Intentando salir

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*Una semana después*

Erica debía regresar al trabajo sin embargo no se sentía cómoda dejando a Callie sola en la casa, ella aún intentaba sobrellevar la pérdida de Dan.

Erica: -Mi amor, debes comer algo, esta mañana apenas probaste el desayuno.
Callie: -No tengo hambre pero come tú, debes estar bien para el bebé.
Erica: -Necesito que tu también lo estés, deja la cama.
Callie: -Me siento mejor aquí.
Erica: -Entiendo cuanto todo esto te duele pero no puedes seguir así, hazlo por nosotros, yo se que Dan no querría esto.
Callie: -Tal vez mañana.
Erica: -Eso dijiste ayer, por favor.
Callie: -Asesinaron a mi amigo Erica. Solo... necesito tiempo para asimilarlo. 

Erica entendió, bajo a dejar la charola y llamaron a la puerta.

Erica: -Carlos... que gusto verte. -lo saludo.
Carlos: -Hola Erica, ¿quería saber como estaba mi princesa?
Erica: -Esta en el cuarto, no logré que comiera. ¿Me ayudas?
Carlos: -Claro que si. Ve tranquila a donde tengas que ir, que mi chófer te lleve, no es conveniente que manejes.
Erica: -Esta bien, muchas gracias. Le avisaré a Callie que estas aquí.
Carlos: -Yo subiré, tranquila. Ve, ve cualquier cosa yo te llamo.
Erica: -Esta bien, gracias. -se despidió y salio.

Carlos subió las escaleras, Callie estaba recostada, parecía que estaba pensando.

Carlos: -Hola hija.
Callie: -¿Papi? ¿Qué haces aquí?
Carlos: -Este viejo creyó que sería mejor venir a ver su hija. ¿Cómo has estado?
Callie: -Cómo puedo. -volvió a la cama.
Carlos: -Comprendo. ¿Puedo?
Callie: -Si. -Se recostó junto a ella y la trajo a su pecho.
Carlos: -Tienes una hija, una esposa y un bebé en camino. ¿Qué piensas hacer?
Callie: -¿A que te refieres?
Carlos: -A que yo entiendo que tienes que hacer tu duelo, llorar a tu amigo, lo que paso no fue un simple accidente pero contéstame con la verdad. ¿Crees que Dan estaría de acuerdo con lo que estás haciendo?
Callie: -No lo sé... tal vez no pero...
Carlos: -Esta bien que lo llores, que lo extrañes.. lo haras siempre porque siempre habrá algo que te lo recuerde, pero si hay algo que él te enseñó es a no rendirse, cuando perdió su pierna tu se la devolviste de alguna manera, regreso a su trabajo, le devolviste las ganas de vivir. Él no lo habría logrado sin ti.
Callie: -Esas fueron sus palabras. -limpio sus lágrimas.
Carlos: -¿Entonces mi amor? Levántate de esta cama, vive para mantener vivo su recuerdo. Disfruta a tu hija, a tu esposa embarazada. O ¿vas a decirme que esa rubia de ojos celestes no se ve hermosa con su barriguita?
Callie: -sonrió levemente. -Claro que si, se ve radiante.
Erica: -Ella te necesita, mi amor lucharon mucho para tener todo lo que hoy tienen, pasaron por demasiadas cosas para ser mamás. Disfruta esta etapa. -beso su frente.
Callie: -Tienes razón papá. Mi esposa y mis hijos me necesitan.
Carlos: -Eso, así se habla mi amor. Todo sanara. Es cuestión de tiempo.
Callie: -Es cuestión de tiempo.
Carlos: -Tengo hambre. ¿Tú no?
Carlos: -Mucha. -sonrió.
Carlos: -Entonces ire a calentar la comida que dejo tu mujer.
Callie: -¿Se fue?
Carlos: -Debía ir al hospital pero dijo que regresaría más tarde.
Callie: -Esta bien, bajemos juntos y almorzamos en el jardín. ¿Y mi mamá?
Carlos: -Ya sabes, anda con lo del baby shower, anoche vino pero ya dormías.
Callie: -Erica debe agendar con Herman, con todo lo que paso no tuvo su revisión.
Carlos: -Bueno mañana que regresen juntas lo hacen.
Callie: -Gracias papi. -se abrazo a él.
Carlos: -Te amo mi bebé.
Callie: -Papá... -rió. Música para los oídos de su padre.
Carlos: -Siempre lo seras, sshhh. -sonrió besando su frente.

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