No(,) te necesito | 𝘚𝘺𝘯𝘢𝘤𝘬𝘺 ✔️

Roto | 85

Narra Zacky

Aunque me agradó sentir la cálida mano de Brian sobre la mía en el transporte público, no pude eliminar la incomodidad que me causó el gesto.

Las miradas que me dirigían los extraños por poco me agobian. Afortunadamente, llegamos a nuestro destino antes de que mis oscuros pensamientos me consumieran por completo en frente de todos.

Bajé del camión tan rápido como pude y caminé hacia el departamento sin voltear hacia atrás. Brian intentó seguirme el ritmo, pero no lo logró tan fácilmente.

Yo sólo quería poder respirar de nuevo.

Y lo logré.

Tan pronto como entramos a nuestro hogar y la purta se cerró detrás nuestro, Brian tomó de mi brazo mientras su otra mano alcanzó la parte de mi cabeza.

—Calma. Respira. Estoy aquí. Sólo somos tú y yo —dijo en voz baja mientras dibujaba círculos relajantes sobre mi cabello—. ¿Puedes mirarme?

Asentí ligeramente. Lo veía. Mi vista era borrosa, pero lo veía.

—Dime otras tres cosas que puedas ver —pidió con tranquilidad.

Con cierto temor, comencé a mirar a mi alrededor. Me costaba enfocar la vista pero realicé la tarea con éxito.

—La puerta. El sofá. La televisión.

—Bien. Bien. Toma esto. ¿Lo puedes sentir? —Preguntó, ofreciendome algo que me costó varios segundos reconocer.

—Es un billete.

Él sonrío. Continúo pidíendome identificar sonidos y olores, pero ya no era necesario. Había logrado traerme de vuelta a la realidad. Me sentí tan agradecido que no pude hacer más que abrazarlo y llenar su rostro de besos.

Es por eso que ahora me estoy esforzando todavía más por conseguir tocar una canción para él.

Suspiro al recordar una vez más lo que ocurrió el día de ayer. De no ser por Brian... No sé realmente dónde estaría. Lo único que sé es que no quiero saberlo en realidad.

Aún no estoy listo. No cuando todavía no le demuestro lo mucho que lo quiero y aprecio.

Tal vez una canción no sea lo suficiente para lograrlo, pero me gustaría intentarlo.

Practico una vez más la canción desde el inicio. He practicado sin descanso desde que Brian salió de la casa por la mañana y, aunque he mejorado bastante, aún siento que no toco la guitarra suficientemente bien.

En realidad, parece que mis dedos se atoran siempre antes de llegar al segundo verso. Y ni hablar de mi canto, el cual recita la letra y hace que parezcan que son de una canción completamente distinta.

Suspiro con cansancio al notar que he posicionado mal los dedos y estoy tocando un acorde que probablemente no existe. 

¿Cómo es que los tutoriales hacen ver todo tan fácil?

Bueno, aquí vamos otra vez.

Reacomodo la guitarra en mi regazo, decidido a tocar la canción desde el principio. Estoy a punto de comenzar a cantar cuando una de las 6 cuerdas se rompe.

Mis ojos se abren con sorpresa y desesperación.
Será imposible continuar practicando ahora.
A menos que alguien pudiera ayudarme.
Pero seguro Corey está con Brian.
Le podría comentar a Matt.
Sí.
Matt puede ayudarme.

Sin querer pensarlo más tiempo, le mando un mensaje a Matthew. Espero con impaciencia la respuesta que no llega.

En su lugar, recibo una llamada de mi ángel salvador: Corey.

—¿Qué pasó, Julia?

Sacudo la cabeza con algo de confusión. Me toma un momento comprender que quiere mantener mi identidad en secreto.

—Rompíunacuerdadetuguitarra.

—¿Qué?

—Querompíunacuerdadetuguitarra.

—Hey, tranquila. No pasa nada —dice con una sonrisa que puedo apreciar incluso a la distancia—. Dejé los documentos en mi portafolio, ¿estás segura de que revisaste todo?

Mis ojos viajan hasta el estuche de la guitarra. Tal vez sea eso de lo que está hablando.

Con cuidado, dejo la guitarra sobre la cama. Para mi fortuna, encontrar el paquete con cuerdas nuevas no resulta difícil en lo absoluto.

—Oh, creo que los encontré. Pero no entiendo qué hacer ahora.

—No te preocupes, entras a la página web y ahí te dice qué pasos seguir para actualizar la información.

Asiento lentamente, comprendiendo todo a medias.

—Ah, claro.

—El trámite es muy fácil, ya lo verás —asegura con tranquilidad—. De cualquier forma, puedo revisar los documentos contigo más tarde.

—Eh- pero...

—Dale, no te preocupes por el perro. Haré que alguien pase por él y lo lleve a casa.

Frunzo el ceño. ¿A caso se acaba de referir a Brian como un perro? La idea me hace reír.

—De acuerdo. Gracias.

—No hay de qué, cariño. Te mando mensaje cuando me desocupe.

—Nos vemos.

Sonrío, ya algo más relajado que antes. Termino la llamada con Corey y abro YouTube de inmediato.

Supongo que aquí comienza mi segundo round con los tutoriales.

·.¸¸.·♩♪♫ 🎮 ♫♪♩·.¸¸.·

—¿Tardaste mucho en ponerle una cuerda nueva? —Cuestiona Corey con una amplia sonrisa.

Ladeo mi cabeza hacia un costado. Si no hubiera tenido tanto temor de romper una segunda cuerda, probablemente habría tardado menos.

—Estoy comenzando a convencerme de que no nací para esto —acepto con una sonrisa.

—Ánimo. Déjame escucharte antes de que Matt lleve a Brian a casa.

Río. Así que sí se refería a Brian como un perro...

Sacudo la cabeza para evitar distracciones. Después, acomodo la cámara de mi computadora para que Corey pueda ver también su guitarra y a mis pobres dedos enredarse con cualquier cosa.

Respiro profundamente. Todavía me pone algo nervioso ser observado, por lo que agradezco todavía más el tiempo que dedican mis amigos en ayudarme.

Sin más, comienzo a tocar y cantar. Evito prestar mucha atención en los detalles y en mis equivocaciones. Mantengo los ojos cerrados para no dejar que las reacciones de Corey afecten los movimientos de mis manos.

El silencio nos invade en cuanto termino mi corta presentación (decidí acortar la canción porque en verdad creo que el segundo verso está maldito o algo). Con temor, abro los ojos lentamente.

Para mi sorpresa, Corey muestra una sonrisa más amplia y resplandeciente que la usual.

—Me gusta.

—Aún tengo algunos problemas con el ritmo y la letra, pero...

—¿De qué hablas? Para alguien que recién ha tomado una guitarra es escepcional. En verdad que es impresionante lo mucho que has mejorado en estos días, Zacky.

Le sonrío de vuelta con emoción.

—Entonces, ¿crees que estoy listo para presentar mi canción en unos días?

—Claro que sí. Y si Brian tiene otra crítica que dar, él recibirá una crítica de mi puño.

Río fuertemente ante su amenaza indirecta.

—Muchas gracias, Corey.