No(,) te necesito | 𝘚𝘺𝘯𝘢𝘤𝘬𝘺 ✔️

Romance de verano | 109

Narra Brian

—Apresúrate, James. Muero de hambre —me quejo mientras arrastro mi maleta hasta nuestro cuarto.

—Pero si comiste en el aeropuerto.

—Ya sé, pero me dio hambre por cargar todo esto desde un extremo del aeropuerto al otro.

Sullivan pone los ojos en blanco—. Te dije que te compraras una maleta con rueditas. Además, tus maletas no pesan una tonelada.

Río mientras abro la puerta del cuarto y me apresuro a ocupar la cama cercana al balcón. A pesar de que nos encontramos en el tercer piso y hay varios edificios que estorban, la vista hacia el mar es bellísima.

—¡Al fin! Ahora sí podemos ir a comer.

—Ve tú. Yo muero de calor, así que me bañaré antes de bajar.

—No, el punto es que nos la pasemos bien juntos, así que supongo que tendré que esperarte.

—Te vas a dormir, ¿no es cierto?

—Tal vez.

·.¸¸.·♩♪♫ · ♫♪♩·.¸¸.·

—¡BRIAN, DESPIERTAAA!

Me muevo sobre la cama con dificultad mientras abro los ojos lentamente. Sin advertirlo, mi amigo salta encima de mí, aplastando mi cuerpo por completo con el suyo.

—James... Déjame... Respirar...

—Eres un exagerado, ni te estás poniendo morado.

—¿O sea que vas a esperar a que me ponga morado para quitarte?

—Tienes razón. Si mueres, será muy difícil conseguir a otro guitarrista —replica con una sonrisa mientras se levanta—. Te traje una sopa de contrabando.

—¿Por qué trajiste sopa cuando hace calor?

—Eres un malagradecido. Si quieres la regreso.

—¡No! —Digo con urgencia, alcanzando el tazón de sopa antes de que mi compañero pueda agarrarlo—. De verdad que muero de hambre, gracias.

—Si eso fuera cierto, te habrías muerto hace dos horas.

Miro la hora en mi celular. No puedo creer que ya ha pasado tanto tiempo desde que llegamos.

—¿Por qué no me despertaste?

—Te veías tranquilo —explica tras encogerse de hombros—. Además, dijiste que el objetivo del viaje es descansar y quitarnos el estrés. ¿Qué mejor forma que durmiendo con el sonido de las olas de fondo?

—Supongo que tienes razón... —comento mientras busco alguna cuchara en la mesa de noche que separa nuestras camas—. Oye, ¿y con qué se supone que me coma la sopa?

—Ese es tu problema. Yo ya te solucioné el problema de la comida.

—En momentos como este extraño a Matt.

—Mejor apresúrate para que alcancemos a ir a la playa antes de que anochezca.

Siguiendo la sugerencia (o amenaza) de Sullivan, me tomo el caldo de la sopa y me doy una rápida ducha para después ponerme el traje de baño.

Como Sullivan se cambió desde hace rato, él sólo me espera a que esté listo para salir de la habitación hacia el elevador.

—Y... ¿Qué estuviste haciendo mientras yo dormía?