Honor

capitulo 3

- ¿Agente Pierce?- preguntó un apuesto imitador de Brad Pitt. Brittany salió del ascensor en el octavo piso de un edificio de piedra rojiza que daba a la parte sur de Gramercy Park. Le tendió la mano con una sonrisa encantadora. - Soy Sam Evans. Los otros están en el interior del puesto de mando. Bienvenida a la Aerie.Tomó su mano extendida, sonriendo- Brittany Pierce. ¿Qué hay para esta mañana?Lo acompañó en un gran loft que había sido redistribuido en cubículos de trabajo y secciones con equipos los cubículos estaban separados por tabiques. El centro de vigilancia ocupaba todo el piso, directamente debajo de la suite ático de Santana López. Una pequeña sala de conferencias rodeada por vidrio llenaba la esquina. Cuando se acercaron al grupo de personas sentadas en el interior, Evans consultar una copia impresa en la mano.- Entrará y programara la semana. Te reunirás con ella a las once en el ático.- Él vio su expresión de sorpresa y se encogió de hombros. - Ella no quiere hablar con nosotros. Dice que si tiene que discutir sus planes, será sólo una vez, y con el comandante del equipo."- Es privilegiada- comentó Brittany. Mientras caminaba, ella estaba memorizando los bancos de monitores de vídeo, grabadoras multi-casete, simuladores informáticos, y una gran red de la ciudad de Nueva York, y la aparición digital de los vehículos de la policía. Era la misma gama de equipos utilizados para controlar la Casa Blanca y sus alrededores, y con el mismo motivo. El Presidente era vulnerable a través de su familia. Para evitar la aparición de la vulnerabilidad, la primera familia necesitaba demostrar que vivian una vida tan normal como fuese posible, no eran escoltados por guardias armados. Por lo tanto, su protección debía prestarse a distancia, con la menor visibilidad posible. La apariencia de la libertad era una artimaña todos ellos conspiraban para perpetuar la seguridad, al parecer, con la excepción de Santana López- Buenos días, la gente- dijo enérgicamente mientras se dirigía a la cabecera de la mesa oblonga. Echó un vistazo a cada cara, haciendo un breve contacto visual con todos. - Teneis una hora para decirme todo lo que necesito saber acerca de esta operación, y todo lo que no crean que deba saber también. Vamos a empezar.Al cabo de una hora durante la cual Brittany escuchó, preguntó, y emitió unas ordenes, los agentes que formaban su equipo sintieron que había una nueva forma de hacer las cosas en la ciudad. Todos los presentes se tomaron en serio su responsabilidad, no por el bien de su empleo en el futuro si no por otra razón, cada uno había sentido la frustración expresada por el anterior comandante del equipo de salida. Ese descontento se habia acentuado por el hecho de que no les gustaba Santana López, aunque ninguno de ellos iba a decirlo, ni siquiera entre ellos. Durante los seis meses desde que Andrew López había sido presidente, la obstructiva, falta de cooperación de su hija había acabado sutilmente con la confianza de los agentes. Una hora con Brittany Pierce les proporcionó la primera sacudida de optimismo que había sentido en semanas.**********- Resumiendo- dijo Brittany mientras se puso de pie y se acercó a la ventana, mirando hacia abajo al parque. Mientras observaba a una anciana desbloquear la puerta que rodeaba el parque, habló, su voz era claramente audible. - La Sra. López no quiere que nos metamos en su vida, ella no quiere nuestra presencia a cada momento ya sea en público o en privado. Sin duda, no quiere que la vigilemos cuando tiene encuentros personales y románticos Yo, por ejemplo, no la culpo.Se volvió hacia el grupo con un pequeño encogimiento de hombros. - El hecho de que a la Sra. López no le guste nuestra presencia es irrelevante. Nuestro trabajo es hacer que ella sea capaz de llevar a cabo su vida con el máximo grado de seguridad posible. No importa dónde esté o lo qué esté haciendo. Ella ha decidido hacer de esto un juego. Tenemos que jugar, y tenemos que ganar. No tenemos que rendirnos si ella cambia las reglas. No hay que seguirle la corriente. Nosotros no podemos esperar que