La "Puta" Personal de One Direction

Capitulo 14: Bad Sister II

-DIOOOS MIOOOOO- grite.

Sin delicadeza alguna me arroje fuera de la cama pateando el acolchado que se había envuelto hace segundos sobre mi y salí disparada rumbo a la puerta. En menos de medio segundo me encontraba golpeando desesperadamente la puerta de mis vecinos de al frente.

-Ella quiere que saltemos sobre su cu...- pase sobre Louis y su mirada de satisfacción hecha un torbellino, luego me volví y lo empujo por haber querido usar un mal vocabulario. Luego de eso me apresuré hasta la cocina de donde escuchaba un suave tarareo angelical, que supuse, era Harry.

-HARRY! - chille con fuerza detrás de el. Este, por el susto, deja caer al suela la sartén, con lo que sea que estaba preparando, y giro. - MAÑANA, HARRY, POR DIOS - dije elevando cada vez mas la voz - MAÑANAAAAAAA - el rostro de Harry parecía en confusión pero luego de verme chillar desesperada el entendimiento fue tomando camino, hasta que sus ojos se abrieron al tope.

-Mañana es el cumpleaños de Luna - declaro y el agite en su voz fue notorio. Asentí moviéndome de un lado a otro con nerviosismo.

-¿¡Luna!?- Se metió Louis - _____, ¿Olvidaste el cumpleaños de tu hermana? - dije entre burlón y preocupado.

Girándome hacia el, le eche una suave advertencia con la mirada, que al parecer entendió, y solo callo.

-A mi defensa siempre olvido todo, pero esta vez no es así... técnicamente - cerré los ojos, pensando que podría hacer con tan poco tiempo.

-Bueno, pensándolo, en cierto modo te acordaste, tarde, pero lo hiciste - dijo Harry, mientras levantaba la sartén y el alimento anteriormente desparramado por el suelo.

-Aunque el tiempo que me queda para portarme como una buena hermana es mínimo - dije aun alterada.

-Ya eres una mala chica, que tiene de diferente ser una mala hermana - canturreo Louis, esta vez Harry fue el que lo hizo callar con su mirada.

-¿Que piensas hacer? - voltee los ojos ante su pregunta tonta - bueno, ¿que piensas regalarle? -

-Bueno, pensemos que Luna estaría mañana cumpliendo sus nueve años - Los allí presente asintieron - y lastimosamente no puedo regalarles a ustedes, aunque ella los desea - los dos ensancharon su deslumbrantes sonrisa - así que tengo que optar por algo menos real pero que ella quiera... - me encerré en mi mente y rebusque los recuerdos que tenia de las ultimas veces que había hablado por teléfono con mi hermana menor. Ella era diferente a mi... en todo.

Pensándolo ella era una especie de Barbie con nueve años; todos la amaban en su colegio, era gentil, amaba a los animales, siempre bondadosa, fuerte, valiente, simpática, hermosa y tenia un gran carácter que hacia a todos tomarla como una reyna. Ese pequeño demoño tenia su séquito. Me reí, mi vida de pequeña había sido lo suficientemente distinta.

¿Que es lo que ella podría soñar?, además de a mis cinco chicos, que con su poca edad ella amaba profundamente. Los tenia como amores platónicos, inalcanzables, mas como ejemplos a seguir y muñecos que pretendía tener en casa.

Repentinamente, recordando la charlas con mi hermana, sus quejas por su dormitorio me invadió. Supuestamente el cuarto,no había sido remodelado desde hace mucho tiempo y, al parecer, mama no le daba mucha importancia a que ella este gustosa de cambiar varias cosas. Decidí que le brindaría lo que necesitaba y por lo que tanto reclamaba.

- YA LO TENGO - afirme gritando. 

Harry tomo las llaves y Louis comenzó a dirigirse hacia la puerta, pasándolos camine apresurada hasta las escaleras.

-Espera - hablo Louis, tomándome del brazo - piensas ir... así - luego de seguir su mirada evaluadora,note que debía cambiarme.

-Un segundo - pedí corriendo hacia la puerta de mi apartamento, que cabe decir, había olvidado abierta.