Capítulo 78.- Regreso (Todos)

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—No me cae bien ese chico. No me cae bien —dijo uno de los trabajadores que estaba con KangDae.

—Es muy joven —dijo un trabajador mayor.

—¡No debió hacer eso! Kang tuvo que tomar la responsabilidad solo porque es el hijo del jefe. Es un malcriado... 

KangDae escuchaba en silencio mientras sacaba su teléfono para mirar la pantalla. Estaban en su rato de descanso y se encontraban agotados tras descargar varios camiones de mercancía.

—Se... Señores... —escucharon todos una voz joven y tímida que se acercaba al área de descanso de los obreros. 

—¿Sí? —dijo el empleado más mayor.

—Yo... Mi nombre es Kim MinSuk —dijo el joven haciendo una reverencia— Quería pedirles disculpas por el malentendido del otro día. Fue culpa mía que esas mercancías se llevasen a la sala equivocada. 

Todos se quedaron en silencio, mirándolo.

—¡Lo lamento! —dijo el pequeño MinSuk haciendo otra gran reverencia.

—Señor técnico... —dijo el empleado mayor, dirigiéndose a MinSuk— No se preocupe. 

—Señor técnico —dijo con un tono ligeramente impertinente el empleado más joven, que tendría unos pocos años más que MinSuk—, está bien que nos pida disculpas, pero él fue sancionado —le recriminó señalando con el dedo a KangDae.

—Sí, señor Lee KangDae, su sanción ha sido revocada. He hablado con la coordinadora de área y... 

—¿Por qué has hecho eso? —exclamó KangDae, y luego se dio cuenta de que no estaban solos— Quiero decir, señor técnico de laboratorio, ¿por qué ha hecho usted eso? No era necesario... 

—No se preocupe. Al final no ha tenido consecuencias graves para mí.

Y efectivamente lo había hecho. La coordinadora de área se había quejado al enterarse.

—¿Por qué no me lo dijiste? ¿Permitiste que otro empleado tomase la responsabilidad por ti? ¿Qué clase de jefe quieres ser en un futuro? ¡Tú serás sancionado sin sueldo!

—Pero señora... 

—¡No quiero peros!

—Señora es que... Le recuerdo que yo no tengo salario... 

—Oh... Es verdad. ¡Trabajarás horas extras para arreglar tu desastre! —exclamó ella.

No obstante, eso era algo que MinSuk ya contaba con hacer.

—¡Les he traído un café como disculpa! —dijo haciendo nuevamente una reverencia ante los empleados del área de producción y extendiéndoles una pequeña bandeja.

—¡Oh joven! Usted no tiene que traernos café, por favor... 

—No se preocupe, no es molestia. 

—Oh, señor técnico... ¿No ha traído azúcar? —preguntó el empleado joven.

—¿Quiere azúcar? ¡Ahora mismo se la traeré! —dijo MinSuk apresurándose a por un paquetito.

KangDae se dirigió a él. 

—Escucha, Jiho. La próxima vez que quieras azúcar... ¡Ve a por ella tú mismo! — le espetó KangDae.

—¿Qué pasa hyung? Te estoy vengando. Es la única manera con estos ricachones que se creen dueños del mundo... 

—Si se creyera dueño del mundo... —dijo el empleado mayor— ¿Crees que le estaría sirviendo un café a uno de los simples obreros de su empresa? ¿A un simple trabajador manual? ¿No ves que nos habla con respeto? Mucho más respeto que otros jefes de departamento que ni siquiera nos hablan directamente. Piensa un poco, Jiho.

Los chicos del boxing [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora