No(,) te necesito | 𝘚𝘺𝘯𝘢𝘤𝘬𝘺 ✔️

Necesidad | 27

Narra James

—¿Dónde está Matt? —pregunta Brian en cuanto sale de mi habitación.

Volteo a verlo desde el sillón individual en el que me encuentro.
Mis ganas de regañarlo por lo que hizo ayer se esfuman en cuanto veo la preocupación en su rostro; sin embargo, mantengo mi actitud firme.

—Tuvo que ir a trabajar después de pasar la mañana con Zacky. No debe tardar mucho en venir por su auto.

Noto que él aprieta los puños al escuchar la primera parte, pero no dice absolutamente nada al respecto.
En cambio, se dirige en silencio hacia la pequeña cocina a beber algo de agua.

Regreso mi atención al teléfono que sujeto con ambas manos.
A decir verdad, pensé que Haner se levantaría mucho más temprano. Supongo que lo que sea que haya ocurrido ayer en verdad le afectó demasiado.

Me encuentro considerando la idea de preguntarle y no parar de insistir hasta que se harte de mí, cuando alguien llama a la puerta de mi viejo departamento.

Trago saliva. A diferencia de mí, Sanders no se tentará el corazón con Brian.

Camino con calma y permito que mi amigo entre. Como lo suponía, Matt está más que furioso.

—¿Dónde está?

Simplemente miro en la dirección solicitada, permaneciendo callado mientras lo sigo hasta allá.

Haner ha salido ya de la cocina y nos espera justo en la entrada.
—Lo siento —dice en a penas un susurro.

—Discúlpate con Zacky, no conmigo —responde Matthew con frialdad, cruzando los brazos sobre su pecho—. En verdad lo lastimaste, ¿sabes?

Brian agacha la cabeza después de asentir un par de veces.
Jamás en mi vida lo había visto tan vulnerable.

—Llevémoslo a casa —ofrezco, haciendo caso al hueco creciente en la boca de mi estómago.

—Ayer pudo irse solo a un bar, hoy puede regresar a casa por su propia cuenta.

—Pero está lloviendo —insisto, pero resulta en vano.
Desgraciadamente, estaba en lo correcto; Sanders permanecerá firme en su postura.

—Muy mal por él.

Sin más, Matt se da la vuelta y toma las llaves de su auto que he dejado en una mesa cerca de la entrada antes de marcharse.

Me quedo mirando la puerta como idiota. Sé que Sanders tiene razón y Brian merece esto, así que no muevo un sólo músculo a la espera de que él se vaya también.

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Narra Zacky

Termino de practicar un poco con Austin para el torneo a pesar de no sentirme aún de buen humor.
Decido tomar una taza de café y después simplemente ir a dormir.
En cuanto sirvo el agua hirviendo, logro escuchar que alguien toca la puerta por encima del incesante ruido de la lluvia.

Dejo mi taza en la cocina para dirigirme hacia la entrada.

Abro la puerta de mi casa y quisiera cerrarla de inmediato. Sin embargo, la mirada rota que posee el hombre justo afuera hace que lo deje entrar.

Escucho cómo Brian cierra la puerta detrás de él mientras me doy la vuelta para regresar a mi habitación.
Para mi sorpresa, una fría mano toma la mía con desesperación y tira de mi brazo de manera sutil hasta que me encuentro de frente hacia él.

No tengo tiempo para reaccionar, pues Haner acorta la distancia entre nosotros hasta que su rostro se encuentra demasiado cerca del mío.

Sus pupilas bajan hasta mis labios, provocando que mis mejillas se tornen rojas.

Pienso que, tal vez, esto no es más que un retorcido sueño. Sin embargo, toda sensación que invade mi cuerpo es auténtica.

Aunque los ojos castaños frente a mí brillan con cierta determinación, Brian espera hasta que yo decido juntar mis labios con los suyos en un beso tortuosamente lento.

Enredo mi mano en su cabello mientras él sostiene mi cuerpo con firmeza contra el suyo.

Entre mis dedos escurre un líquido frío y la textura que sienten las yemas es tan inusual que me hace sentir en otra dimensión.
Aire y un poco de saliva escapan mis labios para fundirse en un sabor completamente nuevo para mí.

Desafortunadamente, mi boca siente el frío de su ausencia más pronto que tarde, evitando que pueda captar cada una de las sensaciones que su acto creó en mí y dejándome con una sola; necesidad.