68: Lunes

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—¡Madre mía!— Grita John tirándose a la cama de Martha. —¿Por qué la gente es así?— Pregunta viendo la noticia que Martha le enseña. —Sabía que me habían hecho alguna foto seguro.

¿A caso ahora no puede tener un fin de semana tranquilo con su pareja? No. Tiene que salir una noticia de que tiene nuevo novio por una foto que le han tomado cuando estaban desprevenidos. Le sabe peor por Louis que por él, aunque le preocupa que vayan a pensar. Tal vez creen que no ha estado suficiente tiempo guardando luto a su novio muerto. Qué cruel suena decirlo así, pero tiene dieciocho años, no puede encerrarse ocho años a llorar vestido de negro.

—Al menos salís guapos— dice Charlotte. —Peor hubiese sido si fuese la típica foto de discoteca. Ahí con la nieve y todo está cuqui.

—De todos modos es terrible pero no venía a hablaros de eso— asegura John. —Quería que me ayudeís. François va a venir y...

—Joder— dice Martha. —Vaya pesado, coño.

—Louis dice que no está enfadado con él, pero yo no quiero que estén juntos aunque suene muy tóxico. No quiere contarme absolutamente nada sobre ese tipo y no hay manera de convencerle de que no es bueno hablar con ese.

—Mi hermano es un tonto a veces— asegura Charlotte. —Pensaba que la pelea que tuvieron en Ginebra fue suficiente.

—Joder, que le meta una denuncia y ya— dice Martha.

—Es que no quiere— responde Charlotte. —A veces es tonto.

—Creo que más bien no se da cuenta que eso no es normal y antes de hacerme alguna paranoia y demonizar a François quiero asegurarme que es una mala persona— asegura John. —No sé si eso es algo muy sano pero estoy harto. Cada vez que sale el tema no deja de justificarlo y decirme que estoy equivocado con mi crítica.

—Se supone que son mejores amigos, ¿no?— Pregunta Martha algo confusa.

—Sí, yo creo que es por eso y que le tiene cariño. No tengo ni idea— dice Charlotte. —Nunca me ha contado lo que pasaba con François.

—Tu hermano dice que ese tenía problemas de ira— dice John. —Hay que encontrar algo contundente.

—Él otro día de casualidad miramos el teléfono y François es súper tóxico y manda un montón de cosas— asegura Martha. —Ahí tal vez encontramos algo.

—En el ordenador— dice Charlotte. —¿Qué tiene mi hermano ahora?— Pregunta y John mira la hora.

—Clase y una tutoría— contesta el rubio.

—Vamos— dice Charlotte levantándose.

—¿Estáis seguras?— Pregunta John. —¿No es invadir su privacidad?

—Es mi hermano, no. ¿Prefieres quedarte con las dudas en el aire?— Pregunta la suiza y al final todos la siguen hasta la habitación de Louis. —Aquí hay más cosas tuyas que suyas, eh— dice Charlotte buscando el portátil. —¿Se lo habrá llevado?

—No, está aquí— dice sacando un cajón oculto y saca el ordenador y el teléfono. Louis nunca lo lleva encima, o casi nunca.

—Yo miro el ordenador— dice Charlotte y John y Martha se encargan del teléfono. Solo mirarán lo necesario, lo que tenga que ver con François. Tal vez no es la decisión más correcta.

Se van hasta algunos mensajes antiguos y la verdad es que no difieren tanto de la actualidad. —¿Cuántos años tiene esta foto?

—No lo sé... Cinco al menos— dice John viendo a su novio. Era bastante pequeño, se notaba considerablemente la diferencia de altura entre François y él. Digamos que Louis creció más tarde.

—¿A ver?— Pregunta Charlotte asomándose. —Catorce o quince.

Al menos ahí parecían un poco felices, aunque Louis tiene una mirada algo preocupada. Sin duda él parece más feliz con John.

—Madre mía, que tóxico— dice Martha leyendo un par de mensajes. —Es un red flag andante. A mí me dice eso un tío y lo dejo.

—Era la única persona con la que Louis se hablaba. No le pidas más— dice Charlotte buscando en el ordenador. ¡Hay la época del Telegram y el Messenger! Ahí si que hay salseo.

—Nada, solo fotos y mensajes— dice John. —La mayoría son llamadas— o rogándole a Louis que hable con él, que le perdone y que no se volverá a repetir. —No tenemos nada con contexto, pero parece que han tenido peleas de este nivel varias veces.

—Eso veo. Nunca me había dicho que se peleaban tan fuerte, las cataloga como discusiones normales de pareja— asegura Charlotte.

—¿Encuentras algo?— Dice John con curiosidad.

—Sí, pero es mejor que no lo veas— asegura cerrando el portátil. La cosa es peor de lo que pensaba.

—¿Por qué?— Pregunta Martha mirando la reacción de la otra chica. —¿Es grave?

Ante la pregunta Charlotte solo le hace una cara de que guarde silencio delante de John. ¿A caso John no tiene derecho a saber? —Voy a llamar a mi padre— dice Charlotte. —Louis debe estar por acabar, eh. Mejor nos vamos, Martha— dice la chica y se va antes de que John pida explicaciones.

John solo se queda sentado en la cama mirando fotos de aquella conversación. Le gustaría haber estado ahí para animar esa cara.  Al final termina viendo más fotos, sin duda tenía mejor cara cuando se marchó a Alemania y despejó su mente. ¿Es ese el chico al que conoció? Parece el típico guapo pero estúpido, según lo que le ha contado Louis puede que tenga algunos prejuicios.

Siempre ha llevado ese estilo calmado en su atuendo y su forma de vestir. Es algo que realmente comparten y además combinan extremadamente bien. ¿Qué será aquello que ha visto Charlotte? John también necesito a verlo así que toma el ordenador.

Lo peor no está en el chat de su ex, que también, pero los chats de los amigos de aquella época también le dan algo de contexto.

Victor :
“Louis ??? Il t'a encore frappé ? Vous ne venez pas en classe ?” 11:23

“Réponds-moi. Je t'ai laissé un mot au casier”
11:42

“Si tu t'es disputé avec François, tu peux venir me parler”
11:43

“Je t'ai cherché. Personne ne s'est moqué de vous, n'est-ce pas ?”
12:17

Louis :

“Merci de vous inquiéter. Ça joue. Je vais bien avec François, pas de problème."
15:48

Victor :

“Ce n'est pas vrai. Vous vous êtes disputé avec lui”

Louis:

“Comment sais-tu ça?”

Victor:

Transféré : 
[📷]
«François: Aujourd'hui mon mec n'a pas voulu m'écouter, hahahahaha»

A John le parece increíble que el mayor sea capaz de mofarse de hacerle daño. John está furioso, solo tiene más motivos para odiarlo. De hecho, puede reconocer algunas heridas como cicatrices.

Victor :

“Petit, il t'a fait mal”

Louis:
“Oui, mais c'est de ma faute. Sans préoccupations”

Lleva cinco minutos mirando y ya ha encontrado eso, a saber que ha visto Charlotte. Se siente algo culpable por haber curioseando en todo aquello.

175 Días | Nueva edición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora