No(,) te necesito | 𝘚𝘺𝘯𝘢𝘤𝘬𝘺 ✔️

Mi parte favorita | 65

Narra Zacky

Me arrepiento un poco al dejar pasar la única canción romántica de la noche sin besar los labios de Haner. Sin embargo, mi miedo permanece invicto hasta que "You're so beautiful" termina de resonar en el lugar.

Más que un lugar público, nos encontramos en un concierto. Quién sabe qué tipo de gente haya y en qué situaciones se encuentren. Así que, aunque me duela un poco, es más seguro esperar hasta que lleguemos a casa.

Mientras tanto, no queda más que disfrutar el resto del concierto con mi emocionado acompañante. Admitiré que estuve escuchando las canciones de la banda desde que conseguí los boletos. No creí aprenderme alguna, pero esa nunca fue mi intención. En realidad ni si quiera lo hice para encajar una vez que estuviera en el concierto, sino, más bien, para sumergirme un poco más en el mundo de Haner.

Su gran sonrisa después de cada canción me hace ver que logré mi objetivo.

Tomamos un taxi de regreso a casa. Le pago al chofer antes de bajar del vehículo. Miro cómo se aleja y doy la vuelta hacia la entrada. Brian toma mi mano antes de que si quiera comience a caminar.

Volteo a verlo con una mezcla de curiosidad y preocupación en la cual predomina esta última.

—¿Qué pasa? —cuestiono de inmediato. ¿A caso ocurrió algo malo sin que lo notara?

Afortunadamente, las facciones en mi rostro calman la tormenta antes de que se desate en mi mente y destruya todo a su paso.

—Gracias —dice con firmeza, acercándose a mi.

Pasa de la media noche y el aire mueve ligeramente un par de árboles a la lejanía, pero el frío y la oscuridad siempre serán inexistentes mientras esté con Brian.

—Sólo fue un concierto —respondo con una sonrisa.

Él baja la mirada—. Si hubiera sido sólo un concierto no me habría sentido tan feliz. Así que deja que te agradezca.

Sus manos toman mi rostro con cuidado y sus pulgares acarician tiernamente mis mejillas. Aunque mis oídos están algo lastimados por los gritos y el fuerte sonido de las guitarras, el silencio que nos rodea me da la seguridad de juntar mis labios con los suyos.

Recuerdo entonces aquel momento en el que deseé hacer esto y no pude. La canción pronto hace eco en mi mente; cada palabra haciendo que mi corazón se sienta un poco más vivo.

Alcanzo su mano derecha con una de las mías y aprieto ligeramente sus dedos. Brian sonríe contra mis labios y lo único que puedo pensar es en lo mucho que lo amo.

Me separo un poco al procesar ese silencioso diálogo.

Lo amo.

¿En verdad...

Brian presiona su mano ligeramente contra mi mejilla, llamando mi atención—. ¿Todo bien?

Trago saliva e intento no entrar en pánico. Para mi fortuna, logro hacer que mi voz suene más honesta de lo que esperaba—. Sí. Es sólo que quisiera descansar.

—Lo siento —se disculpa de inmediato con una apenada sonrisa—. Vamos, dormirás en mi cama esta noche.

Su mano toma con fuerza la mía y me guía a través de la puerta principal hasta mi habitación.

Ya va para un mes que Laurie empezó a vivir aquí y aún no he tenido el valor de decirle lo que pasa entre Brian y yo. Supongo que ya lo sospecha, pero tengo la responsabilidad de decirle. Más ahora que mis sentimientos por él se han intensificado demasiado.

No me quiero imaginar todo lo que me dirá al respecto, así que decido embriagarme con la fragancia característica de Haner y hablar sobre cualquier cosa antes de que mi ansiedad cobre vida.

—¿Cuál fue tu parte favorita del concierto?

Él piensa durante un rato y me concentro en los latidos de su corazón para mantener la calma.

—Cuando Richard subió a la valla y cantó justo a centímetros de a las personas que estaban hasta enfrente —responde, haciendo referencia a una de las últimas canciones de la presentación—. ¿Qué hay de ti?

Sonrío al recordar la emoción en el rostro de Brian durante el momento al que hace referencia. Sin embargo, mis pensamientos negativos regresan más pronto que tarde al renacer la memoria por la cual ha preguntado.

Aunque dudo en responder de manera sincera, termino haciéndolo. No me agrada mucho la idea de mentir y creo que no tiene nada de malo mi verdad.

—You're so beautiful... —Te escucho sonreír ante mi intento malo por cantar, pero decido continuar después de levantar mi rostro para verte de frente—, So beautiful... Are you ready for the fall?

—We desintegrate in love...

Tu voz hace que mis males desaparezcan. El intenso arrepentimiento que había regresado ya no existe, puesto que ahora sé que hice bien en no besarte.

Si bien habría sido un momento muy lindo, también nos habría privado de vivir uno mucho más íntimo. Y, para mí, no hay algo más hermoso que eso.

Reímos mientras nuestras miradas permanecen fijas una en la otra. Entonces, me doy cuenta de que te he mentido. Mi parte favorita no fue una canción.

—Brian —inicio, enmendando mi error con mis siguientes palabras—: Tú eres mi parte favorita.