nos ayude a ganar, tenemos que hacerlo por nosotros mismos.Sonrió mientras tomaba asiento. Ahora comprendía por lo menos una de las razones por las que le habían dado esta tarea. - Recuerden que ella no cooperará. No esperen que les sonrían y le digan buenos días. No esperen que les vaya a hacer su trabajo fácil. Ella ha dejado claro que no nos quiere cerca. Ella no va a invitarnos. Nosotros cambiaremos los métodos de vigilancia de protección y las tácticas de investigación. Si no nos puede ver, será más difícil que nos pierda de vista. Si tienes que seguirla para protegerla, entonces iremos donde ella vaya. Tiene que funcionar especialmente desde el ocultamientoMiró fijamente a cada uno de sus agentes, viéndolos como Santana López debe verlos. El equipo está listo, pulido y presentable.- Excepto en actos públicos programados donde la Sra. López esté actuando de forma oficial, nada de trajes, ni corbatas, ni faldas. Ropa de calle, preferentemente algo apropiado para el tipo de lugares que se sabe que frecuentaVio el leve endurecimiento de unos hombros y continuó imperturbable. Era el momento de dejar de dar rodeos sobre el problema principal. - Para que los hombres, creo que la longitud del pelo un poco más largo sería de gran ayuda para empezar. Ya es hora de que dejéis de parecer turistas, o policías.- Bebió el último sorbo de café, reuniendo sus papeles con una mano. - Un poco de investigación también podría estar bien. Quiero un resumen de todos los bares gay y restaurante en la ciudad de Nueva York. Las horas de apertura, tipo de clientela, patrones de tráfico en la zona, etc. Comiencen con los que saben que ha estado, lo quiero en mi escritorio antes de que termine el día. Conozcan a su objetivo, señoras y señores, y habrán ganado el primer punto.Todo el mundo se relajó un poco cuando ella abrió la puerta de la sala de conferencias. Se detuvo en el umbral, volviendose casualmente.- Por cierto Sam, ¿ella sabe sobre el equipo de vídeo dentro de su apartamento?Él la miró con sorpresa. ¿Cómo se había dado cuenta con solo un rápido vistazo por la sección de monitoreo?- Lo dudo- dijo en voz baja. - Si estuviera al tanto de las micro-cámaras montadas en el techo de su loft, que apenas estaría caminando alrededor desnuda la forma en que lo hizo.- Apague los equipos- dijo Brittany rotundamente. - Video del ascensor, las salidas del edificio, escaleras de incendios, y garaje. Sólo bajo mi responsabilidad.**********A las 11 a.m., Brittany tecleó el ascensor hasta el ático, que se abrió en un pequeño hall de entrada frente a una puerta de roble tallada puesto en los ricos paneles de madera. El fondo de pared en las otras dos paredes contiguas al ascensor era de una tela crema, era un modelo completo y de lujosa textura. El efecto era cálido y sensual. Brittany llamó al timbre junto a la puerta.Santana López abrió la puerta un momento después. Tenía el pelo mojado de la ducha, peinados casualmente con los dedos y que caían libremente alrededor de su cara. Llevaba una túnica de seda azul con cinturón suelto que caía justo por encima de las rodillas. Sus piernas estaban desnudas, y Brittany sabía que ella estaba desnuda debajo de la fina tela. El frente se abría lo suficiente para revelar las curvas interiores suaves de los dos pechos. Había un olor de jazmín flotando en el aire. Brittany sintió la hirviente sensualidad que había sentido cuando vio su foto. Mantuvo la mirada cuidadosamente a nivel de sus ojos.- Soy la agente Pierce, Sra. López. Volveré cuando esté lista- dijo neutralmente.- Si quiere llámeme cuando acabe...- No voy a estar disponible más adelante- dijo Santana interrumpiendo la valoración de la actual comandante asignada a su cuidado. Estaba un poco sorprendida. Llevaba el traje obligatorio, pero le quedaba mejor que a la mayoría. No veía la protuberancia de la pistola. Su cabello era largo y de estilo moderno. La chaqueta cruzada estaba abierta para exponer una camisa de lino fino blanco que abrazaba un pecho bien desarrollado y esbelta cintura. Los pantalones con cinturón se adaptaban a los muslos fuertemente musculosos. Santana la encontró sorprendentemente atractiva. La comandante era o impecablemente heterosexual o exactamente lo que parecía ser una lesbiana que no le importaba que lo supieran. Santana se sintió intrigada. - Es ahora o la semana que viene- continuó, disfrutando de su control. No había forma en que la nueva comandante pudiera esperar incluso un par de horas para discutir su agenda.