175 Días | Nueva edición

145: Martes

John ya se ha despertado. Ha sido una noche maravillosa. Ni siquiera recuerda haber soñado nada. Aún están bien abrazados, de hecho, debería apartarse para no aplastar al mayor.

Louis está tranquilamente dormido aún. Incluso la almohada le parece hoy más cómoda de lo normal. -Buenos días- dice John empezando a acariciar la espalda del mayor que abre los ojos despacio por la molestia de la luz. De hecho tiene un poco de dolor de cabeza. ¿Por qué si ha dormido tan bien?

-Hola...- murmura estirándose. Cuando están juntos se olvidan de las preocupaciones.

-Son las ocho- afirma John dándole un beso. -Hay que ir levantándose.

-Tienes muchas ganas de madrugar...- Murmura el mayor.

-Tengo ganas de pasar mi día contigo- corrige John.

-Podemos quedarnos aquí un ratito más- dice somnoliento.

-¿Durmiendo? Con la de cosas que podemos hacer- murmura John y su novio le mira de reojo y pasa sus manos por la cintura de su novio.

-La verdad es que llevo un par de noches durmiendo mal...- murmura Louis sentándose en la cama.

-¿Y eso? ¿Me echabas de menos?- Bromea el rubio apoyando la espalda en el cabecero de la cama.

-Digamos que sí- responde el suizo. -Pensando estaba- contesta y cambia de tema. -Victor me dijo que vendría pronto com Thomas. Nos harán una visita.

-¿Los viste en Ginebra?- Pregunta John y Louis asiente.

-Estuve con ellos el fin de semana entero.

-¿Y eso?

Louis suspira y mira al techo. -Tuve una pelea con mi padre- murmura mirando sus manos. No ha vuelto a llamarle desde hace días. -Está... molesto conmigo o avergonzado, no lo sé...

-Lo lamento- dice viendo la delicada cara de decepción del mayor.

-Él cree que si no fuese gay esto no me hubiese pasado...- murmura Louis. Tal vez su padre tiene razón. Físicamente es más grande que la mayoría de las chicas y tal vez podría defenderse mejor. Contra John no tiene mucho que hacer, menos ahora que entrena y además es evidentemente más alto. Él nunca ha tenido mucha fuerza, su padre tiene razón es muy delicado.

-Si no lo fueses no serías tú- afirma John. -Yo estoy orgulloso de ti.

-Gracias, Jack- dice Louis tomando la mano del chico. -Mi padre es a veces algo antiguo... Ya ves que no es el más indicado para hablar.

-Lo sé, no se lo tomaré en cuenta- dice John. -El desorientado no puede guiar.

***

Louis ha tenido hoy un par de clases y John le ya acompañado. Se ha sentado por el final para escuchar a su novio hablar y de paso avanzar algo en las tareas. Va realmente atrasado.

Nota cierta tensión en el ambiente. Casi nadie participa en clase, pero igual a él se le hace entretenida.

Después de la clase, que ha durado dos horas, John se dirige hacia Louis, pues ya es hora de irse a dar sus clases de biología.

-Mucha suerte, cariño- dice Louis dándole un beso en la mejilla.

Comparando este día con la semana pasada, ha sido una maravilla. Sin duda con John allí nada le importa tanto. De hecho sonríe como un bobo cuando lo ve marchar.

-Señor Végobre- dice una voz grave que en un principio no reconoce. Es el señor Müller, uno de los directores. Es extraño, no suele salir de su despacho. Louis jura que vive ahí.

-Oh... Buenos días- dice algo extrañado. -¿Le puedo ayudar en algo?

-Sí, si no le importa, acompáñeme al despacho- dice el hombre y Louis, algo dudoso le acompaña.

En verdad ya sabe sobre qué tema van a hablar. No sabe si estará listo para esto.

-He escuchado lo que andan diciendo- empieza el hombre cuando entran y se acomodan en el despacho. -Respecto eso, hemos de tomar una decisión e investigar que está sucediendo. Dígame, explíqueme usted que está sucediendo.

-Nada, en lo absoluto. Solo son rumores, señor- afirma Louis bastante tranquilo. Sabe que no ha hecho nada malo.

-¿Usted frecuenta por la planta del alumnado?

-De vez en cuando, para ver a mi hermana- explica. Puede ser que alguna vez haya ido hasta la habitación de John pero han sido casos puntuales.

-¿Qué hay del chico que siempre le acompaña?- Pregunta Müller mirando al profesor.

-Es... Mi novio- dice con sinceridad. Será mejor no ocultar nada. -Empezamos a hablar porque es amigo de mi hermana- afirma pensando en John. Tal cual fue por eso.

-¿Y el resto de alumnos? ¿Algo en especial?-Louis en un principio niega, pero después, la mirada del hombre le ve de manera amenazante. Tal vez no está convencido. -¿Nada?- Vuelve a preguntar. -¿No me hablará usted de Hale?

-Oh, no... Nathan- murmura para él mismo.

-Hemos recibido una queja de sus padres- afirma Müller. -Usted, señor, dicen que influencia a su hijo. Ese niño - que es lo que aún Nathan es -siente mucha admiración por usted.

-¿Le he influenciado incorrectamente?- Pregunta Louis confuso y el hombre levanta los hombros.

-Usted debería saber que le ha enseñado. Es su profesor.

-¿Qué más han dicho sus padres?- Pregunta cabizbajo.

-No puedo decirle.

-Quiero saber que han dicho de mí- afirma el hombre y al final consigue estirar de la lengua a Müller. -Yo no lo incito a tales cosas. Él es así- afirma tranquilo. Sus padres solo son unos homofóbicos y buscan excusar el comportamiento "gay" de su hijo.

-Está bien escuchar su versión, pero esto coincide con lo que dicen unos alumnos suyos y...

-¿Quién dice eso?- Pregunta ofendido.

-No puedo decirle. No le estoy diciendo que usted sea todo eso... Hablaremos con todo el mundo y tomaremos una decisión, prudente, ¿sí? Ahora, vaya a descansar- dice el director echándolo y Louis suspira al salir del lugar.

En silencio camina hacia su habitación. Este tema le está quitando el sueño y las ganas de comer.

-Louis, venía a buscarte- dice John con una sonrisa hasta que ve la cara de su novio. -¿Qué sucede?

-Me ha llamado el director y no están muy contentos.

-Lo sé...- murmura John.

-¿Sabes todo lo que ha pasado?- Pregunta Louis y John asiente
-Me ha dicho que los padres de Nathan dicen que "lo incito a hacer actos homosexuales" y encima con lo que andan diciendo de mí... Estoy muy angustiado con esto.

-No te angusties, pronto pasará.