Capitulo 32: Una vez por mes...

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A paso rápido fui hasta el baño. Era algo obvio lo que me estaba pasando y me regañe por nunca recordar la fecha, pero vamos a muchas mujeres le ocurría esto ¿No es así?

Me metí dentro de la gran bañera y me deslice fuera de la remera de Harry. Por suerte no estaba manchada, a diferencia de mi ropa interior. Otra punzada de dolor se extendió a través de mi estomago y dando un respiro profundo encendí el agua. Comencé a nivelarla en una buena temperatura, mas caliente de lo normal. Sin pensarlo dos veces me hice un ovillo humano y me senté en la bañadera,por suerte esta era espaciosa.

Apoye mis brazos sobre las piernas y allí enterré mi cabeza. Aquí vamos con una semana dolorosa. Gruño mientras las gotas cálidas mojaban mi cuerpo y cabello. Tendría que tranquilizarme y no pensar en los fuertes dolores que solía tener mi cuerpo en esta semana, y no estaba exagerando, muchas mujeres suelen tener molestias o sentir el dolor pero yo tenia grandes espasmos y tensión corporal que eran estresantes. Yo si sabia lo que significaba dolor.

Suspirando alargue la mano hacia mi jabón liquido de coco y coloque una gran cantidad de este en mi mano, despacio apoye mi mano en la parte baja del vientre y comencé a darme suaves masajes en círculos.

-_____, ¿_______? -

-Aquí estoy, Harry - conteste.

Parpadee varias veces entre el vapor,antes que la puerta fuera abierta. La silueta apareció y se acercó con rapidez.

- ¿Cuanto tiempo llevas aquí? - pasando de mi estiro su mano y cerro el grifo.

Mi manos estaban llenas de arrugaras y mi pelo empapado pegado a mi cuerpo pesaba. No tenia idea.

-No lo se - respondí estirándome - me quede dormida - Harry estiro una mano hacia mi, mientras la otra sostenía una toalla. Me levanto con fuerza y rapidez.

-AGHZ - otra punzada se extendió por el rápido movimiento y me lleve una mano al vientre.

Harry me soltó, sin prestarle mucha atención a mi queja, y se asomo sobre la bañera. Unos segundos después se giro horrorizado.

-¿Que te paso?¿Que hiciste? - en dos zancadas llego a mi y retiro la toalla que me cubría pasando sus ojos por todo mi cuerpo, sin querer perder una mínima parte de este. Con movimientos rápidos, toco y repaso toda mi anatomía hasta llegar a mis brazos y revisar las muñecas.

-Harry - dije impaciente. Idiota, el pensaba que...

-No entiendo - susurro y levantó mi barbilla para detenerse en mi cuello.

Me solté bruscamente fastidiada.

-No me lastime, ni me corte - dije arrebatando la toalla de sus manos - es la semana, Harry - dije mientras me cubría el cuerpo y anudaba mi cabello. Por su rostro fue marchando el entendimiento y luego asintió.

-Entiendo, uhummm, ¿Te duele mucho,no? - dijo llevando una mano hacia mi vientre. Asentí -Entonces vamos a la cama - volteé dispuesta a caminar cuando el me tomo y me elevo por el aire. Reí al notar que me tenía en sus brazos.

-Nosotros siempre terminamos así - dije estirándome para besar su nariz.

A paso lento me llevo hasta el cuarto y me deposito en la cama.

-Voy a mojarla - advertí mientras abrí las frazadas.

-Tienes razón, espera un segundo - salio del cuarto y entro con otra toalla.

Sin sacarme la que tenía, con la nueva, comenzó a secar mis pies. No me paso desapercibido que esparció uno que otro masaje. Luego seco mis piernas hasta los muslos.

La "Puta" Personal de One DirectionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora