Capitulo 135

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Me remuevo soltando un pequeño quejido cuando muevo mi primera pierna bajándola haciendo lo mismo con la otra quedando sentada en la camilla.

Vale... yo puedo... me digo a mí misma tomando una gran bocana de aire cuando me quito la vía soltando otro pequeño jadeo cogiendo un pequeño papel posándomelo apretando fuerte por unos segundos.

Rápido las maquinas comienzan a pitar más fuerte cuando me quito los demás claves y sé que no tengo mucho tiempo para que los enfermeros entraran por la puerta para ver lo que estaba pasando conmigo.

Suelto otro quejido más fuerte que los anteriores cuando me muevo plantando ambos pies en el suelo sintiendo un escalofrió de dolor recorrer cada parte de mi cuerpo.

No podía quedarme quieta sabiendo que mi padre estaba haciendo pagar a Ashton él que estuviéramos juntos, si moría en él intento así seria.

Pego un pequeño bote asustada cuando la puerta se abre entrando Bianca mirándome como si tuviera varias cabezas.

-¿Estás loca? - se apresura a llegar a mí. - No puedes moverte Antonella volviste prácticamente de la muerte... - levanto mi brazo deteniéndola cuando llega a mí.

-¿De verdad creías que me quedaría parada sabiendo que mi padre va a matar a Ashton? - suelto otro quejido acercándome al pequeño armario que estaba entreabierto viendo una bolsa con mi ropa.

-No... no se... ¡Estas loca Antonella! - me suelta nerviosa. - Antonella tienes que volver buscaremos alguna solución... - la corto cuando cojo la bolsa como puedo sintiendo como si llevara mil piedras, pero en realidad era yo que andaba débil.

-¿Solución? No hay solución Bianca, la única solución es ir a buscar a mi padre y hablar con él... solo hay puede ver a lo mejor una opción de que no mate a Ashton - la enfrento. - No voy a permitir que eso pase, le amo Bianca y él me ha demostrado lo mismo - la dejo en claro.

-¡La zorra la que se follaba te ataco y por eso estas en el hospital! - me suelta molesta y nerviosa.

-¡Si! Pero Ashton no tuvo la culpa de lo que paso... - suelto otro quejido. - No hay tiempo de preocuparse, ¿vas a ayudarme a salir de aquí sí o no? Porque si no lo vas a hacer hazte a un lado los enfermeros están por venir - escucho como suelta una mueca quedando pensativa.

Aparto las lágrimas, no era momento de llorar, no tenía tiempo ni para eso ni para fijarme en mi dolor físico, si estaba loca, pero no pensaba quedarme tumbada y esperar a que me dieran la noticia no me lo perdonaría nunca...

Me acerco hacia la puerta no obteniendo respuesta de Bianca viendo como al final suelta otro quejido llegando hasta a mi adelantándose cuando abre la puerta despacio sacando medio cuerpo observando un lado y el otro.

-¿Dónde está Kevin? - la pregunto.

-Salió... - vuelve a meterse cerrando un poco la puerta. - Ahora no hay hombres de tu padre en el hospital y aprovecho para ir a comprar un móvil de prepago para intentar contactar con su otro hermano, no se... - asiento con mi cabeza.

-¿Estás conmigo en esto sí o no? Bianca no tengo tiempo... - suelto otro quejido. - Nada de lamentos... estoy bien... tengo que detener esto - me observa por unos segundos.

-Definitivamente se te pego la locura de Ashton... - niega con su cabeza. - Pero sí, estoy contigo en esto... es una locura, pero no te pienso dejar sola - sonrió.

-Tenemos que salir del hospital sin que nos vean... - atrapo su mano. - No podemos llamar la atención... - difícil porque llevaba la bata, pero me cambiaria en cuanto pudiera.

-Kevin me hablo sobre la parte de atrás del hospital porque si tocaba salir... saldremos por ahí - asiento con mi cabeza dejándome llevar por ella cuando tira despacio de mi mano abriendo la puerta saliendo juntas volviendo a observar nuestro alrededor para después salir mirando a todos lados a cada segundo intentando pasar desapercibidas.

Peligrosa Atracción Donde viven las historias. Descúbrelo ahora