Capitulo 81

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Mientras Antonella estaba durmiendo en su cama en la puerta de la entrada de la casa alguien estaba intentando entrar forzando la puerta de una manera que no hiciera mucho ruido ni dejara huella de estar forzada.

El individuo consiguió abrir la puerta cuando de esta se escucho un clic y la puerta se abrió dejándole paso dentro de la casa.

Una sonrisa escalofriante paso por el rostro del individuo cuando vio que su cometido estaba saliéndole bien, tal como el lo había planificado en unas horas.

Estaba vestido completamente de negro, tenia unas botas pesadas además de llevar un pasamontañas que tapaba todo su rostro menos sus ojos y su boca.

Dio el primer paso plantando el pie dentro de la casa asegurándose que Antonella no estuviera.

Cuando se aseguro planto el otro pie entrando por completo en la casa cerrando la puerta con mucho cuidado de no hacer nada de ruido para no despertarla y que pusiera en peligro los planes de él.

Observo a su alrededor antes de caminar hacia la cocina en búsqueda de lo que quería llevarse.

Se detiene en la mesa viendo una caja pero no lo que quería llevarse, avanza hacia el salón sacando su móvil de su chaqueta de cuero encendiendo la linterna para poder ver mejor todo.

Su mirada se detiene al sofá grande cuando ve la bolsa de Antonella que se llevaba todos los días a su trabajo.

De la bolsa se asomaba una carpeta roja, abre el bolso sacando la carpeta apareciendo otra sonrisa siniestra en él cuando ve que era lo que había venido a buscar.

Deja la carpeta encima del sofá alumbrándolo con la linterna cuando la abre viendo la información de todos los presos del penal donde estaba trabajando Antonella.

Sin pensarlo cierra de nuevo la carpeta apagando la linterna guardándosela dentro de su chaqueta dispuesto a irse como si nunca hubiera entrado a la casa sin el permiso de ella.

Pero entonces escucha una tos que venia de arriba sabiendo perfectamente quien era.

Se dirige hacia las escaleras comenzando a subirlas con cuidado.

Un de los escalones cruje tal vez poniendo en alerta a Antonella como hace un rato cuando creyó que había escuchado un ruido.

El individuo se detiene durante unos segundos esperando por si Antonella sale a revisar, pero cuando ve que no escucho el crujido termina por subir las escaleras caminando hacia su cuarto viendo que la puerta estaba algo abierta viéndose el interior de la habitación un poco.

Termina acercándose a la puerta posando despacio su mano llevando unos guantes para no dejar huella.

Lo había pensando con detenimiento como entrar en la casa sabiendo que no tenia alarma ni cámaras de seguridad.

Empuja despacio la puerta escuchándose un pequeño chirrido que apenas se escucha dejándole entrar a la habitación por completo encontrándose con Antonella durmiendo en la cama medio arropada teniendo puesto lo que parecía un camisón.

Al entrar un poco de luz de la luna por la ventana la sombra del individuo se hace presente cuando se mueve acercándose a la cama quedando al lado de Antonella observándola como duerme.

Se quita su pasamontañas y luego uno de sus guantes alzándose un poco acercándose mas ha Antonella cuando acerca su mano hacia su rostro.


Se echa un poco hacia atrás cuando Antonella se remueve en la cama moviendo sus labios para seguir en su sueño.

Cuando se asegura de nuevo que no despertara vuelve a acercar su mano rozando su mejilla con sus dedos hasta que logra acariciándola con sus nudillos.

Antonella se estremece pero no se despierta cuando vuelve a acariciarla suavemente acercando su rostro al de ella hasta rozar su labios con su mejilla cuando aparta su mano.

La deseaba tanto...

Que sentía rabia al pensar que alguien mas que ya no iba a ser el la estuviera tocando.

Pasa su lengua por sus labios observando los labios carnosos de Antonella viéndolos como una tentación pero sabia que si se la jugaba podría despertar y pillarlo estropeando su plan que hasta ahora estaba saliendo bien.

Así que solo deja un beso débil en su comisura aspirando después su olor para separarse de ella avanzando hacia la puerta mirándola por una ultima vez antes de salir de la habitación cerrando la puerta como estaba y bajar despacio las escaleras marchándose de la casa sin dejar indicios de que estuvo.


Al día siguiente...

Me alzo rápido en la cama sintiendo que se me iba a salir el corazón en cualquier momento tras haber tenido una pesadilla.


Llevo mi mano a mi pecho sintiendo mi corazón latir a mil además del sudor en mi frente.

