54: Martes

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—Miso, ven aquí— dice John esperando a que el gatito le haga caso, cosa que por supuesto no pasa. Solo se acerca a Martha de forma curiosa.

—John, tienes razón, es adorable— asegura Martha tomando al gatito.

—Cuando venga mi hermano no sé qué coño piensas hacer— asegura Charlotte. —La última vez que lo vi con un gato terminó llorando.

—Bueno, entre todos lo podremos cuidar ¿no?— Pregunta Eliza viendo al pequeño. —Se lo diré también a mi novio. Le encantan los gatos.

—Eso, ¿tu novio no vive en un piso? Se lo puede quedar un día que haga falta— dice Martha y la chica asiente.

—Por cierto chicas, ¿puede venir con nosotras a la fiesta? Unos amigos suyos se han marchado de la universidad y está un poco solo— asegura Eliza y todos asienten. —Claro que si.

—¿Cuando hay una fiesta?— Pregunta John.

—Mañana, miércoles. ¿Nadie te había dicho?— Dice Charlotte y John niega. —¡Martha!

—Se me ha olvidado.

—¿Un miércoles de fiesta?— Pregunta John. —No sé si me apetece mucho.

—Inaguran una discoteca— asegura Charlotte. —Seguro que te apetece, con lo que te gusta la fiesta. Venga, John.

—No quiero ser el sujeta velas— asegura el rubio.

—Venga, tampoco nos vamos a estar comiendo la boca constantemente— se queja Charlotte. —Que tú y mi hermano lo hagáis es otra cosa.

***

John se acerca al círculo de amigas. Elizabeth les está presentando a su novio. John se para, reconocería aquellas melenas pelirrojas a kilómetros. Le sorprendieron el día de la primera fiesta.

—Hola— dice sentándose. —Con que eres tú el novio de Eliza.

—Oh, sí. Un placer volver a vernos, soy Alexander— asegura

—¿Os conocéis?— Pregunta Elizabeth. —Qué bien. ¿Y eso?— le cuestiona a Alexander apoyándose en el hombro del chico.

—Una fiesta— asegura Alexander mirando a John que está sentado frente a él.

—Que bien, ya veréis que mañana lo pasamos genial. He preparado almuerzo— asegura Elizabeth. Había traído una canasta hace un rato junto con Charlotte y Ludwika. Las tres chicas se levantan y se alejan un poco.

—Tus amigos son unos estúpidos— asegura John mirando a Alexander y Martha se pone atenta.

—Ey, relájate. Fue divertido— asegura el pelirrojo. —Tu eras el "novio" del profe, ¿no?— Pregunta recordando el día que se vieron en la escalera.

—¿Tienes algún problema con eso?— dice enfadado.

—No, no, solo quería saberlo— asegura Alexander. —Qué bueno, ¿no? Supongo que estarás contento sabiendo que has hecho que mis amigos se tengan que marchar de la uni.

—No entiendo para que os metéis donde no os llaman— asegura John.

—John, calma— dice Martha. Entiende que está molesto por lo de la fiesta y todo lo que esto llevó.

—Sus amigos iban intentando seducir a MI novio. O como se le llame a eso— murmura enfadado.

—No, no, estaban intentando aprobar la materia de TU novio, porque es un cabron corrigiendo, vamos. Eso con el señor Pictet no pasaba— Explica Alexander. —Pero te metiste tu enmedio. No será que tú no haces lo mismo para aprobar.

—¿Yo? No.

—Venga, nos conocemos, eso se te da bien— bromea Alexander levantándose. —Voy a ayudar a Eliza.

175 Días | Nueva edición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora