Capítulo 57: Canción de Cuna

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Louis había entrado en la habitación y lo había dejado explicarse tal cual había acordado con migo misma. Lo dejaría hablar todo lo que sea necesario. Cada una de sus palabras habían sido una posibilidad dentro de mi, aunque no me esperaba que el llorara. Ver las lágrimas caer por su rostro me hicieron darme cuenta que, por un lado el había echo todo esto, pero por el otro yo también tenía la culpa. Estos días en que había estado pensando descubrí que me estaba lastimando a mi misma.
Ahora me encontraba limpiando con besos cada una de sus lágrimas, era como una cadena repetitiva, besaba una lágrima y luego llevaba mis labios a su remera donde dejaba una marca impresa de agua salada; así una y otra vez.

 Se movió y por ende mi cuerpo se movió a la par del suyo.

-Estos días - dije acariciando su cabello - estuve pensando...mucho - el asintió y con la manga de su campera termino de limpiar su rostro -Louis - dije tomando su rostro de cada lado y obligando a que me mirara fijo. Sentí mis uñas,bastantes largas, rozar su barba y clavarse solo un poco en su piel - tengo que contarte una historia que haz escuchado en algún momento pero necesito agregarle detalles - el pareció confundido y me incline a besar una ultima lágrima rebelde que había quedado sobre sus labios- Louis, vas a escuchar una parte de mi historia -
El abrió sus ojos sorprendido, sentí sus manos presionar mis caderas y rápidamente las alejo apenado. Lo que había dicho lo había, realmente, tomado por sorpresa. Ellos 5 sabían que odiaba hablar de mi pasado.
Aprovechando su desconcierto, saque mis piernas de su anatomía y me dirijo hacia la cama, el toma mi mano al instante, me volteo y le sonrió quedamente. Ven conmigo. El se levanta y me ayuda a sentarme sobre la camilla de un solo salto,me iguala y quedamos de piernas cruzadas uno frente al otro. La luz que se colaba por la ventana ilumino su perfil, dejando una sombra que llegaba hasta sus ojos, juraría que podía ver el azul del fuego intenso en contraste con el cielo. Louis es perfecto.

-Tu sabes que no soy hija biológica de mi madre ¿verdad? - sabia que no tenia que preguntar, el lo sabia perfectamente pero como todos al decirlo inspiro con fuerza como si le costará asimilarlo y asintió - ¿y que mi padre me odia por eso? - El frunció el ceño, mientras asentía. El odiaba esa parte de la historia - Sabes esto, cada palabra que voy a decir, pero ahora es diferente...ahora tienes que escuchar - el tomo mi mano y fue cuando note que estaba temblando - Mi madre biológica, ella era una drogadicta por eso odio tanto cada sustancia toxica, no solo porque saca tu poder de decidir sino porque me recuerda todo; nunca supe si mi padre estaba enamorado o no de ella, algo de tiempo me dijo que nunca lo estuvo pero ese es sólo un pensamiento.
>>Calculo que ella era algo si como cualquier desastre del que sabes que una vez que te cruces en su camino no podrás liberarte y el, en ese tiempo, era lo mas cercano a un adolescente que buscaba demostrar que odia todo lo que le dieron sus padres y sacarlos de quicio, el odiaba la vida pero quería vivir, entonces no había nada mejor que estar con mi madre; ellos fueron novios un largo tiempo, lo se porque mi abuela alguna vez lo dijo al pasar, y no estaban atados a nada ni nadie hasta que un día... -  di una mirada hacia los ojos que me observaban atentamente y me vi, vi mi reflejo sonreír tristemente -... Un día se enteraron que yo estaba en camino, supongo que el mundo se les habrá venido abajo a los dos, realmente no lose, lo único que se de esos meses es que mi padre tuvo que vigilar a la persona que me dio la vida día y noche para que no consumiera, por ende ella me odio tanto a mi como a el - inspiré, porque era difícil para mi aunque esto fuera tan lejano - Se también que cuando ella dio a luz, estaba drogada y no por drogas medicas, ella había ingerido en un descuido de mi padre y nunca supieron si mi parto fue inducido o no, pero nací bien y para todos fue un alivio.
>>Los meses pasaron, y mi padre era joven solo con una bebe, porque claro la mujer que me dio la vida ya había desaparecido, y el necesitaba trabajar, armar un hogar y sobre todo formar una familia; entonces conoció a mi mamá, la que ustedes conocen hoy en día, y para el todo se hizo tan real, tan fácil porque así es el amor...necesitas todo y ahora, no hay tiempo que perder - me reí sin querer - pero había un problema, y ese era yo; ciertamente no lo era para mi madre porque ella, aunque era joven, sabia que el amor se multiplica y cuando amas a alguien lo tienes que aceptar con todas sus cargas y entonces si esa persona tiene un hijo también amas a ese hijo o si esa persona tiene un problema solucionas el problema -
-Tu nunca podrías ser un problema - soltó Louis de súbito.

La "Puta" Personal de One DirectionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora