175 Días | Nueva edición

113: Miércoles

-Me ha encantado estar en América contigo- dice Louis deshaciendo el equipaje. Tengo que pensar lo de las ofertas de trabajo.

-Por supuesto. Decide lo que te haga feliz- asegura John mirando a Louis con una sonrisa.

-Tengo algo para ti- dice rebuscando en su bolsillo y John mira atentamente.

-¿Qué es?

-Una promesa- dice sacando un anillo y poniéndolo en unos de los dedos de John.

-Es precioso- dice mirando la joya.

-Sé que no te gusta llevar dorado así que elegí oro blanco con serendibita y ópalo.

-Oh, es hermoso, muchas gracias- dice abrazando al mayor..

-Solo quería recordarte que mi amor es incondicional y que quiero ser lo mejor para ti- asegura Louis. -Somos un buen equipo

-Te quiero tanto- dice contento sin soltar a su novio. -Debe haberte costado muchísimo dinero.

-Vales todo el dinero del mundo- asegura acariciando su mejilla y empieza a besar sus labios de la manera más dulce posible - y por ti daría todo lo que tengo, Jack.

-No sé cómo agradecerte, eres todo lo que siempre soñé- afirma John feliz por tener a ese hombre tan maravilloso a su lado. El mundo debe tener celos. -Vamos a ser tan felices juntos...- dice John de manera soñadora. -Tendremos una casa acogedora, nos casaremos, tendremos mascotas y... de pronto una familia feliz.

-Quiero que eso ocurra. No sabes cuan feliz me haría. Te cocinaré comidas deliciosas cada día.

-Yo lo he pensado. No me importa donde decidas quedarte el año que viene, voy a ir contigo siempre que me lo permitas- dice John con una sonrisa. -Se lo dije a mis padres, no quiero perderte.

-Te prometo que buscaré la mejor opción y tendremos todo lo que siempre hemos querido

-Suena muy apresurado, pero... ¿qué te gustaría en el futuro? Dentro de diez o quince años tal vez- Pregunta John. Es algo que nunca han hablado y cree que es necesario saber si comparten planes a futuro.

-Me gustaría vivir en una casa en el campo, con hermosos jardines donde los niños puedan correr y jugar. Me encantaría tener o adoptar hijos, pero es complicado.

-¿Cuántos?

-No sé, solo quiero tener dinero para que vivan muy bien y que nunca deban preocuparse. Toda mi vida he querido ser padre. Me gustaría mucho.

-Serías un padre hermoso. Yo te visualizo perfectamente.

-¿Y tú? ¿Qué quieres para tu vida?

-Me gustaría aprender a estar en paz conmigo mismo, casarme, la casa no me importa tanto, tener mérito propio, una pareja e hijos. ¿No sería bonito?

-Claro que sí, ¿te gustaría salir a pasear esta tarde?- Pregunta el mayor con entusiasmo y John asiente. -¿Algún lugar concreto?

-El lugar me da igual, lo que importa es la compañía- asegura John acariciando algunos de los mechones de pelo del mayor. -¿Por qué cada día eres más guapo?

-Porque soy como el vino, Jack- bromea Louis. -No, bueno, será porque eres mi estilista.

-No puedo evitarlo. Tienes un gran potencial que no hay que desaprovechar. Solo tienes que darte cuenta, todos piensan que eres bonito- afirma John sentándose en la cama y haciendo que el mayor se siente con él. -Por algo debe ser.

-Sí, sé que no estoy mal.

-Estás genial, venga ya. Siempre te tengo que decir lo mismo.

-Pues no me lo digas- dice quitándose los zapatos.