Extra: V3

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—¿Qué haces?— Pregunta Louis viendo a Harry con unos papeles en la mesa y algo enfadado.

—El cuaderno de vacaciones — dice con desagrado. —Soy mayor para esto.

—Está bien estudiar un poco en vacaciones— dice Louis.

—Pero no se me da bien— murmura enfadado. —Odio todo esto. ¿Por qué aquí hay un vector?— Pregunta señalando dramáticamente. —¿Cómo voy a sacar esto?

—¿Me dejas ver?— Pregunta acercándose con delicadeza. —Eso es el eje x, ponle el vector i. ¿Te acuerdas cual era el eje x?

—Vector j— contesta mirando el dibujito.

—¿Y qué es esa forma?— Pregunta señalando en el dibujo.

—Un triángulo.

—¿Un triángulo que?

—Rectángulo— murmura el joven escribiendo un par de cosas en la hoja. —¿Y ahora que?

—Pitágoras y ya tienes el módulo.

—Ah, pues no era tan difícil.

—¿Ves?

***

—Sí, mamá. Louis ne ha ayudado y me ha explicado lo que no entendía— dice Harry y la mujer sonríe.

—Te había dicho que ibas funcionar— asegura Henry. —¿Donde están?— Pregunta algo extrañado. Es ya muy tarde como para estar fuera.

—Estaban pasenado. John me había mandado un mensaje de que iban a llegar pronto— dice Eleanor.

—¿Queréis que vaya a ver?— Pregunta Harry levantándose. Ya sabe la respuesta de sus padres.

Se pone las botas y el abrigo y se dirige a la puerta. Camina un poco y se acerca al pequeño caminito que hay por en mitad de los árboles. —Qué asco dais— doce Harry interrumpiendo un buen momento. —Es hora de cenar— dice volviendo a la casa y ambos chicos se miran un poco avergonzados.

—Están fuera. Ahora entrarán. Se estaban comiendo la boca y morreandose— dice Harry sentándose de nuevo.

—Ese vocabulario— regaña su madre.

—¿Qué quieres que diga?— Pregunta el jovenzuelo levantando una ceja.

—Recorta información. Nos apañabamos con un "ahora entran"— dice Eleanor. —El resto es asunto de ellos.

—¿No tienes curiosidad por lo que hace tu hijo con el novio?— Pregunta Harry.

—¿Qué van a hacer? Embarazarse no van a embarazarse— dice Eleanor.

***

Louis está trabajando de nuevo en la noche y Henry también. Son hombres bastante ocupados, así que Eleanor habla con John en el sillón. Por fin tienen un rato más adulto para hablar.

—Es muy atento conmigo. Me escribe notas, me trae flores...— dice el rubio contento y con una sonrisa. —Y nos veíamos todas las noches en el mismo sitio, incluso me ha llevado a ver las estrellas. ¿No es romántico?

—Sí, Jack. Me alegro mucho de verte tan feliz— asegura la mujer. —Espero que estéis juntos mucho tiempo.

—Yo también, pero a veces me preocupo por él y dice que es demasiado. No quiero atosigar— intenta explicar.

—Es normal preocuparse— dice poniéndole bien el cuello del jersey a John.

—Lo sé, pero a veces no debo ponerme tan nervioso— murmura recordando un par de cosas. —No tiene por qué pasarle a él algo, ¿no?

175 Días | Nueva edición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora