"Chae, ya deja de ignorarme. Por lo menos dime qué fue lo que hice esta vez."
"Ok, esto comienza a ser molesto. Comprendo que eres una mujer de negocios, muy ocupada, pero por lo menos podrías dar señales de vida, ¿no te parece?"
"Chaewon, ¿podrías contestarme tan siquiera una vez? No me digas que has salido de tu ciudad, porque sé que no tiene nada programado hasta dentro de dos emanas, y además he visto las luces de tu pent house encendidas. Llámame."
"¿Sabes qué? Te puedes ir a la mierda. Tú y tu estúpida campaña publicitaria me la soplan. Renuncio."
"Lo último lo dije solo para molestarte. Quería ver si por lo menos así me hacías caso. Discúlpame, no era en serio. Pero de verdad, quiero hablar contigo. Dime qué hice mal. El brazo y la cabeza ya están bien, por cierto."
"Para escuchar de nuevo, presione..."
Jimin salió del buzón de voz, estupefacto.
-Pero, ¿Qué te pasa? ¿No podrías ser un poco más cruel con ella? Chae, sé que soy tu hermano y que debería estar de tu parte, pero te estás pasando.
-Lo sé.
- ¿Y por qué sigues haciéndolo? -preguntó exasperado.
-Porque me da miedo estar cerca de ella.
- ¿Y entonces por qué la buscaste, en primer lugar? ¡Toso estaba bien! Ella siguió con su vida, tú seguiste con la tuya... la mujer es perfecta, tiene una carrera prometedora, muchos millones y estuvo nominada a un Óscar. Y ahora tú le vas a dejar el corazón roto, igual que hace años.
-No me estás haciendo sentir mejor.
- ¡Y que bueno! ¡Tal vez así comiences a pensar un poco! No sé qué ve ella en ti para dejar que la trates de esa manera.
-Vaya. Gracias. -dije tratando de contener las lágrimas.
-Yo... lo siento. -se disculpó y su expresión se suavizó. -Eso no fue en serio... Chae, sé que no disfrutas haciendo sufrir a las personas, y por eso no me explico por qué te portas así con una mujer que claramente quiere estar contigo incluso si no es como tu pareja.
- ¿Crees que ella no espera nada de mi? -pregunté y me recosté en su regazo, como cuando éramos niños. Él me acarició el cabello y me tranquilicé.
Estábamos en su estudio. Jimin estaba en la ciudad para preparar una pasarela que tendría lugar en esas fechas, y me había invitado a cenar con él. Las cenas con Jimin consistían en comida para llevar de algún restaurante y pláticas interminables que duraban hasta la madrugada, mientras él seguía haciendo correcciones en su libro de diseños, o completaba algún boceto.
Sin embargo, en esta ocasión habíamos empezado hablando de lo usual, como la familia y el trabajo, y terminamos hablando de mi reencuentro con Olly. Decir que él estaba sorprendido, era poco. Jimin era el único que tenía cierta idea de lo que había pasado hacia años entre nosotras dos, y nunca pensó que volveríamos a conversar de ello. Yo siempre fui muy cerrada al respecto: debíamos actuar como si aquello nunca hubiese sucedido. Poco a poco, fui diciéndole en voz alta, cosas que ni siquiera yo había querido aceptar, y ahí estábamos: yo, sollozando y él, molesto con su insensible hermana.
-Una vez me preguntó por ti. -comentó de repente. Yo volteé a verlo. -Fue cuando estábamos por iniciar el Heaven 'n Hell Fashion Tour. Y otra más en el Candy Kingdom Sweet and Sour Runway.
