rumores con tanta ferocidad.

Ahora que la situación se ha enfriado, he decidido publicar todo lo que debí compartir hace algunos años atrás.

—¿Puedo pasar? —Pregunta alguien desde el pasillo después de tocar la puerta un par de veces.

—Claro.

Marcus pronto entra a la habitación, cerrando la puerta detrás de él.

—¿Cómo estás?

Suspiro profundamente mientras me siento sobre mi cama.

—Bien. Aún me sorprende que haya tanta gente tratando de ayudarme.

—No tendría por qué sorprenderte —resoinde mientras se encoge de hombros—. Todos los que te han conocido, ya sea en persona o a distancia, coinciden en que eres una de las personas más amables del mundo. Así que un demente anónimo no los va a convencer de todas esas cosas de las que se te acusan.

—Muchas gracias, Marcus. Eso es muy lindo de tu parte.

—Sólo digo la verdad —replica, sentándose en mi silla frente al escritorio y girando lentamente—. Kathlyn pregunta mucho por ti.

Abro los ojos al escuchar eso. Me he desconectado un poco de las redes sociales porque me parecían fuente de mucho ruido, así que decidí no regresar hasta que tuviera una publicación lista que hablara sobre los rumores.

Ahora que Kathlyn se cambió de equipo, no he tenido comunicación con ella en bastante tiempo.

—Será mejor que le llame más tarde. Por cierto, ¿cómo les está yendo?

—Bueno, es la primera vez que mantengo una relación a distancia. Así que es complicado —comenta con una sonrisa—. Pero en general diría que bien. Aunque cada quien parece estar en un mundo distinto, estamos haciendo que funcione.

—Me alegra mucho escuchar eso.

—¿Qué hay de ti? ¿Has conocido a alguien recientemente?

—De hecho sí. Ya me lo había encontrado algunas veces en una cafetería cercana cuando salía con Kathlyn y Atem, pero hasta hace unos días me dio su número.

—¿Quién es? ¿Tiene foto de perfil?

—Shh... Atem no debe enterarse porque no dejará de molestarme con eso.

Marcus coloca su dedo índice sobre sus labios cerrados después de soltar una carcajada.

—Guardaré tu secreto.

Sonrío y desbloqueo mi celular para mostrarle el perfil del sujeto.

—Mira, se llama Bradley.

—¿Cuándo saldrán? Puedo ser tu coartada —propone con más entusiasmo del que yo tengo, lo cual me hace reír.

—No lo sé. Quiero llevar las cosas con calma. A penas nos estamos conociendo.

—Entiendo. Supongo que no queda más que decir buena suerte.

—Gracias.

Marcus abre la boca para agregar algo más, pero es interrumpido por una alarma de su celular.

—Disculpa, es hora de hacer stream en mi canal. ¿Te gustaría unirte?

Niego con la cabeza—. Hoy no, Marcus. Gracias de todas formas.

—De nada, Zack. Ya sabes que puedes decirme si necesitas algo.

—Sí, nos vemos.

Después de despedirse con un movimiento de mano, mi amigo sale de mi habitación y cierra la puerta.

Suelto un profundo suspiro justo antes de dejarme caer sobre mi cama.

Mis pupilas recorren el techo como lo hacían cuando me encontraba hundido en la oscuridad. Afortunadamente, mis pensamientos no se vuelven sofocantes como antes.

En realidad, mi mente está tan tranquila que llego a escuchar el aire entrar a mis pulmones y mi corazón bombear en mi pecho.

Sonrío al notar la gran diferencia en mi vida.

De no ser por las valientes decisiones que he tomado, seguiría siendo atormentado por los fantasmas de mi pasado.

Antes me habría rendido de nuevo al encontrar la primera piedra en el camino. Ahora, en cambio, me encuentro de pie con la frente en alto, esperando a que se aproxime el siguiente objetivo para afrontarlo con fortaleza.

Y todo es gracias a mí. Por supuesto que he recibido apoyo de externos, pero ya no siento necesidad de tener a alguien como un soporte. Mi vida ya no depende de nadie más que yo.

Si bien todavía no puedo recordar sin sentir dolor, ya puedo seguir viviendo sin un gran vacío en mi pecho.