- Ahora estaría bien- Brittany accedió amablemente. No quería una lucha de poder sobre cuestiones triviales. No tenía necesidad de probarse a sí misma de esa manera.Santana se aparto ligeramente a un lado, haciendo un gesto a Brittany señalando el interior del loft. Ella sonrió mientras Brittany evitaba cuidadosamente rozarse con ella. Toda profesional, pensó para sí misma.- ¿Tiene un nombre, Agente Pierce?- Santana preguntó mientras se acercaba a la zona de la cocina. Una barra de desayuno, flanqueada por altos taburetes separa el espacio de la cocina de la sala de estar. Ella se inclinó para sacar dos tazas de los estantes debajo de la encimera, muy consciente de que el movimiento tenía una vista clara de la bata.- Brittany- Brittany respondió, manteniendo su rostro y su voz inexpresiva. Su mente registró la asombrosa perfección del cuerpo de la joven, una imagen de sus suaves pechos, pezones rosa indeleble se grabaron en su memoria. Estaba siendo tanteada, eso estaba claro. Lo que no sabía era el por qué.Santana se enderezó lentamente, en busca de una reacción en la cara de la guapa agente. Tenía curiosidad al no encontrar ninguna reacción.- Brittany- susurró con voz ronca- eso es bueno. Puedes llamarme SantanaBrittany continuó imperturbable - Voy a tratar de no tomar mucho de su tiempo, Sra. López. Si pudiéramos revisar sus planes para la semana, podría dejarla que siguiera con su díaSantana se quedó mirándola, la ira hervía en sus ojos cafés. - No seas condescendiente conmigo, agente Pierce. Ambas sabemos que no va a dejarme hacer nada en absoluto.Brittany asintió con la cabeza. - Perdóname, no quise decirlo de esa manera. Por supuesto, no puedo. Pero puedo hacer que mi presencia y la de mi equipo sea lo más discreto posible.Santana se sorprendió por su actitud conciliadora. Esa era una nueva táctica. Por lo general, trataban de intimidarla con amenazas de informes desfavorables a su padre, como si fuera una niña rebelde en la escuela. O eso, o que prometieran que le dejarían su privacidad mientras se apretaban a su alrededor. No tenía ninguna razón para creer en ella, a pesar de la sinceridad en sus intensos ojos azules. Caminó alrededor de la encimera llevo el café hasta Brittany. Puso las tazas en la mesa junto a Brittany, rozándose con ellaBrittany no se estremeció ante el contacto, a pesar de que su cuerpo registró la presión de los senos de Santana contra su brazo y el calor de un muslo desnudo contra su pierna. Estaba molesta por la reciente excitación que se produjo totalmente involuntaria. Ella mantuvo la respiración consciente y constante de luz.Ella sabe de las cámaras de video. Poner al comandante del equipo en una situación embarazosa en la cinta podría beneficiarla en algún momento, o puede que solo sea parte de un juego. De cualquier manera, Brittany compadecía Daniel Ryan. Santana López era una mujer muy deseable, y si alguien se fijaba en ​​ella, eso podría convertirse en un problema. Santana no tenía forma de saber el reflejo de excitación que le había provocado, Brittany era completamente inmune al atractivo sexual.Santana deliberadamente se acercó más, Brittany le permitió el contacto y permaneció así el tiempo suficiente para dejarle en claro que era consciente de lo que hacía, y que no la molestaría con eso. Ella había conseguido mucha práctica en los últimos seis meses diciendo que no a las mujeres atractivas. Entonces se apartó, metiendo la mano en el bolsillo interior de la chaqueta para el registro del equipo que Sam le había proporcionado.- ¿El calendario?