No(,) te necesito | 𝘚𝘺𝘯𝘢𝘤𝘬𝘺 ✔️

Marketing gratis | 107

Narra Brian

—¿Quién crees que gane, Matt? —Pregunta Sullivan en cuanto regresamos a nuestros lugares en el estadio de béisbol.

—No tengo idea y no me importa —contesta el de ojos verdes con una sonrisa—. Hacía mucho que no venía a un partido en el que la afición estuviera apoyando tan apasionadamente.

—Es cierto. Hasta me dieron ganas de venir más seguido.

—Sólo lo dices porque has quedado fascinado con los hotdogs que venden aquí —replica el de ojos azules.

—Tal vez tengas razón... ¡Oye! Te dije que te compraras tus propias papas —exclama James con molestia cuando se da cuenta de que le he estado robando papas fritas de su plato.

—Mi combo no las incluía y es bastante caro comprarlas aparte —me quejo después de ingerir la comida que le pertenecía a él.

—Sí, pero...

La voz de Sullivan se queda callada por algunos gritos en la multitud.

—¿Qué rayos?

—!Miren! —dice Matt, resolviendo la duda.

Mis ojos siguen la dirección en la que señala, notando que la "cámara del beso" me está enfocando junto a una joven de cabello rojizo que se encuentra a mi izquierda.

Me levanto de inmediato. Mi reacción es huir, pero el escuchar el nombre de mi banda por las bocinas hace que me quede congelado.

Antes no habría tenido problema con voltear a ver a la mujer de al lado y besarla. Ahora no me siento muy cómodo haciendo eso. Pero, ¿no sería muy grosero ignorarla?

—Brian, ¿qué haces? —Pregunta James, sacándome del trance en el que me encontraba.

No sé por qué parece estar molesto conmigo y, en realidad, no le doy importancia porque decido girar hacia la izquierda y acercarme a la nerviosa joven.

—Disculpa, soy gay.

—Oh, no hay problema —dice con un tono de alivio en su voz. Tal vez sus amigas también la estaban presionando para el beso.

Estrecho su mano con una sonrisa antes de volver a girar hacia enfrente. La gran pantalla al centro continúa enfocándome, así que me limito a saludar. Más gritos se escuchan a nuestro alrededor hasta que la imagen es reemplazada por otra pareja aleatoria en el estadio.

Me vuelvo a sentar. Mis amigos me miran con sorpresa. Aprovecho eso para robar un par de papas más.

—No puedo creer lo que acaba de pasar —dice Sullivan.

—No es la gran cosa.

—¡¿Bromeas?! Te reconocieron como el guitarrista de Successful Failure. ¿A caso no escuchaste lo que dijo el presentador? —Añade él con emoción.

Niego con la cabeza. Estaba teniendo una crisis existencial sobre cuál era la mejor decisión a tomar en momentos como ese.

—Supongo que ya hice todo el trabajo de marketing del mes.

—Vaya que lo hiciste, hermano.

Aunque trato de olvidar el suceso, me es imposible concentrarme en el partido. En primera porque no sé nada de lo que está pasando y en segunda porque siento la pesada mirada de Matt cada cinco minutos.

—En verdad quería aguantar a que acabe el partido, pero debo ir al sanitario lo más rápido posible —anuncia James de la nada, colocando su vaso de refresco en el piso junto al mío.