Peligrosa Atracción

Capítulo 64

Observo a Ashton porque si era verdad, estaba intentando ser profesional y no mezclar las cosas además de intentar por así decirlo dejar atrás de lo que hablamos ayer.

-Solo estoy intentando ser profesional - le contesto mirándolo fijamente.

-Nuestra conversación de anoche... - comienza a decirme.

-Ashton - le detengo. - ¿Por qué haces que esto sea más complicado? - me atrevo a preguntarle.

-Porque sé que aún queda algo entre nosotros - me contesta moviendo sus manos, aunque tuviera sus esposas.

-Eso es lo que crees tu - le señalo. - Pero no es así - le dejo en claro mintiendo en parte.

Lleva sus manos a mi mano que estaba posada en la mesa con un movimiento rápido, intento apartar mi mano rápido, pero él me lo impide.

-No intentes alejarme Antonella... - intento de nuevo apartarla, pero el aprieta sin hacerme daño. - No hagas esto, se sincera contigo misma - su mirada es profunda.

-Soy sincera conmigo misma - le contesto un poco molesta tirando una vez más de mi mano viendo como la suelta. - No quiero que vuelvas a entrar en mi vida - consigo decirle sin dejar de mirar sus ojos, a ver si así se lo creía, aunque en realidad estaba debatiéndome dentro de mí misma.

-No te creo... - me dice serio.

Suelto un suspiro.

-Tenemos que hacer la terapia Ashton así que por favor responde a mis preguntas - intento desviar el tema por completo.

Pero sabía que Ashton no me pondría las cosas tan fáciles.

-Me importa una puta mierda esta terapia - me suelta. - Desde que ayer vi que tú eres la psicóloga me importa una mierda lo informes - se alza un poco más quedando más cerca de mí. - Lo único que me importa es saber lo que tu sientes - me mira fijamente a los ojos como si intentara ver hasta mi alma. - La Antonella que conocí hace cinco años atrás no sabía ocultar tanto sus emociones y me deja más fácil ver que estaba loquita por mi - endurezco mi mirada.

-Eso fue hace cinco años - le enfrento. - Te encontraste con una niñata que estaba pasando por una mala racha y tenia los sentimientos y las emociones disparadas como las hormonas, pero todo eso ha cambiado, la niñata a la cual hiciste daño murió para siempre - la verdad que me estaba quedando a gusto, llevaba tiempo queriendo soltar esto, pero nunca pensé que se lo diría cara a cara a Ashton.

Ashton asiente con su cabeza sin dejar de mirarme ni un solo segundo.

-Sigue, desahógate, suelta todo lo que llevas guardado - bajo un poco mi mirada. - ¿Ahora quién es él que está poniendo las cosas complicadas? - levanto mi mirada de nuevo observándole. - Como son las cosas niñata, ahora eres tú el que te haces la dura y ocultas tus sentimientos por miedo, sin duda la vida da muchas vueltas - no estaba diciendo ninguna mentira, Ashton ahora era aún más sincero. - Él Ashton de antes no te hubiera hablado como lo estoy haciendo ahora - me levanto de mi asiento caminando hacía la ventana intentando tomar distancia para coger una respiración.

Escucho como se mueve y sus pasos acercarse.

-Ashton de ver... - mis palabras son calladas cuando me doy la vuelta volviéndolo a enfrentar y él termina por la distancia chocando sus labios con los míos.

Abro mis labios sorprendida posando rápido mi mano en su pecho empujándolo, pero mi empujón no es ni la mitad de fuerte solo un simple empujón suave que no le aparta ni un milímetro.

Sus labios se mueven sobre los míos, cierro mis ojos soltando un jadeo aun sorprendida sin esperármelo.

Su lengua toca la mía volviendo el beso a más intenso pegándose completamente a mi cuerpo, aunque tuviera las esposas puestas.