El Heaven 'n Hell Fashion Tour era un touy de modas que se había celebrado unos seis años antes por parte de Discordia, la casa de modas de la que Jimin, en ese tiempo, era interno. Era un tour que recordaba muy bien, ya que Jimin no parecía muy cómo con la idea de que yo asistiera a la pasarela de clausura de la noche, y con mucha razón: al final del show, se presentó la nueva colección de su línea de lencería y el momento cúspide de la noche, fue cuando Hyeju salió usando un conjunto de lencería roja hecha de encaje y unas enormes alas de ángel caído. Mi hermano se la pasó disculpándose toda la noche, diciendo que no pudo decirme antes porque había firmado un contrato de confidencialidad. Yo me la pasé enojada los siguientes dos días y dejé de hablarle casi por cuatro meses, pero lo que más me molestaba era que no me podía sacarme de la cabeza, la imagen de Hyeju caracterizada como súcubo.
-Yo no sabía muy bien lo que había pasado entre ustedes dos, porque tú nunca quisiste decirme. -continuó. -Pero después de que ella me preguntara por ti, y juzgando por tu reacción al verla en la pasarela, supuse que... bueno.
Se encogió de hombros.
- ¿Fue tan obvio? Si tú lo notaste, entonces puede que alguien más también.
-Soy tu hermano. Yo lo sé todo. Pero sí... fuiste un poco obvia. Cuando la viste, pensé que te pondrías morada de tanto aguantar la respiración. -el siguió acomodándome el cabello. -Te haré una pregunta, y quiero que sea honesta.
Suspiré.
-Adelante.
- ¿Te gustaba?
-No pienso responder eso.
-creo que por lo menos eso me debes. -me reprochó él, pellizcándome suavemente una mejilla. - ¿Recuerdas cuando me la presentaste? Te dije que, si no tenías intenciones de corresponderle, fueras clara y no le dieras falsas señales. Y ahora estamos aquí. Más de diez años después, y sigues haciendo lo mismo.
-Sí.
- ¿Qué cosa?
-Me gustaba. -admití y escondí la cara. El calor en mis mejillas era insoportable.
-Siempre lo supe. -dijo él. - ¿Por qué no lo admitiste antes? Cuando estabas soltera, por ejemplo. Ahora también está Chris, y él no tiene la culpa de que seas una insensible. Tampoco Hyeju.
-Ya tenía suficientes preocupaciones pensando en cómo podía conseguir que me pusieran como la siguiente en la línea al trono de la compañía. -respondí después de golpearlo en el brazo. -No iba a complicarme más la existencia admitiendo que me gustaba una chica. Además, estaba segura de que era una fase.
-Si, una fase de una década.
- ¿De parte de quién estás? -protesté, pero él comenzó a hacerme cosquillas y me rendí.
- ¿Por qué no le dices que te gustas? -preguntó él como si eso zanjara el asunto.
-No me gusta.
- ¿Vas a seguir con eso?
-Es que no lo sé. Llevaba años sin convivir con ella y ahora... -luché por encontrar las palabras. -Es la imagen de Blockberry Creative, está ayudando a mejorar mi fama y la veo todos los días- Me gusta su compañía, pero no sé si me gusta estar con ella.
-No sé por qué te preocupas tanto. -se encogió de hombros. -Ya tienes a Blockberry Creative.
- ¿Conoces algún CEO homosexual?
- ¿Con quién crees que hablas? -me preguntó Jimin, ofendido. -Desconozco quién dirige qué. Mucho menos voy a saber acerca de vida privada.
-No hay ninguno.
-Que tú sepas. Y además, ¿qué van a ver? ¿Quitarte Blockberry Creative? -resopló. -Creo que le debes una disculpa a Hyeju. Se preocupa por ti y tú estás aquí, ignorándola.
-Está bien. -admití. Tenía razón. Me estaba pasando de la raya.
-Si le das un beso, podría perdonarte.
-Eso no pasará.
-Won.
- ¿Mmm?
-Sé que aún no tienes muy clara tu postura frente a Hyeju, pero... tienes una segunda oportunidad. No la desperdicies.
No respondí. Solo meabracé a él. No quería pensar.

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Cherry Popper | Hyewon
General Fiction[AU] Park Chaewon es la presidenta de Blockberry Creative, una importante cadena comercial de golosinas, quien hace declaraciones homófobas en estado de ebriedad. Cuando esto afecta la imagen de su compañía, ¿qué desesperada acción puede cometer ell...