- dijo suavemente.Santana se quedó mirándola, sintió como se ruborizaba. Acababa de ser regañada, de manera sutil, pero muy definitivamente. El rechazo de una mujer fue una experiencia nueva y desagradable. Nunca había sido tan descaradamente provocadora con Daniel Ryan, pero ella había sentido su malestar cada vez que estaban solos, y ella sabía que tenía un efecto sobre él. Brittany Pierce le parecía interesante, hizo que quisiera romper ese perfecto autocontrol. Si ella tiene que tener un carcelero, quería que fuera ella- Sí, vamos de una vez- respondió con irritación, tomando su café y pasar a la sala de estar.Brittany la siguió, señalando el área de trabajo grande en el extremo de la buhardilla. Caballetes estaban abiertos con lienzos montados en ellas y otras obras se apoyaron en todas las superficies. La luz del sol se filtraba por la claraboya, iluminando las superficies descubiertas. Pudo echar un rápido vistazo, parecía que Santana López merecía su reputación como una verdadera artista. Brittany se sentó al otro lado de Santana en uno de los sofás de cuero. Santana metió las piernas debajo de ella cuando se acurrucó con gracia en los cojines. Brittany observó que ella era mucho más hermosa en sus momentos inconscientes que cuando utilizaba su considerable poder sexual como arma. Inmediatamente volvió al trabajo- Te tengo en la apertura de una galería de mañana, la cena en la víspera de Año Nuevo de la Casa Blanca, y asistir al desfile de Macy aquí en Nueva York con el alcalde al día siguiente- Brittany leía la programación. Miró a Santana esperando su confirmación.- Una semana cargada- murmuró Santana. - Eso parece ser- dijo ella secamente.Brittany la miró pensativamente. Ella habría odiado tales intrusiones, pero no había nada que pudiera hacer al respecto. El hecho era que Santana López no había elegido esa vida- ¿Qué pasa con sus planes personales- preguntó Brittany, con los ojos en el rostro de Santana. No iba a pedir disculpas por lo que tenía que hacer. Brittany dejaba en claro que no iba a poner en peligro su propia responsabilidad o la seguridad de Santana debido a la aversión de ésta por la situación.- No tengo ninguna- respondió Santana a la ligera.Brittany se inclinó hacia atrás, dejando el programa a un lado. Sonrió débilmente. - Necesito saber todo lo que se ha programado. Planes para la cena, una hora para tomar una copa, ese tipo de cosas si no sabes, todo lo que tienes que hacer es comprobarlo en el puesto de mando- Sé que todo esto, Agente Pierce- dijo Santana con irritación.- Sí, pero al parecer no eres aficionada a la rutina.- ¿Estarás tu?- Ese no es el punto. Eres la hija del presidente de los Estados Unidos. No necesitas que te diga lo que eso significa. Por favor, hagamos nuestro trabajo, y te prometo que vamos a ser tan discreto como nos sea posible- ¿Esperas que te diga cuando pienso en una relación sexual también? -le preguntó sin rodeos.- Yo no necesito saber lo que está haciendo tanto como cuando lo estás haciendo- Brittany respondió suavemente. Ella sabía que Santana estaba tratando de hacer que se echara atrás, y no podía ceder ahora. - Sería mejor si nos va informando al quedar para pasar la noche en algún lugar que no sea aquí, por ejemplo.- ¿Y si yo no sé de dónde voy a pasar la noche?- Entonces improvisaré- Eres mucho más directa que tus predecesores. ¿No temes que me queje de ti y que termines de vigilancia con algunos diplomáticos extranjeros de menor importancia en su recorrido por la capital?- Su tono era cáustico, pero estudió a Brittany con respecto. La nueva comandante era diferente. Imposible de sorprender, y claramente no se intimidaba ante ella. Un cambio refrescante, era un nuevo desafíoBrittany se rió. - Sra. López, ¡algunas personas consideraría esa asignación como un chollo!- ¿Comparado con esto quieres decir?Brittany se negaba a ser provocada. - Ha sido un placer conocerla, Sra. López. Le ruego que me llame en cualquier momento si hay algo de lo que deseara hablar. Me gustaría repasar su itinerario de cada día. Vaya a la sala de mando si necesita encontrarme- Oh, claro- respondió Santana con una sonrisa, su tono indicaba las pocas ganas de hacerlo. Permaneció sentada hasta que Brittany salió de la habitación, pensando en lo atractiva que era