25: Viernes

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—Martha— dice John. —Al final hablé ayer con él. ¿Te puedes creer que tiene diecinueve?— Pregunta casi indignado.

—¿Qué?— Pregunta pensando que ha escuchado mal. —No es cierto, ¿no?

—Te lo prometo— dice mientras ambos caminan. —Yo tampoco me lo creía... Y ha escrito un libro y ha estudiado en Alemania...

—Madre mía, que calladito se lo tenía Charlotte— dice Martha. —Bueno, entonces, ¿qué haces que no le sigues más el rollo? ¿No era la edad lo que te preocupaba?

—Oye, que sigue siendo nuestro profesor— recuerda John y Martha asiente.

—¡Hola!— Grita Charlotte acercándose.

—Hey, que bueno verte— dice John. —Te ves mucho mejor.

—La verdad es que sí— recalca Martha. —¿Hoy dónde salimos?

—¿Quieres salir?— Pregunta Martha y la chica asiente.

—Tal vez también se viene mi hermano— asegura la chica. —Tengo que sacarlo más amenudo o va a terminar sin la poca vida social que tiene. No es ningún problema, ¿no?

—Qué va a ser un problema dice Martha. Si con lo que hablaron esos dos ayer— dice Martha mirando a John que desvía la mirada.

—Oh, eso no me lo había contado mi hermano— afirma Charlotte. —Se lo tienen bien guardadito— bromea la suiza dándole un golpecito a John que rueda los ojos.

—Sólo son conversaciones de conocidos— asegura tranquilo.

El resto del día hacen tiempo. Hablan con Anne, Elizabeth y Ludwika, pasean, salen a por café... Al final solo se animan los hermanos, Martha y John a salir.

—Papa t'a déjà appelé ? Et maman ? Philippe aussi, non ? Je sais qu'ils veulent que tu passes un bon anniversaire— dice Louis. Así hermana mientras caminan hacia el lugar.

—Oui, ils m'ont appelé. Papa dit que quelque chose m'a été envoyé et qu'il sera bientôt là. 

—¿Es hoy tu cumpleaños?— Pregunta Martha según lo que entiende se la conversación y Charlotte asiente. —¡Mujer, eso se avisa y te traemos un pastel!

La noche pasa despacio y tranquila, bastante relajada. Las chicas prefieren bailar y los otros dos casi que pasan toda la noche sentados hablando. —Voy un rato fuera— dice Louis tomando la chaqueta. Ya está un poco harto de esa música, pero es el cumpleaños de su hermana y se ha encargado de consentirla todo el día. Después de salir con sus amigas, han ido juntos al centro comercial y eso ha puesto feliz a la joven.

Hace un poco de frío, incluso siente la punta de su nariz algo helada. Tiene ganas de ver nieve. La echa de menos. Seguro sería muy divertido tener nieve. Apaga el cigarrillo, le apetece más tener las manos en los bolsillos y taparse con el cuello del jersey. Ese frío se siente familiar, aunque no es comparable con el de los Alpes.

Al final vuelve a entrar, tampoco quiere resfriarse. Se pide algo para bebe y se vuelve a sentar donde estaba. —Hace un poco de frío fuera— asegura dándole un trago a su bebida y dejándola sobre la mesa.

—Sí, se nota que no tardará en llegar el invierno.

—Bueno, es la mejor estación del año— asegura con una sonrisa. —Esquí, nieve, hogueras, spitzbuben,  vacherin, kougelhopf, licores, chocolate caliente, raclette, ternera en la fondue...

—Eso suena bien y no tengo idea de lo que es, pero prefiero la primavera. Hay más flores— asegura John.

—Alergia, avispas, mosquitos, calor... No sé qué tan apetecible suena.

175 Días | Nueva edición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora