SALVADA

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Después de un rato Cristal encerrada en su cuarto, Ana empezó a gritar como loca, golpeaba la puerta y le gritaba que se fuera de la casa, sus insultos eran cada vez más groseros, la acusaba de querer robarle a su novio, la maldecía y insultaba como nunca lo ha hecho, o le está haciendo efecto el alcohol o le está haciendo daño la droga que se mete pensó Cristal sentada en su cama.

Cansada ya de escucharla gritar, Cristal tomó su mochila y puso en ella algunas ropas, papeles y fotos, lo que consideró como más importante, también tomó todo su dinero, lo metió dentro de un libro y lo puso dentro de la mochila, se quedó con algo de menudo en el bolsillo delantero del pantalón, se limpió las lágrimas y se puso los lentes, abrió la puerta prepara para enfrentar a Ana pero está estába en el mueble casi dormida, por un momento pensó en volver a su cuarto cuando la vio, pero de la habitación de Ana venía ese hombre caminando casi callendo al piso y chocando con todo lo que le estorba en el medio, va detrás de ella, Cristal solo puede correr hasta la puerta con su mochila encima, es la única salida que le queda cerca, después de correr fue directo a la casa de Carol, pero recordó que está en el hospital con su mamá porque su abuelo está muy enfermo, también recordó que Dora y Nancy se fueron con ellas, estaba sola, sin saber a dónde ir, miró hacia atrás y vio al hombre parado en la puerta llamándola, pero ella empezó a correr nuevamente alejándose de allí, cuando dobló la esquina donde se encontró con la cancha, no supo que camino coger, a su izquierda está el camino que la lleva a la escuela pero allí no hay nadie ahora que la pueda ayudar, a la derecha están las tiendas y los puntos de drogas, también están las barras donde se mete Ana y si la ven por ahí es posible que se lo digan o peor aún que el tipo este la encuentre, además, no tiene a nadie por esos lados, frente a ella al lado de la cancha hay un callejón, se ve oscuro y es muy largo pero lleva directo a la avenida donde hay un hotel que ella se puede pagar una noche y hay carros de comida en la calle, decidió irse por ahí ya que es un solo camino y si camina rápido puede atravesarlo.

Cristal se ajusto bien los tenis y su mochila y camino decidida por el callejón, a toda prisa iba ella, después de varios minutos, casi en la salida hay un vagón de basura, y allí al lado hay dos tipos tirados como perros borrachos, uno de ellos se le pone en frente y el otro se pone a sus espaldas, intentan quitarle su mochila pero ella se defiende y le da una patada a uno de ellos, luego el otro la sujeta por el pelo y le hala su cabeza hacia atrás mientras que el otro se pone de pie y vuelve para encima de ella con su bajo a alcohol que la hizo voltear la cara, en ese momento además de que estaba oscuro alcanzo a ver a tres chicos que cruzaban por el frente del callejón en una dirección, entonces empezó a gritar por ayuda pero los chicos siguieron.

Ailyn que iba con sus amigos logró escuchar en grito de ayuda proveniente de ese callejón, se detuvo mientras que sus amigos caminaban sin darse cuenta de su ausencia, cuando volvió a escuchar otro grito dió tres pasos de espalda para atrás para mirar por la boca del callejón, entonces vio como dos tipos tenían a una pobre chica sujetada, doblandole su brazo y halandole el pelo haciéndola gritar, Ailyn se enfureció y caminó con grandes pasos, con la capucha de su abrigo puesta en su cabeza, remangando sus mangas y con su puño encendido llegó a golpear a estos tipos que solo buscan molestar y abusar de chicas, como sabe pelear muy bien se le hizo fácil dejarlos tirados en el suelo gritando de dolor, la mochila de Cristal estaba tirada por un lado, Ailyn la recogió y se la entregó como su salvadora que es.

Ailyn se dió media vuelta y camino hasta la salida, Cristal se apresuró, tomó su mochila y camino silenciosamente detrás de ella, los amigos de Ailyn llegaron a la entrada justo a tiempo para ver todo el show, Ailyn y Cristal estuvieron cara a cara pero no pudieron ver su parecido por la oscuridad, los lentes y el pelo rizado de Cristal no ayudan mucho, como tampoco ayuda la capucha y la ropa varonil que usa Ailyn.
Al salir del callejón Ailyn se une a caminar con sus amigos olvidándose de la chica a la que acaba de salvar, camino disfrutando de lo poco que ve y la tranquilidad en medio de la noche, venía de ver una pelicula y pelear con estos tipos le dió hambre.
—Alli está, mira, es el carro de comida que probamos ayer y que nos gustó, ¿Por eso volvimos, no?   —dijo Rachell caminando más rápido, Ailyn la siguió pero se detuvo al sentir que Jesús hablaba su abrigo, cuando mira atrás vio a aquella chica que aún los seguía en silencio, parecía como un perrito asustado y perdido, así que se devolvió y le habló.
—No tienes que seguirnos, ya puedes irte.  —Cristal se paró y miro a la derecha y a la izquierda y después los miro a ellos, lo que les dio a entender que no tiene a dónde ir.
—¿Podemos llevarla con nosotros? Parece sola.  —habló Jesús.
—Oigan, ¿No tienen hambre? apresurense, ya pedí mi papaloca, ¿Ustedes que van a querer? —se escucho a Rachell hablar un poco a la distancia.

Ailyn caminó hacia Cristal, se le paró en frente.
—¿Tienes hambre?
—Si.
—¿Tienes dinero?
—Si.
—Bien, tú pagas la cena.  —Ailyn echó su brazo sobre el cuello de Cristal, dándole en forma de abrazo y la arrastró a unirse a ellos, en medio de la oscura noche compraron sus cena y se fueron a la casa de Ailyn llevando a Cristal con ellos, después de llegar a casa, Ailyn se fue a su habitación, ya que mañana se irá a la pelea quiere descansar, ha pensado como sus amigos no están de acuerdo, quiere dejarlos en casa y irse sola sin que se enteren, ya lo tiene decidido se ira desde el amanecer, así será mejor porque si ven a uno de sus amigos la encontrarán a ella.
Rachell al igual que Ailyn se fue a su habitación, Jesús le indico a Cristal donde había una habitación para ella y cada uno se encerraron en sus propias habitaciones.

°•TRES SEPARADAS AL NACER•°    Donde viven las historias. Descúbrelo ahora