Intento coger aire calmando mis emociones recordando la pesadilla que habia tenido a tal punto de que parecía que había sido verdad.


Miro a mi alrededor viendo que no había sido verdad, solo una pesadilla.

Me remuevo quedándome sentada en la cama cogiendo mi móvil viendo que aun quedaban quince minuto para que sonara mi despertador.

El tema de Pablo me estaba pasando factura a tal punto de que tuve la pesadilla con el en el que aparecía en mitad de la noche en la habitación y me estaba acariciando mi rostro mientras yo dormía.

Me daba cuenta abriendo mis ojos de golpe encontrándomelo soltando un grito al asustarme y justo en ese momento no pude mas por haberme despertado de golpe.

Había sido horrible...

Mi piel estaba erizada había sentido verdadero terror pero menos mal que todo había sido una mala pesadilla.


Me levanto de la cama caminando hacia el baño para darme una ducha rápida.

Después de un rato en el que me asee y me vestí poniéndome otro vestido baje para prepararme el desayuno.

Puse la televisión para escuchar las noticias mientras tostaba las tostadas y ultando la mermelada desayunando tranquilamente.

Subí rápido a lavarme la boca y maquillarme un poco terminando por bajar para ir a por mi bolso y salir de casa.

Me detengo cuando cojo mi bolso y me encuentro con que no estaba la carpeta con los datos de los presos.

Frunzo mi ceño recordando que deje el bolso en el sofá na mas llegar con la carpeta.

¿Acaso me estaba volviendo loca?

Juraría que había llegado a casa con la carpeta, pero a lo mejor me lo imagine y de verdad me la deje allí.

Niego con mi cabeza cogiendo las llaves y el móvil saliendo de la casa para subirme después al coche yendo al penal.

Después de un rato cuando llego al amigo de Pablo como le deja en la puerta del penal, se dan cuenta de que llego cuando miran hacia el coche cuando lo aparco.

No tuve que decirle nada de trabajar juntos, ahora por eso le tenia que ver todos los días cuando me lo pude evitar.

Cierro la puerta dando al botón escuchándose como se cierran las puertas, sus miradas estaban puestas en mi cuando camino hacia la puerta pasando por al lado de los dos.

Me da tiempo a escuchar lo que dice su amigo a Pablo.

- Pues al parecer no le a gustado el anillo...

Con que Pablo le tenia al tanto de todo... seguro que me estaba dejando como la peor.

Enseño mi identificación pasando por el control cuando me abre las puertas, voy derecha a mi oficina por así decirlo para comprobar el misterio de lo que había pasado con mi carpeta.

Abro la puerta entrando rápido derecha a mi mesa comenzando a remover los papales sin encontrar la dichosa carpeta.

¿Dónde demonios esta?

Abro los cajones sacando todo poniéndolo en la mesa sin encontrarla aun, me acerco a la estantería abriendo otros ficheros buscándolo pero nada.

¡Maldita sea!

Piensa Antonella, piensa en donde la podrías haber dejado...

Me pongo a pensar en todo lo que hice ayer, recordando cuando estuve con Ashton dejando uno de los folios encima de la mesa que luego metí dentro de la carpeta.

Dios mío...

Tenia copia gracias a dios, pero no me gustaba perder las cosas y mas eso donde salia toda la información de mis pacientes y podría acabar en manos de personas mal intencionadas.

Estaba en problemas...

En serios problemas.

Si pudo acabar en manos de algún preso, podía usarlo en contra de algún otro que hubiera en esa carpeta haciendo de las suyas y yo me metería en un gran lio por la protección de datos jugándome mi puesto de trabajo.

Me llevo mis manos a mi cabeza tirando de mi pelo pensando en que demonios hacer.

Tenia que evitar que el director se enterara, porque si algún guardia se la encuentra y se la da al director me podría poner una sanción.

Y en parte estaría en todo su derecho por no hacer bien mi trabajo porque eso era mas grave que un despiste, al menos que me quisiera despedir de golpe.

Las cosas no me podían ir a peor, de nuevo estaba pasando una mala racha, reaparece Ashton en mi vida cuando empiezo mi trabajo, termino con Pablo no poniéndome las cosas fáciles, tengo que esconderme ante de los demás para poder estar con la persona que quiero y ahora pierdo información importante de mis pacientes.

Genial...

¿Qué me iba a pasar mas?

Peligrosa Atracción Donde viven las historias. Descúbrelo ahora