La "Puta" Personal de One Direction

Capitulo 72: Alas Rotas

Al terminar de comer, todo se había vuelto mas tranquilo y monótono. Liam en compañía de Zayn se encargaron de la limpieza y de todo lo utilizado para comer, mientras que Niall les daba apoyo moral contando chistes o haciendo malos comentarios sobre sus actividades. Louis ya estaba en el octavo sueño estirado a los pies de mi cama, mientras que Harry se encontraba mirando una seria junto a mi.

Seguro han escuchado hablar de Gossip Girl, y si no lo han hecho o no la han visto, les aconsejo de todo corazón que lo hagan en este instante.

Mientras Harry se encontraba inmerso en Netflix yo lo miraba atentamente. Su mandíbula estaba mucho mas marcada, sus pestañas se veían aun mas largas de lo normal, y me pregunte si era por su cara de asombro o por alguna otra razón. Repentinamente la mano que sostenía el control se sobrepuso sobre su mano libre y las dos taparon su boca.

-¿ACABAS DE OÍR A CHUCK? - grito.

Louis a centímetros nuestro murmuro algo entre sueños y se giro al piso cayendo con un sonido sordo. Instintivamente trate de levantarme para ver como estaba pero el vendaje no me lo permitió. El ojiverde junto a mi soltó el control y se estiro sin dejar la cama.

-Esta bien, sigue dormido... lo siento - dijo encogiéndose sin parecer muy apenado.

Su atención volvió a la televisión.

Me reí bajito, acompañada de un poco de dolor, y tironee de su brazo para que volviera junto a mi. Se movió sin sacar los ojos de la gran pantalla y paso su brazo por mis hombros haciendo que mi diminuta figura encaje en su costado.

La idea de tomar una foto de nuestros pies con la imagen de Gossip de frente llego a mi, busque alrededor de la habitación el pequeño aparato pero no lo encontré.

-¿Harry, mi celular? - pregunte alejándome un poco de el.

Removiéndose, deslizo su mano entre nosotros y palmeo por la sabana hasta encontrar el control y pausar la serie.

-Mmmmm, se ha vuelto pedazos en medio del accidente - dijo lo mas sutil que pudo.

Mi boca se abrió quejandose por el sin fin de contactos que acababa de perder, pero mi voz interna me reprendió por no agradecer el estar viva. Largue un rugido quejoso y tape mi cara con mis manos. El hecho de moverme velozmente hizo que un ardor recorriera todo mi cuerpo.

-Me duele mucho - solté luego de unos segundos con una voz fina casi de niña.

-Oh cierto, creo que es hora del calmante - destape mi rostro y lo vi rebuscar entre sus bolsillos hasta que saco su celular. Voltee mis ojos mientras el asentía luego de revisar la hora - Liaaaaaaaaaaaaaam, ¿puedes traernos un vaso de agua con el calmante?- alargo elevando el tono de voz.

-¿DONDE ESTA? - contestaron desde la cocina.

-SOBRE EL MUEBLE DE LA SALA - Dijo tecleando la pantalla del Iphone.

Los gritos no habían despertado al hombre del suelo, pero si habían colaborado para aturdirme.

-Quiero un celular - repetí sonando como pequeña.

Harry saco su mirada del teléfono y asintió.

-Lo tendrás, cuando puedas levantarte iremos juntos - negué ante su contestación.

-No se cuanto tiempo tendré que estar aquí, así que lo ideal seria que ustedes vayan a comprarlo por mi - el considero mi idea.

-Esta bien - dijo cuando por la puerta entraba Niall.

-Mañana - sentencie, antes de tomar el vaso y la pastilla que me ofrecía el rubio.

-¿Mañana que? - pregunto mirando entre los dos.