Luna de miel (II)

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Era un día lluvioso, Erica fue la primera en despertar y sonrió tan feliz de ver a su esposa durmiendo junto a ella. Beso su espalda delicadamente.

Callie: -Mmm... que rico despertar así. -aún no abría los ojos.
Erica: -Buen día esposa mia. -acaricio su cabello.
Callie: -Buen día mi amor, que lindo oírte decirlo. -sonrió.
Erica: -¿Tienes hambre?
Callie: -Mucha. -volteó en la cama y la miro. -¿Hacemos desayuno?
Erica: -¿Quieres ayudarme? Puedo preparartelo y traerlo aquí.
Callie: -Quiero ayudarte. -se acercó a besarla. -Que linda estas. -sonrió.
Erica: -No más que tú cariño. -Juntas se pusieron de pie y se colocaron sus batas.

Bajaron y caminaron a la cocina.

Callie: -¿Qué quiere desayunar mi esposa?
Erica: -Am huevos, fruta, tostadas, café y jugo.
Callie: -Si tienes hambre eh. -rió.
Erica: -Debo recuperar energías. -sonrió.
Callie: -¿Si? ¿Para qué? Afuera parece que va a caerse el cielo lloviendo.
Erica: -Para atender a mi mujer como se merece. -la tomo de la cintura.
Callie: -Me encanta. -se colgó de su cuello y la beso. -Sabes tan bien. -la beso nuevamente.
Erica poso sus manos tocando su trasero y la apreto hacía ella.
Callie: -Me excitas con el minimo contacto. -respiro agitada.
Erica: -Lo mismo provocas en mi. -metio sus manos bajo su bata y acaricio su piel desnuda.
Callie: -Podría hacer el amor contigo siempre.
Erica: -Podemos hacerlo siempre. ¿Qué te detiene? -sonrió.
Callie: -El ruido de tu estómago. -rió.
Erica: -Lo siento, si tengo hambre. -sonrió.
Callie: -Entonces hagamos el desayuno y vamos a la cama. -la beso y se alejo de ella.
Erica: -Ok, como diga mi esposa.

Juntas hicieron el desayuno y llenaron su charola, entonces decidieron ir a la habitación, colocaron todo sobre la cama y se sentaron a disfrutar su comida.

Callie: -¿Qué te pareció la fiesta? -comía fruta.
Erica: -Magica, me encanto, todo fue perfecto y sin problemas.
Callie: -¿Temías que no fuera así?
Erica: -Ah decir verdad me preocupaba que mi hermana apareciera allí.
Callie: -Lo sé, también lo pense por un momento pero no paso y todo fue maravilloso. -sonrió.
Erica: -Nuestras madres se lucieron con la fiesta, los arreglos, todo.
Callie: -Les debemos un presente, que no se te olvide.
Erica: -Claro que no, regresando pensaremos que comprarles. Oye, que guardadito se lo tenían con Mark eh.
Callie: -Perdón que no te dijimos nada, él quería que realmente fuera una sorpresa. Y creo que lo logró. -sonrió.
Erica: -Si que lo fue. Me alegro que haya sido en nuestra boda, fue muy original lo de tu ramo.
Callie: -Gracias, soy buena para las sorpresas. -sonrió divertida.
Erica: -Así parece. Es increible que al llegar lo haremos a nuestra casa.
Callie: -Si, mi mamá se ocuparía de llevar todo lo mio del departamento.
Erica: -Y la mia de lo mio. -sonrió.
Callie: -Tenemos mucho por hacer al regresar.
Erica: -Ajá... pero mientras tanto disfrutemos de nuestra luna de miel. -corrió la charola y se acercó a ella.
Callie: -¿Tienes ideas para que eso pase?
Erica: -Muchas. -la beso succionando su labio.

Callie se recostó y Erica quedo encima de ella. Deshizo el nudo de su bata y corrió la tela que cubría sus senos.

Erica: -Me encantan. -tomo uno y paso su lengua delicadamente erizando la piel de la pelinegra.

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